La atleta cubana Yulenmis Aguilar ya es ciudadana española a falta de jurar la Constitución y firmar los papeles. Este martes, el Gobierno le ha concedido la nacionalidad por carta de naturaleza a la lanzadora de jabalina de 27 años.
La deportista nacida en la ciudad cubana de Bayamo y afincada en Oleiros (A Coruña) desde hace más de tres años solicitó el cambio de nacionalidad a finales de 2022, pero los trámites burocráticos han alargado la situación hasta este martes. En las últimas semanas, comenzaron los contactos de manera más seria y a principios de marzo ya se había enviado toda la documentación al Ministerio de Justicia.
Ahora comienza una nueva lucha en los despachos. Desde hace días, la Real Federación Española de Atletismo (RFEA) ha iniciado los contactos con World Athletics para que el cambio de nacionalidad a representar en los eventos internacionales sea lo antes posible y pueda llegar a la temporada de verano ya como española. Según las primeras sensaciones, hay optimismo para que Aguilar pudiera recibir el transfer necesario para competir en los próximos Juegos Olímpicos de París con colores de España.
Sería una gran noticia para la delegación española olímpica ya que se abre de lleno una opción de medalla en los Juegos de París 2024. Y es que, Aguilar puede presumir de tener la mejor marca mundial del año en lanzamiento de jabalina (63.90) lograda el pasado 24 de febrero en el Campeonato de España de Lanzamientos Largos.
'Olvidada' por Cuba
Yulenmis Aguilar fue ninguneada en la selección de Cuba en 2018. Ese fue el "premio" que recibió tras obtener la medalla de bronce en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Colombia. Simplemente le dijeron que "no contaban con ella para la siguiente temporada".
Aguilar sufrió mucho por esta decisión. Su vida deportiva se convirtió en "un calvario" en que las lesiones que presentaba en las rodillas, los hombros y los codos la empujaron a retirarse por cinco meses. "No quería saber nada del deporte. Entré en depresión y comencé a subir mucho de peso", contó a La Voz de Galicia.
La cubana contactó al entrenador Raimundo Fernández, que dirige la Escuela de Lanzadores de A Coruña y viajó a España. "Sus primeros seis meses aquí fueron un calvario de fisioterapeutas, médicos y rehabilitadores", subrayó Fernández.