Recreación de la nave 'Chang'e 4' en la Luna.
La sonda Chang'e 4 logra un nuevo hito en la relación del ser humano con el satélite natural de nuestro planeta.
La misión realizará tareas de observación astronómica de radio de baja frecuencia, análisis de terreno y relieve, detección de composición mineral y estructura de la superficie lunar poco profunda y medición de la radiación de neutrones y átomos neutrales para estudiar el medioambiente del polo sur del satélite de la Tierra.
Chang'e 4 tardó tan solo 4 días en recorrer los 384.400 km que de media separan a la Tierra de la Luna. La sonda partió el 8 de diciembre en un cohete Gran Marcha 3B desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang (Sichuan), en el suroeste del país asiático, y cuatro días más tarde entró en la órbita lunar. La Administración Nacional del Espacio de China (ANEC) recortó la órbita posteriormente en dos ocasiones, la última de ellas el pasado 30 de diciembre. Esta madrugada alunizaba finalmente en la zona prevista: la cuenca de Aitken, en el polo sur del satélite.
La sonda está compuesta por un módulo y un vehículo explorador y se comunica gracias al satélite Quequio, puesto en órbita en mayo y que opera como "espejo" trasmisor entre la base en la Tierra y la Chang'e 4. El programa Chang'e comenzó con el lanzamiento de una primera sonda orbital en 2007 y desde entonces ha llevado a la Luna cuatro aparatos. El objetivo final es llevar al satélite de la Tierra una misión tripulado.