Luis García Montero y Carmen Noguero durante su comparecencia en el Instituto Cervantes. Foto: FDQ

"Ser director del Instituto Cervantes no consiste solo en preocuparse por la extensión de la lengua española, sino también por la dignidad laboral de sus trabajadores", ha declarado este lunes Luis García Montero en la sede madrileña de la institución antes de dirigirse a Aranjuez, donde se ha celebrado la reunión de su patronato. El poeta, que asumió la dirección del Cervantes este verano tras el cambio de Gobierno, ha trazado ante los medios la hoja de ruta de su mandato.



Entre los puntos principales, por tanto, se encuentra la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores del instituto que promueve la enseñanza del español en todo el mundo. "Se ha producido una fuga de profesorado estable, porque las bajas no se podían cubrir. Eso ha provocado un desequilibrio entre el profesorado de plantilla y el profesorado colaborador". Aspectos como las condiciones de los contratos, los sueldos y las prestaciones sanitarias son prioritarios en la mejora de la dignidad laboral de los trabajadores del instituto. El director del Cervantes ha destacado lo complejo del asunto al tener que tratar con distintas ordenaciones laborales y coyunturas económicas según cada país. Especialmente grave, ha reconocido García Montero, es la situación de los trabajadores del Instituto Cervantes en Brasil, "donde se ha producido una pérdida del 30 % del poder adquisitivo". Según ha recordado, el anterior equipo directivo llegó a un acuerdo con ellos que luego el Gobierno no ratificó, de modo que se declararon en una huelga que el nuevo director ha considerado "justificada". Ahora los trabajadores del Cervantes en Brasil han dejado la huelga y "se está trabajando para solucionar el problema".



Defensa del español en EE. UU.

De dignidad ha hablado también García Montero al referirse a los nuevos centros que se pretende abrir en Estados Unidos, concretamente en Washington y Los Ángeles, en un momento político poco favorable para la lengua española, con los ataques del presidente Trump a la inmigración latina y una creciente intolerancia de algunos ciudadanos angloparlantes ante el uso del español en espacios públicos. "La situación mundial es muy compleja, y sentirse hermanado por una lengua y en una comunidad supone por ejemplo que cada vez que se insulta a alguien en Norteamérica por hablar en español, me están ofendiendo a mí. Esas escenas que estamos viendo de gente increpada por estar hablando en español en la cola de un supermercado es un síntoma al que hay que dar respuesta desde la diplomacia cultural. Y algunas declaraciones políticas sobre países hermanos como México o como otros países con problemas de inmigración en Washington las tenemos que asumir como un problema propio y dejar claro a quien quiera ofendernos que no solo el español es la lengua de Cervantes, de Vargas Llosa, de García Márquez y de Rosario Castellanos, sino que es una lengua digna porque la hablan casi 500 millones de personas como lengua nativa y casi 800 millones de personas ahora. Cualquier persona merece ser defendida en su dignidad cuando está hablando su lengua materna".



Reapertura en Gibraltar

También se abrirá un centro en Dakar, la capital senegalesa, proyecto heredado del anterior equipo directivo del Cervantes, y se reabrirá el centro de Gibraltar, que se cerró hace unos años "por motivos políticos", ha recordado el director. Con el Brexit, es importante "facilitar espacios fluidos en una nueva situación en la que se van a generar distancias", ha explicado. "Una de mis preocupaciones es que en los planes de estudios de Gibraltar desapareció el español de los colegios", de modo que garantizar la presencia de un centro en el que los niños puedan aprender español es una prioridad.



García Montero, al igual que su antecesor, Juan Manuel Bonet, quiere dedicar buena parte de los esfuerzos del Cervantes a estrechar lazos con la comunidad iberoamericana, ya que "el español no pertenece a la Marca España". En este sentido, pretende fomentar la creación de un organismo que integre y coordine a todas las instituciones que promueven la lengua española en Iberoamérica, similar al que aglutina a los Institutos Nacionales de Cultura de la Unión Europea (EUNIC), del que el Instituto Cervantes es miembro junto al Goethe-Institut, la Alliance Française o el British Council, entre otros.



También coincide García Montero con su antecesor al considerar que "el Instituto Cervantes debe ser una institución de Estado, no de Gobierno", y considera que aunque la presente legislatura tenga un horizonte corto en el tiempo, en caso de cambio de Gobierno solo sería necesario un cambio de director, no de programa, ya que "la profesionalización del Instituto Cervantes debe estar por encima de los gobiernos concretos. Aspiramos a cosas muy sensatas que pueden ser desarrolladas en el futuro".



Un museo de la lengua en Madrid

Otro de los planes de García Montero para el Instituto Cervantes es la creación de un museo de la lengua en su sede principal de la calle Alcalá, con el objetivo de "contagiar el amor a la lengua a los turistas, a los colegiales y a la ciudadanía".



A lo largo de su comparecencia, García Montero ha repetido en varias ocasiones que sus planes dependen de los presupuestos que sean asignados al Instituto. Actualmente la cifra roza los 124 millones de euros, pero ha pedido al Ministerio de Exteriores, del que depende el Cervantes, que solicite un aumento al Gobierno para alcanzar los 131. "Tenemos la promesa de que nos subirán el presupuesto, pero eso depende de que se aprueben unos nuevos presupuestos y de las negociaciones en marcha". Carmen Noguero, nueva secretaria general del Instituto, ha recordado que de su presupuesto total, casi la mitad, un 46,5 %, procede de fondos propios recaudados por su actividad docente y cultural.



Tras su comparecencia ante los medios, García Montero y Noguero han viajado hasta Aranjuez para exponer todas estas medidas en la reunión del Patronato del Instituto Cervantes, que ha contado con la presencia de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo (el presidente, Pedro Sánchez, se ha ausentado para acudir al funeral de Montserrat Caballé), y del Rey, Felipe VI, que es presidente de honor del patronato. La reunión ha contado ya con algunas de las incorporaciones aprobadas en el Consejo de Ministros del pasado viernes, entre las que figuran los rectores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el de la Universidad de Salamanca, el de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). También se han incorporado nuevos miembros representantes del mundo de la cultura, como el cantautor Joan Manuel Serrat, la historiadora del arte Estrella de Diego, la poeta María Victoria Atencia, el director de teatro José Carlos Plaza y el actor argentino Ricardo Darín.



@FDQuijano

Las cifras del Cervantes

Centros: 87, distribuidos en 44 países



Presupuesto: 123.942.110 euros (46,5 %, recursos propios; 53,5 %, transferencias del Estado).



Recursos humanos: 972 empleados y 1.273 colaboradores



Matrículas 2017-18: 140.000 (117.960 presenciales, 6.313 en el Aula Virtual de Español y 15.697 en cursos de formación de profesores)



Candidatos al Diploma de Español DELE: 109.350 (el más solicitado es el nivel A2, con 29.620 solicitudes, por ser el requerido para adquirir la nacionalidad española)



Centros examinadores del DELE: 1.050, repartidos en 120 países.



Servicio Internacional de Evaluación de la Lengua Española (SIELE): 8.000 exámenes en 50 países



Prueba de conocimientos constitucionales y socioculturales de España (necesaria para la obtención de la nacionalidad: 67.510 candidatos