Rafa Nadal desata la ilusión y vence a Cachín para colarse en los octavos del Mutua Madrid Open
El balear se deshizo del argentino en un partido épico a tres sets (6-1, 6-7 y 6-3) y volvió a demostrar que su nivel tenístico sigue subiendo.
29 abril, 2024 19:17Otro regalo para todos. Rafa Nadal jugará al menos un partido más en la pista central de la Caja Mágica de Madrid después de vencer a Pedro Cachín (6-1, 6-7 y 6-3) en un partido épico que duró más de tres horas y que tuvo de todo. El balear mostró su cara más arrolladora, pero también la más sacrificada cuando tuvo que bregar hasta la extenuación en el segundo y el tercer set. [Así vivimos la victoria de Rafa Nadal en el Mutua Madrid Open]
La primera manga no tuvo historia. En realidad, el interés estuvo en ver cómo la ilusión se iba desatando cada vez un poco más con el paso de los juegos observando el nivel de Rafa Nadal. Consiguió el break en el primer juego del partido y a partir de ahí todo fue rodado.
Rafa ganó en confianza, dejó momentos de un tenis excelso sobre la pista y cualquiera que no supiera del contexto del encuentro podría pensar que se trataba de un partido cualquiera de Nadal años atrás. El balear sirvió a las mil maravillas, voleó, corrió por la pista sin miedo a lesionarse y sobre todo dejó golpes con ángulos imposibles, como los de antaño.
Nadal blowing Madrid minds 🤯@RafaelNadal #MMOPEN https://t.co/6pUmo4ICRn pic.twitter.com/qXBEgIdcHO
— Tennis TV (@TennisTV) April 29, 2024
Pero todo cambió en la segunda manga. Como el día y la noche, Pedro Cachín dejó una versión opuesta y desconocida hasta el momento que se llevó por delante las intenciones que tenía Rafa de cerrar el partido por la vía rápida. Pronto logró la rotura de servicio que le hizo ganar en confianza, mientras que a Nadal se le vio ir a remolque.
Eso sí, el balear sigue teniendo una capacidad de resistencia y de sacrificio fuera de lo común y jamás se desentendió de la pelea por este set pese a que parecía que estaba todo perdido. Un segundo break puso las cosas casi imposibles, pero no tardó en recuperar uno de ellos. El segundo lo recobró para el 5-5, cuando Cachín sacaba para sacar el set.
Acto seguido el argentino rompió y parecía que todo se había acabado, pero Nadal se sacó otro truco de la chistera para forzar el tiebreak. El desempate fue una montaña rusa, pero el argentino firmó un resto increíble aprovechando la subida del español a la red para hacerse con el set.
El tercer y definitivo parcial tuvo de todo. Rafa comenzó mandando, Cachín recuperó el break y después Nadal lo volvió a ganar. Con más de tres horas de tenis en el cuerpo ninguno de los dos evitó intercambios largos, pero aquí el rey sigue siendo Nadal, que se medirá al checo Lehecka en los octavos de final.
A la épica
Una vez más el público acudió a la Caja Mágica con la duda de si sería el día de presenciar el último partido de Rafa Nadal en Madrid. Tres horas después, los aficionados salieron exultantes del recinto sabiendo que al menos habrá una nueva oportunidad de verle en directo tras su exhibición ante Cachín.
Lo que sucedió en el primer set hacía pensar en un encuentro casi de trámite, ahorrando energías para la siguiente ronda y soñando con llegar a rondas más avanzadas. No es, sin embargo, el plan de Rafa jugar demasiados partidos en este Mutua Madrid Open para seguir su plan de puesta a punto para Roland Garros.
El 6-1 del primer parcial no mintió. Nadal fue superior en todo a un Cachín que perdió su servicio nada más comenzar y que no se encontró en ningún momento. El balear golpeó como quiso y se movió con rapidez sobre la pista, así que sacó de quicio al argentino, que lo dejó todo para el segundo set.
Aquí, en efecto, Cachín subió el listón y rompió el servicio de Rafa nada más comenzar. De hecho logró una segunda rotura, algo que hizo pensar en que el set estaba visto para sentencia, pero entonces Nadal reaccionó hasta el punto de forzar el tiebreak de una manera impresionante.
Ahí se vivió de todo hasta que Cachín, al resto y con un revés increíble aprovechando la subida de su rival a la red, cerró la muerte súbida para forzar la tercera manga.
Vuelta a empezar para los dos y todo el mundo pensando en cómo estaría el físico de Rafa. Estuvo bien, muy bien, porque el partido llegó hasta las tres horas y ahí demostró ser mejor que su rival. El exnúmero 1 del mundo sigue teniendo un toque mágico que le permite sacar estos partidos adelante. Ahora se verá las caras con Lehecka en los octavos de final, su cuarto partido en este Mutua Madrid Open.