Ilustración: Luis Parejo
¿Qué libro tiene entre manos?
The Wretched of the Screen de Hito Steyerl y Nada de Carmen Laforet.
¿Qué libro abandonó por imposible?
Cuando era joven ninguno, ahora alguno que otro.
¿Con qué escritor le gustaría tomar un café mañana?
Teresa de Jesús.
¿Recuerda el primer libro que leyó en su vida?
Sinceramente no.
¿Cuántas veces va al teatro al año?
Pocas, aunque recientemente he visto la ópera Lulú.
Cuéntenos la experiencia cultural que le cambió la vida.
No creo en las mayúsculas. Dicho esto, quizás la lectura de Florentine Nights de Marina Tsvetayeva.
¿El arte contemporáneo es una nebulosa sin reglas?
Ni nebulosa ni sin reglas: es mirar desde el otro lado; la experiencia contenida a veces en una línea. Es el vértigo de la transformación con las nubes y claros de la memoria, con autodisciplina, rigor y método.
¿Quién manda en el mundo del arte?
Los museos, sus directores y los comisarios asociados con vínculos a las galerías fuertes que, en parte, patrocinan las exposiciones. Los museos hoy también crean mercado. Hablo de la experiencia americana. En Europa se está copiando este patrón. Quizás Duchamp tenía razón cuando dijo eso de que "el arte del futuro será subterráneo".
¿Nos revela su peor experiencia en el mundo del arte?
La situación de España me causa tristeza: la carencia de sociedad civil, la falta de educación y cierta ignorancia. ¿Cómo pueden decir ciertas eminencias que no hay artistas válidos? Si fuera así tendríamos una sociedad muerta. Quizás, lo que no hay son buenas escuelas, ni intercambios culturales, ni colecionismo. La sociedad no es lo suficientemente plural. La curiosidad no se ejerce, no somos tan ricos como Alemania o Reino Unido.
¿Cuál ha sido la última exposición que ha visitado? Ejerza por favor de crítica, en dos o tres líneas.
La de Walid Raad, un artista brillante. Pero al salir del MoMA, me embargó una profunda tristeza. ¿Arte político, la estética de la catástrofe, la crítica al mercado, y todo eso en el MoMA? Lo percibí como excesivamente paradójico y casi perverso. Llegué a casa y me puse a releer el Estado de excepción de Giorgio Agamben.
¿Sobre qué aspecto del arte pondría el grito en el cielo?
Sobre el paternalismo de la sociedad española. Parece que en España no hay mujeres artistas, ni poetas, ni novelistas, ni directoras de cine, ni fotógrafas, ni historiadoras, ni filósofas, ni cocineras, ni educadoras de valía. Cada vez que vuelvo a Madrid lo veo todo igual. Necesitamos reciclarnos y que venga alguien ilustrado que sepa y tenga la voluntad de crear una Ley de Mecenazgo.
¿Qué música está escuchando? ¿Es de iPod o de vinilo?
Escucho la radio.
¿Le importa la crítica? ¿Le sirve para algo?
Todos somos parte del juego.
¿Es usted de las que recela del cine español?
Vi una película en mi último viaje que me pareció buena, de Fernando León de Aranoa. Pero como no te apresures, antes de darte cuenta ya han quitado las películas españolas de la cartelera. ¡No lo ponen muy fácil!
Alguna obra de teatro que le dejara clavada en la butaca...
Mahabharata. Hace años que la vi en Madrid.
¿Cuál es la película que más veces ha visto?
Rashomon, de Akira Kurosawa, por la escena de la lluvia.
¿Qué libro debe leer el presidente del Gobierno?
Yo le diría que se paseara por las calles de Madrid. La calle ha sido fuente de inspiración para grandes artistas. ¿O no fueron las acampadas de la Puerta del Sol grandes instalaciones visuales del sentir contemporáneo?
¿Le gusta España? Denos sus razones.
Nací en Valencia y soy de madre catalana. El olor del azahar, el de los arrozales anegados de agua llegando a Cullera, el de los jazmines de Rocafort, la luz del Mediterráneo... Todo lo echo de menos.
Regálenos una idea para mejorar la situación cultural.
Generosidad, implicación y responsabilidad de la sociedad civil.
Menos IVA y más...
...apoyo a lo francés, ¡please!