Oskar Alegría, director de cine: "¿Qué sentido tiene contar un viaje con un burro? Nunca lo sabremos"
Periodista, fotógrafo, profesor y cineasta, llega a la Seminci con 'Zinzindurrunkarratz', su exitoso y personal tercer filme tras 'La casa Emak Bakia' (2012) y 'Zumiriki' (2019).
28 octubre, 2023 01:46¿Qué libro tiene entre manos?
Stoner, de John Williams. Una deuda pendiente.
¿Qué le hace abandonar la lectura de un libro?
Últimamente más mi cabeza que el propio libro.
¿Con qué personaje le gustaría tomar un café?
Una tarde en Buenos Aires lo hice con Julio Cortázar. Tomé la guía telefónica, busqué por la C... y di con un Cortázar J. Marqué y resultó ser Julio... un informático nacido en Asunción. Quedamos por celebrar el azar.
¿Recuerda el primer libro que leyó?
El misterio del cuarto amarillo, de Gaston Leroux. Un regalo. Lo leí de un tirón, una noche en la cama, tapado con una manta y alumbrado con una linterna para no despertar a mis hermanos. Mi impresión fue doble: que la lectura puede hacerte temblar, sobre todo si es secreta.
¿Cómo le gusta leer, cuáles son sus hábitos de lectura?
En mi experiencia en el bosque para rodar Zumiriki, cuatro meses aislado y sin contacto en una cabaña, leía mecido en una hamaca. El libro cambia si no se lee en la tierra. Incluso El Quijote se llena de más aire.
[Los burros, por Manuel Hidalgo]
¿Qué acontecimiento cultural le hizo cambiar su manera de ver el mundo?
Diría que un viaje a las Islas Feroe. Desde muy pequeño me paraba a soñar en una foto de un atlas que había en casa. Gasté mi primera nómina para pasar una tarde entera sentado ante esa postal. En la aduana me preguntaron si había estado antes allí. Varias veces, dije. Y no mentí.
Doce festivales, cinco lenguas... ¿A qué se debe el éxito de Zinzindurrunkarratz?
Creo que cuenta cosas pequeñas que son de todos. Eso y un plano talismán. El que usaba siempre Fellini.
¿Qué sentido tiene contar un viaje con un burro?
Nunca sabremos el sentido final. Y mejor así. Si lo supiera, no la habría hecho.
¿Es lo local el primer paso para lo universal?
Pinta tu aldea y pintarás el mundo, decía Tolstói. Y el búho de mi pueblo le sigue. Siempre canta desde la misma rama en la regata Mitxarraka.
¿Cuáles son sus cineastas de referencia?
Los que tienen voz: Herzog, Marker, Mekas, Varda.
[Más cine español que nunca en la Seminci de Valladolid]
¿Qué película ha visto más veces?
Los santos inocentes. Nunca el filme fue tanto o más que el libro.
¿Qué tipo de música escucha y en qué soporte?
Cuando viajo, Atahualpa Yupanqui. Él lo decía desde París: cabalga lejos, pero con tus espuelas. Otro gran candidato a un café eterno.
¿Le importa la crítica, le sirve para algo?
El que diga lo contrario miente. Tengo pendiente otro café con un escocés llamado Robert Allen. Él firmó mi primera crítica. Se aburrió. No estaría mal hacer un filme con su dictado.
¿Entiende, le emociona, el arte contemporáneo?
Aquí seré agorero. Hay un gran vacío y mucha pirotecnia... Como decía aquel actor japonés antes de lanzarse a besar a una chica: “Yo quiero contenido, no forma”.
¿Cuál ha sido la última exposición que ha visitado?
Nicolás Ardanaz, en el Museo de Navarra. Volviendo a lo anterior, son fotos de las de antes. Es decir, llenas. Esta vez de silencio.
¿De qué artista le gustaría tener una obra en casa?
Pues de uno local, por si lee esto y me la regala. El pintor Pedro Salaberri. Hace lo mismo que el búho, pero con los colores.
¿Le gusta España? Denos sus razones.
Con una basta, la misma que apuntaba Dalí al preguntarle qué salvaría de un incendio en El Prado: el aire de Las Meninas.
¿Qué medida urgente tomaría para superar la crisis del sector cultural?
Quizás el error sea hablar de lo “urgente”. Conviene más pensar como los burros, en zigzag. Todavía hoy se usan para trazar el camino más inteligente. Nunca pierden la altura al remontar una pendiente. Son máquinas de tiempo.