Un paso más cerca del sueño. Carlos Alcaraz tuvo que remontar para meterse en los cuartos de final de Wimbledon. El tenista español comenzó perdiendo el primer set frente a Matteo Berrettini, pero acabó llevándose la victoria en cuatro mangas (3-6, 6-3, 6-3 y 6-3). [Así vivimos el partido de octavos entre Alcaraz y Berrettini]
El de El Palmar vivió en la pista central un gran partido y consiguió el billete para los cuartos, en los que se verá las caras con Holger Rune. Nada más terminar el partido, 'Carlitos' analizó el choque contra Berrettini: "Sabía que iba a ser muy duro, él es un gran jugador y llegó a la final aquí".
"Estaba jugando muy bien. No es fácil remontar después de perder el primer set, pero sabía que iba a tener mis oportunidades. Tenía que seguir concentrado, es algo en lo que trabajo, en no perder la cabeza. Y creo que lo he hecho genial en esa parte. Estoy muy feliz por darle la vuelta a este gran partido. Estoy con hambre de más", agregó.
Hambre de más y un gran sueño por cumplir. Un sueño que mantiene desde que era un niño y que nunca ha ocultado: ganar Wimbledon. "Esto es algo que quería, el año pasado perdí en cuarta ronda y quería llegar a los cuartos de final. Ese era el primer objetivo. Ahora busco más", afirmó Alcaraz.
El sueño de Wimbledon
'Carlitos' fue preguntado entonces por lo que significa jugar los cuartos de Wimbledon ante Rune, un tenista nacido como él en el año 2003: "Mi sueño es jugar una final aquí y ganar el título. Espero conseguirlo este año. Pero, ahora mismo, está genial llegar a cuartos de final. Es genial jugar contra Rune, dos jóvenes consiguiendo sus sueños y luchando en cuartos de final, es bueno para el tenis".
[Alcaraz jugará por primera vez los cuartos de Wimbledon tras desmontar a Berrettini]
"Con Holger he coincidido en muchos torneos desde que teníamos 12 años, hemos crecido juntos. Jugar unos cuartos de final de Grand Slam contra él es genial. Yo los voy a disfrutar. Y los aficionados espero que también", sentenció un Carlos Alcaraz que jugará este miércoles su primer partido de cuartos de final de Wimbledon.