Tras una época difícil, en 2014 se han consolidado sellos aparentemente menores como El Gaviero, La Bella Varsovia, Ediciones Liliputienses o Kriller, que dan voz a una novísima generación de poetas. Mientras, los mayores, y sobre todo la generación intermedia, han ofrecido este año libros notables, a vueltas con el desengaño, la memoria y la intimidad.
1. Los desengaños
Antonio Lucas
Visor. 92 páginas, 10 euros
Quizá porque "todo estaba pactado/ menos la poesía", Antonio Lucas (Madrid, 1975) ha convertido
Los desengaños en el poemario del año en español.
Parapetado tras una tristeza que no niega la esperanza ni en lo personal ni en lo colectivo, el poeta y periodista se planta ante la crisis -lo personal trasciende la economía- sin ajustar cuentas sino contra sí mismo. Los treinta y siete poemas del volumen son especialmente ricos en asociaciones atrevidas de ideas y en frases sorprendentes. Por eso, como subrayó en su crítica Francisco Javier Irazoki, "Antonio Lucas se ha situado en las primeras filas de la calidad poética española. No imita a sus hermanos mayores; no copia a nadie. [...] En definitiva, el libro Los desengaños es la prueba de su madurez literaria".
2. Más allá, Tánger
Álvaro Valverde
Tusquets. 122 páginas, 12 euros
Hace tiempo que Valverde (1959)
perdió el miedo a nombrar los lugares que le importan. Lugares como Tánger, en el que nació su esposa y que el poeta conoció junto a su familia, rastreando el pasado y descubriendo sus gentes humilde, y su presente, en el que "el silente paisaje de sus ruinas / son arte y aun razón de su belleza". La emoción, la delicadeza de estos versos, no oculta su honestidad: no hay "ninguna magia hueca en los cincuenta textos. Todo transmitido con sencillez sabia", resaltaba Irazoki al reseñarlo.
3. Nocturno casi
Lorenzo Oliván
Tusquets. 128 páginas, 13 euros
De la aspiración de abrirse paso a lo que no se ve, partiendo de lo que se ofrece a la mirada hasta "llegar al hueso de las cosas" nace el último libro de Lorenzo Oliván (1968),
una indagación empapada de sensibilidad, tradición y talento. El resultado es, según Túa Blesa, "lo mejor de su saber poético, intensidad y naturalidad en el decir, música y pensamiento, en una lectura de todo punto gratificante".
4. Ser sin sitio
Álvaro García
Fund. J. M. Lara. 72 páginas, 11'30 euros
Una doble decepción (amorosa y laboral) tuvo la culpa de esta obra en la que Álvaro García (1965)
invoca a vivos y muertos al tiempo que reivindica una poesía más humana que plantea preguntas y no respuestas sobre la vida, el sexo, la muerte... En
Ser sin sitio, el poeta, "que ha querido conectar lo físico y lo inmaterial, demuestra un grado alto de calidad poética", a juicio del crítico.
5. Cuaderno de brotes
Vicente Gallego
Pre-textos. 74 páginas, 12 euros
"Todo se asoma a esa palabra que nunca encontraré y por la que esta vida ha sido tan hermosa" canta uno de los cincuenta y siete poemas en prosa de
Cuaderno de brotes, en el que Gallego (1965) huye de lugares comunes y
encuentra siempre una imagen deslumbrante cargada de sencillez y belleza sutil. Un libro mayor, a pesar de su engañosa simplicidad, "destinado a perdurar".