Nick Cave

Hace tiempo que el Primavera Sound es uno de los acontecimientos musicales más importantes del mundo, una cita que permite el lujo de testar en una semana casi todo lo que tiene que ofrecer la música contemporánea que se realiza en Occidente. A costa de acabar más que agotado, eso sí. El miércoles 30 de mayo arranca con un concierto gratuito en el Parc del Fòrum una maratón de sonidos espectacular. Será Yung Beef, el rey del trap patrio y nuevo ídolo de la juventud española, con su aspecto lánguido de muchacho de barrio duro, quién encienda de manera testimonial la mecha en el Fórum en ese show abierto a todo el mundo en el que también brillarán los escoceses Belle & Sebastian, que siguen haciendo bien lo suyo, o sea, indie pop, sin olvidar echarle un ojo al electropop de la fantástica chilena Javiera Mena o el rock espectral de unos clásicos como Spiritualized.



El jueves 31 de mayo el Primavera Sound celebra su primera jornada grandiosa con un cartel en el que hay para todos los gustos. La reina de la noche será Björk, que acaba de publicar un álbum como Utopia. Acompañada de la producción del exquisito venezolano Arca, la artista ha realizado un disco más político y comprometido, por lo que se espera un show en el que los temas sociales tengan protagonismo. Un clásico moderno como Nick Cave llegará precedido de todas las máscaras que le han acompañado a lo largo de sus más de cuarenta años de carrera: la de punk díscolo, la de crooner de la noche oscura del alma, la de poeta romántico finisecular, la de predicador vehemente… En su último álbum, Skeleton Tree, se ha desnudado más que nunca antes en su carrera. Habrá más pop con los británicos CHVRCHES, que acaban de publicar hace escasos cinco días su nuevo disco, Love Is Dead, en el que insisten en su música discotequera y disfrutable. Y la experimentación también llega de la mano del maestro Sam Shepherd, más conocido como Floating Points, uno de los más insignes experimentadores de la electrónica actual.



Dos superestrellas más para la noche del jueves. The War on Drugs están pasando por un momento fabuloso después de la publicación de dos discos como Lost in the Dream (2014) y A Deeper Understanding (2017) que han colocado al líder de la banda, Adam Granduciel, en lo más alto de la música moderna con su rock plagado de músculo y melancolía. Y en el Primavera Sound más hip hopero de la historia no podía faltar un clásico del certamen como el angelino Vince Staples, un joven que logra contar historias asombrosas y al mismo tiempo ser un incansable explorador de nuevos sonidos, como demuestra en su último trabajo, el epónimo Big Fish Theory. Y atentos a una estrella ascendente como Kelela, que enamorará al respetable con su r&b tan lleno de sentimiento como de elegancia. Los puristas quizá se lleven las manos a la cabeza por la actuación de Amaia, famosa ganadora de Operación Triunfo, que se estrenará en uno de los certámenes más exigentes de la escena mundial con un recital de versiones. Más allá de lo que cada uno quiera pensar, da morbo.



El viernes es el gran día de dos bandas estadounidenses muy distintas pero representativas de lo mejor de la música de ese inmenso país. The National tienen reciente la publicación de un disco fabuloso como Sleep Well Beast, en el que Matt Berninger se sigue postulando como el crooner definitivo. De Atlanta desembarcan los reyes del trap mundial, Migos, tres raperos llamados Quavo (Quavious Marshall), Offset (Ciari Cephus) y Takeoff (Kirshnik Ball), que han puesto patas arriba el panorama con dos discos como Culture (2017) y su secuela, literalmente Culture II, lanzado hace un par de meses, en los que ofrecen un contundente retrato de las duras calles de su ciudad con su particular y reconocible estilo sincopado y lánguido.



El viernes el espectador deberá tomar decisiones dolorosas porque es imposible verlo todo. Hay más hip hop del bueno con la actuación de otra estrella de la escena de Los Angeles como Tyler, the Creator, reciente aún su mejor álbum, Flower Boy, un prodigio de expresividad. Será la gran noche de Charlotte Gainsbourg, que además de tener el mejor apellido posible en el mundo de la música acaba de publicar un disco de pop sensacional como Rest después de unos años dedicada a hacer películas con Lars Von Trier. Al día siguiente, por cierto, asalta el escenario una histórica como Jane Birkin precisamente para tocar las canciones que la hicieron una leyenda junto al insigne Serge.



Y en una línea no muy lejana a la de Gainsbourg Jr. anda Father John Misty, que en su espectacular Pure Comedy (2017) se revela como el rey del melodrama y la sátira contemporánea, además de tener la virtud de escribir algunas de las más bellas canciones del panorama moderno. Joshua Tillman, ese es su verdadero nombre, estrenará ese mismo día su nuevo disco, God's Favourite Customer, del que ya se pueden escuchar cuatro canciones de adelanto. Otra joya de ese mismo viernes son los texanos Cigarettes After Sex, que en su disco de debut homónimo firman algunas de las canciones más emotivas de los últimos tiempos.



El sábado una superbanda como Arctic Monkeys presentará en directo su último y debatido disco, Tranquility Base Hotel & Casino, en el que el carismático Alex Turner ha emprendido un nuevo rumbo musical marcado por la influencia de la música de Estados Unidos en una mezcla muy particular entre espíritu british y melodrama de Broadway que ha dejado descolocados a sus millones de fans. Que no cunda el pánico, también se espera que toquen sus clásicos. De la catarsis de Turner al talento de dos artistas pop que están conquistando el mundo por derecho propio. La neozelandesa Lorde tiene solo 21 años y con su último disco, el exuberante Melodrama, se ha consolidado como una voz fundamental gracias a su gran capacidad para el hit y el calado emocional. Y no muy lejos musicalmente anda la muy talentosa cantante sueca Lykke Li, que estará presentando en Barcelona sus nuevas canciones cuatro años después de su muy celebrado tercer disco, I Never Learn (2014).



Tres grandes bandas más para la noche del sábado. Los californianos Beach House están de estreno porque 7, su último disco, ha salido hace apenas un par de semanas. Con un espíritu más vintage, en su nuevo trabajo Victoria Legrand y Alex Scully se acercan al rock para construir un sonido más "sucio" de gran capacidad inmersiva. De Brooklyn llegan Grizzly Bear, brillantes renovadores del folk con una música que hace del bizarrismo su seña de identidad. Los británicos Slowdive reinaron en la época del shoegaze de los 90 y más de veinte años después de su último trabajo han regresado con un disco que se llama como ellos en el que asombran con un rock adulto muy emocional.



Será la gran noche de la electrónica. The Blaze son un dúo de productores franceses que han alcanzado un gran éxito con una serie de singles en los que se muestran como creadores de unas texturas musicales sensacionales. El británico Jon Hopkins, por su parte, está logrando algunas de las mejores críticas de su trayectoria con su último trabajo, Singularity, en el que sigue demostrando por qué es el rey del sintetizador. Los amantes de la electrónica más desquiciada no querrán perderse la sofisticación de Oneohtrix Point Never y el broche lo pondrá el barcelonés John Talabot, que no por casualidad es uno de los hombres más respetados de la electrónica mundial.