Filipa César, ansiedad, ingravidez
Rapport Raccord
20 septiembre, 2007 02:00Un fotograma de Alle der Kosmonauten, 2007
Filipa César que, en su corta y brillante trayectoria, comenzó por retratar, como fascinada, los gestos de ansiedad de individuos en situaciones cotidianas de incomunicación social (la incomodidad tensa de la sala de espera en Llul, 2002; la impaciencia que en algunos rostros transparentaba miedo ante los paneles de horarios de la estación ferroviaria Zoologischegarten en Berlin Zoo, Part 2; y la perplejidad rayada de los turistas ante el Reichstag en Aura, mostrado en 2005 en el Espacio Distrito Cu4tro), ha evolucionado en sus últimos trabajos hacia la fase terapeútica-discursiva, mostrando su interés en Ringbahn (2006) por el Síndrome de Aspergen -que impidiendo el nivel normal de comunicación lingöística, por la incomprensión de situaciones difusas, revela un importante déficit de competencias sociales-; y por el método PNL en Rapport (2007), que se proyecta en esta exposición. En el modeling de la Programación Neuro-Lingöística (PNL) es fundamental la relación empática entre A (el cliente), B (el conductor) y C (el testigo). Y si el espectador tiene cierta paciencia, podrá comprobar la habilidad de César para articular la densidad del proceso sufrido por sus participantes, con un muy afilado sentido del ritmo en el montaje.
Por otra parte, la serie de fotografías en blanco y negro de los numerosos rodajes cinematográficos que últimamente está albergando la ciudad de Berlín, Raccord (2007), quedan enmarcados en la línea de trabajo sobre la ficción de la realidad que ya estaba presente en su anterior F for Fake (2005), inspirado en el largometraje de O. Welles.
Sin embargo, el relato que quizá pueda resultar más pregnante en esta exposición, y ligado a sus precedentes Transmediterraneo y Tunis encargados por el Centro de Arte Santa Mónica en 2004, sea Allee der Kosmonauten, en donde la artista lusa revela la posibilidad de establecer una mirada personal, sagaz y poética atendiendo a los elementos básicos de filmación. Ya se apuntaba en Tunis, donde la sedimentación de sal y la barra de agua en la ventana del barco determinaban una visión hipnótica reforzada por el monótono ruido del motor, sólo interrumpido a intervalos por megafonía con una voz de mujer que, en italiano, delataba la dificultad de pronunciación del nombre árabe de los pasajeros.
Allee der Kosmonauten es un largo travelling que recorre en círculo un pasaje peatonal de la Avenida de los Cosmonautas en la antigua Berlín Este. La cámara, ligera y pausada, recoge la arquitectura prefabricada y ya remozada de un barrio residencial, de ese simpático modernismo futurista que entonces pretendió ser modélico. El nombre de la avenida alude a Sigmund Jähn y Waleri Fjodorowitsch Bykowski en su colaboración entre la RDA y la URSS. Y en conjunto, el paseo se va convirtiendo en una elipsis cargada de sentidos, como el eclipse de una modernidad tan próxima y remota, y ahora deshabitada y vacía, bajo el raso azul del loop. Pero el mérito de este rodaje en 16 mm., con grúa y cámara fija que simula visión subjetiva, está en explicitar la vanidad y fugacidad de aquel sueño, de todo sueño, llevando al espectador al estado de ingravidez.