Alberto Manzano: "Una canción es poesía si te eriza los pelos de la nuca"
El poeta, periodista y traductor recopila las mejores letras del siglo XX en Antología poética del rock
25 mayo, 2015 02:00Alberto Manzano.
Para Alberto Manzano (Barcelona, 1950), poesía es la conjunción de ritmo, belleza y verdad. Y muchas letras de canciones de rock están repletas de estas tres cosas. Para demostrarlo (una vez más, pues lleva haciéndolo casi toda la vida), ha recopilado y traducido más de 200 canciones en Antología poética del rock (editorial Hiperión) que tratan los temas universales: "el amor, la muerte, la soledad, la revolución...". Manzano emplea el término rock en el sentido más amplio del término, en el que se incluyen desde el blues fundacional al hip hop. De Robert Johnson a Justin Vernon, el líder de Bon Iver. Estas páginas bilingües, con las canciones sonando de fondo, nos ofrecen también una ventana a la Historia musical, poética y general del siglo XX y lo que llevamos del XXI.-¿Qué criterio ha seguido para seleccionar las canciones que aparecen en esta antología?
-El criterio ha sido exclusivamente poético. La selección de los autores la tenía más o menos clara, elegir las canciones ha sido mucho más complicado. Es muy difícil seleccionar solo dos o tres canciones de Leonard Cohen y Bob Dylan, por ejemplo. He intentado evitar lo más obvio y manido, pero es inevitable incluir clásicos como "Suzanne" o "A Hard Rain's A-Gonna Fall". Son monumentos poéticos que tienen que estar en una antología como esta.
-¿Qué tiene que tener la letra de una canción para que sea un buen poema?
-Eso es muy personal. Cada uno experimenta una canción a su manera, pero para mí es muy importante que al leer el texto se me ericen los pelos de la nuca o sienta un puñetazo en el estómago.
-Aquí aparecen canciones de muchos géneros distintos. ¿Qué es el rock tal como se anuncia en el título del libro?
-La palabra rock en este libro incluye todos los géneros que forman parte del gran árbol genealógico del rock: el blues, el country, el folk, la canción protesta, el grunge, el heavy metal, el nuevo rock americano, la música alternativa contemporánea...
-Las canciones aquí recogidas están entre la crónica y la lírica. El autor refleja el mundo de su época pero también expresa sentimientos hondos que son universales. Por ejemplo, el "Estoy tan solo que podría llorar" de Hank Williams.
-Sí, en esta antología aflora la relación del hombre con su medio, urbano sobre todo. Lou Reed es uno de los casos más claros en ese sentido. A Hank Williams, en efecto, lo considero uno de los grandes poetas del rock. Me acuerdo de una anécdota que me contó Leonard Cohen: cuando conoció a Bob Dylan en Nueva York en los 70, brindaron por Hank Williams y la Biblia.
-¿Qué ha aportado el rock a la poesía?
-La poesía del rock ha llegado a estamentos poéticos fuera del clasicismo y el academicismo. Esa es una de las grandes aportaciones del rock. El hecho de que una editorial como Hiperión haya publicado este libro, es una garantía de la calidad poética de sus letras. Es verdad que no es lo habitual, en el rock abundan textos poéticamente muy flojos. Las que aparecen en esta obra son grandes excepciones.
-¿Cómo se traduce una canción?
-Yo siempre intento que la traducción sea fluida para el lector, que no se te hagan grumos en la boca al leerla, y al mismo tiempo ser fiel al espíritu de la canción. Cuando hago adaptaciones para ser cantadas entramos en otro terreno, hay que sacrificar la traducción literal en aras de la rima y la musicalidad. En el caso de una edicion literaria como ésta intento compaginar los dos caminos.
-En el prólogo destaca un hecho clave para entender esta unión de poesía y rock: cuando los poetas de la generación beat ceden el testigo a una nueva generación de poetas-cantantes. De hecho, el número de canciones recopiladas de la década de los 60 multiplica por seis la de los 50.
-La década de los 60 es la edad de oro de la poesía en el rock y de la música en general. Todos sabemos la gran influencia que tuvieron los beats en los autores de esa década. Al oír por primera vez a Dylan, Allen Gingsberg dijo que aquella sería la primera revolución cultural sin derramamiento de sangre.
-La única canción que recoge del siglo XIX es Irene, Goodnight (1886). ¿Por qué abre el libro con ella?
-Porque quería remontarme a los orígenes de todo esto. Y esta canción popular anónima, que ha sido versionada por tantísimos autores, me parecía un buen ejemplo.
-En las décadas de los 70, 80 y 90 se mantiene un número similar de canciones en la antología, pero vuelve a caer un poco a partir de los 2000. ¿Hay menos músicos poetas hoy?
-No, sigue habiendo grandes poetas en las nuevas generaciones de músicos. Lo que pasa es que su talento y su trascendencia aún no han terminado de forjarse. Aún está por ver qué parte de su obra dejará huella en la posteridad.