Tremendo susto para Rafa Nadal durante su partido de segunda ronda del US Open. El tenista español llegó a pensar que se había "roto la nariz" por un fuerte golpe que se dio de forma involuntaria con la raqueta. Por momentos se creyó que no podría seguir jugando el encuentro contra el italiano Fabio Fognini.
"Al principio pensé que me había roto la nariz, hacía mucho daño. Parece que no está rota, aunque no estoy seguro. Se está hinchando, pero es solo un golpe", afirmó Nadal en la rueda de prensa posterior al encuentro.
El impacto se produjo en el cuarto parcial, cuando Nadal iba ganando 3-0 tras salir de una situación muy complicada que le vio ir perdiendo 2-6 y 2-4, sufriendo mucho para mantener sus turnos al saque.
Pese al aparatoso corte y al fuerte golpe en la nariz, el español consiguió imponerse por 2-6, 6-4, 6-2 y 6-1 y se citó en la tercera ronda con el francés Richard Gasquet.
"Sabía que tendría algún problema (tras el golpe), pero al final gané ese juego. Lo más importante en este deporte es que cuando estás jugando mal, no tienes que estar demasiado lejos en el resultado, y cuando juegas bien, tienes que intentar acelerar", afirmó.
No se escondió Nadal y definió su arranque de partido como "un desastre", pero destacó que es una persona "positiva" y que siempre intenta darse una oportunidad para meterse en el partido.
"La confianza no la pierdo hasta que esté fuera", recordó.
"Había un momento en el que estaba haciendo tal desastre que no estaba consiguiendo pausarme. El ritmo era mucho más elevado de lo que es habitualmente, incluso sin hacer puntos largos. Me notaba muy acelerado y eso no me permitía pensar con claridad y actuar con mis estándares de juego", aseguró.
Consideró además que el deporte "es simple aunque a veces se le quiera dar una complejidad que muchas veces no existe" y que cuando las cosas se ponen complicadas es importante "no desesperarse" y hacer las cosas simples.
"Lo importante es tener la humildad para tolerarme y perdonarme los errores. No me creo tan bueno como para no poder cometer errores. Cuando las cosas van muy mal la pelota se tira al centro, para que el otro te gane los puntos", afirmó Nadal.
El mallorquín, ganador de 22 'grandes', incluidos el Abierto de Australia y el Roland Garros de este año, ganó por 2-6, 6-4, 6-2 y 6-1 y blindó además su billete para las Finales ATP del próximo noviembre en Turín.
"Sabía que estaría allí en Turín, al haber ganado dos 'grandes', pero es una buena noticia sobre todo con 36 años. Es mejor de lo pensábamos cuando empezamos el año. Estoy feliz, pero tengo que seguir empujando. Estoy feliz por seguir vivo", dijo.