José Luis Arellano
Dirige a la Joven Compañía en Fuente Ovejuna con versión de Juan Mayorga
Pregunta.- ¿Qué le llevó a esta versión de Fuente Ovejuna?
Respuesta.- Nos decidimos a montarla básicamente por la necesidad de mirar los clásicos desde una energía nueva. Parece que el teatro clásico está destinado a artistas algo más curtidos en las tablas. Es cierto que el verso y el género necesitan de unas habilidades que sólo dan la experiencia y una formación muy completa. Pero creo que un actor joven puede dotar a la obra un impulso, un riesgo y una nueva verdad.
P.- ¿Qué nos dice Lope de Vega en el 2015?
R.-Grandes cosas. Como todos los buenos clásicos lanza dardos desde el pasado que hoy nos llegan con igual vigencia. Temas ya muy conocidos como el abuso de poder, las tiranías políticas, la corrupción, la lucha de un pueblo al que le han robado la dignidad por encontrar la justicia perdida, la violencia de Estado, etc. Muchos se nos presentan con una modernidad inaudita. Pero sobre todo, nos interpela como sociedad, como españoles que se preguntan de dónde venimos, por qué actuamos así, dónde están nuestras raíces... Su texto nos hace encontrar cuál es el origen de esto que llamamos España, incluso Europa, y el lugar donde está hundida nuestra herencia cultural.
P.- ¿Qué elementos ha utilizado para actualizarla?
R.- La propuesta que hacemos es la de Lope aqunque es verdad que utilizamos elementos contemporáneos para narrar teatralmente el acontecimiento. Nos interesan mucho las nuevas formas de contar historias. Pero el texto y la esencia es de Lope, versionado magistralmente por Juan Mayorga.
Escena de Fuente Ovejuna de la Joven Compañía. Foto: Javier Narval
P.- ¿Dónde reside su modernidad?R.- La modernidad viene dada por la mirada. No le contamos esto a una audiencia del Siglo de Oro, sino a un público del siglo XXI con problemáticas similares pero distintas a la vez. Con diversas formas de mirar y de sentir. O al menos eso creo, porque todo lo que podamos saber de esa época está en los libros y no, obviamente, en nuestra experiencia. De modo que trato de pensar en cómo lo habría hecho él, en ver qué quiero contar con este texto y en pensar qué puede interesarle al público de hoy. Partiendo de ahí, he seleccionado, junto a los actores y al resto del equipo, los elementos más adecuados para que la esencia de la historia que creó Lope nos llegue igual de nítida.
P.- ¿Cómo ha sido la puesta en escena con diez actores sobre el escenario?
R.- Maravillosamente compleja. Ha habido que inventarse una forma de narrar con diez actores lo que se narra con muchos más. Espero que lo hayamos conseguido. Es verdad que cuando cuentas la esencia de las cosas, puedes despojar el hecho teatral de personajes y situaciones válidas para la época, pero no para hoy.
P.- ¿Ha utilizado otros montajes de referencia?
R.- Siempre uso múltiples referencias para aumentar artísticamente mi mundo. No sólo de otros montajes teatrales, también me sirvo del cine, la música, el cómic, los videoclips, la publicidad, cualquier cosa que me valga de fuente de inspiración... Uso muchos trabajos de otros artistas. Me interesa por ejemplo cómo se viven los clásicos desde Europa, cómo se pervierten, se releen y se modifican. La prensa es otro elemento básico para mí. Siempre recorto artículos que me dirijan a lo que estoy haciendo en ese momento. Voy a los ensayos y les leo a los actores, antes de iniciar el entrenamiento, cualquier noticia que considere cercana a la historia que estamos construyendo. Es una manera de sentirme vivo y de no perder el compromiso con el hoy que a mí me parece tan importante, aunque el pulso, como es en este caso con Fuente Ovejuna, nos venga del pasado.