El mundo de la Fórmula 1 sigue con atención las negociaciones entre Adrian Newey y Aston Martin F1, una posible alianza que podría redefinir el panorama competitivo del Gran Circo. Sin embargo, una cláusula en el contrato actual del gurú de la aerodinámica con Red Bull podría estar retrasando cualquier anuncio oficial, generando incertidumbre y expectación en el paddock.
Adrian Newey, considerado uno de los mejores cerebros en diseño dentro de la Fórmula 1, decidió hace unos meses que era hora de dejar su puesto como director técnico en Red Bull, donde ha sido una pieza clave desde 2006.
Aunque seguirá trabajando para la escudería de Milton Keynes hasta marzo del próximo año, ha comenzado a explorar nuevas oportunidades, despertando el interés de varias escuderías de Fórmula 1: Ferrari y Aston Martin siempre han estado a la cabeza en todas las apuestas aunque también han sonado otras como McLaren y Williams.
Fernando Alonso, en una parada en boxes en el GP de Gran Bretaña
En las últimas semanas, Aston Martin, encabezado por Lawrence Stroll, ha emergido como el gran favorito para hacerse con sus servicios. Sin embargo, debido a un acuerdo con Red Bull, no se podrá hacer ningún anuncio oficial sobre los futuros planes de Newey hasta septiembre.
Esta cláusula es parte de la indemnización acordada entre Red Bull y Newey para permitir su salida anticipada, restringiendo cualquier confirmación pública de sus próximos pasos hasta el otoño.
Las demandas de Newey
Las negociaciones entre Newey y Aston Martin han sido intensas y están en una fase avanzada. El británico visitó recientemente, en secreto, la sede del equipo británico en Silverstone, lo que indica un fuerte interés de ambas partes por cerrar el acuerdo. No obstante, aún no se ha firmado nada definitivo, y el ingeniero está sopesando cuidadosamente sus opciones.
Una de las principales complicaciones ha sido el salario solicitado por Newey. Inicialmente, el ingeniero británico pidió un salario anual de 50 millones de libras esterlinas (aproximadamente 59 millones de euros), lo que lo convertiría en el empleado mejor pagado de la escudería.
Posteriormente, mostró flexibilidad y redujo su demanda a la mitad, quedando en 25 millones de libras esterlinas (unos 29 millones de euros). A pesar de la rebaja, esta cifra sigue siendo considerablemente alta, superando el salario del primer piloto de Aston Martin, Fernando Alonso, quien se estima gana entre 15 y 20 millones de euros anuales.
Movimientos estratégicos
Mientras las negociaciones con Newey continúan, Aston Martin ha estado muy activo reforzando su equipo técnico. En una importante reestructuración organizativa, anunciaron la incorporación de Andy Cowell, ex jefe de motores de Mercedes, como CEO del Grupo a partir del 1 de octubre de este año.
Martin Whitmarsh, el actual CEO, cederá sus funciones antes de que finalice el año para concentrarse en otros proyectos. Cowell, conocido por su éxito en Mercedes, será una adquisición valiosa para Aston Martin.
Además de Cowell, Aston Martin también ha asegurado la incorporación de Enrico Cardile, actual director técnico de chasis de Ferrari. El italiano ha desempeñado un papel crucial en los recientes desarrollos de la escudería desde que se unió al equipo de Fórmula 1 desde su programa Gran Turismo en 2016.
Sin embargo, su incorporación no se anunciará de inmediato debido a cuestiones contractuales y a la necesidad de cumplir un periodo de baja por 'gardening leave' con su actual escudería.
Fernando Alonso, en el GP de Gran Bretaña 2024
Estos movimientos han aumentado el optimismo en Aston Martin, especialmente en Fernando Alonso, quien ha estado frustrado por la falta de progresos recientes en el rendimiento del equipo.
Las mejoras no han llegado, y las pocas evoluciones llevadas a los circuitos han dado resultados decepcionantes. La incorporación de figuras como Cowell y posiblemente Newey y Cardile, es vista como una oportunidad para revitalizar el equipo y mejorar su rendimiento en la pista.
Fernando Alonso, al ser preguntado sobre los rumores que rodean a Cowell, Newey y Cardile, expresó su satisfacción con la llegada de Cowell y su esperanza de que los cambios en la estructura técnica del equipo traerán resultados positivos.
"Estoy muy contento, obviamente. No le conozco personalmente, y sólo le respeto como rival en el pasado, pero estoy deseando reunirme con Andy para charlar sobre su opinión en el equipo. Obviamente, Lawrence confía mucho en él", comentó Alonso antes del Gran Premio de Gran Bretaña.
El impacto en la F1
La decisión final de Adrian Newey tendrá un impacto significativo no solo en Aston Martin, sino en todo el panorama de la Fórmula 1. Con la nueva normativa de 2026 en el horizonte, contar con un diseñador de la talla de Newey podría ser crucial para cualquier equipo que aspire a competir al más alto nivel.
Su habilidad para diseñar monoplazas campeones ha sido una constante en su carrera, y su posible llegada a Aston Martin podría acelerar el desarrollo del equipo y fortalecer su posición en la parrilla.
A medida que las negociaciones continúan, el mundo de la Fórmula 1 observa con atención. La cláusula en su contrato con Red Bull que retrasa cualquier anuncio hasta septiembre ha añadido un elemento de suspense a la situación.
Fernando Alonso, en el box de Aston Martin
Los equipos rivales están en alerta, conscientes de que la decisión de Newey podría reconfigurar la dinámica de poder para la decisiva temporada 2026 en la que cambiará el reglamento técnico.
En resumen, aunque Aston Martin está cerca de asegurar los servicios de Adrian Newey, las restricciones contractuales con Red Bull y las demandas salariales del diseñador están complicando el anuncio oficial.
Mientras tanto, el equipo sigue reforzando su estructura técnica con incorporaciones clave, esperando que estos movimientos traigan mejoras significativas en su rendimiento. La decisión final de Newey, esperada para septiembre, será determinante para su carrera y para el equipo que logre asegurar su talento, marcando un punto de inflexión en la Fórmula 1.