Max Verstappen volvió a sumar una nueva pole en el Mundial de Fórmula 1. El trazado del Gran Premio de Canadá no escapó a los tentáculos del piloto neerlandés de Red Bull, que se mostró como el más fiable bajo la intensa lluvia que asoló al circuito Gilles Villenueve. Una vez más, saldrá primero y verá a todos desde el retrovisor.
Un sorprendente Nico Hülkenberg aprovechó el caos sobre la pista para cazar la segunda plaza y Fernando Alonso se apuntó a la segunda línea con la tercera posición. Ambos se quedaron muy lejos de Verstappen, que marcó el mejor tiempo en la Q3 antes de que una bandera roja provocada tras un accidente de Piastri dejase todo visto para sentencia.
Junto a Fernando Alonso en la segunda línea estará el siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton. Peor le fueron las cosas a Carlos Sainz, que terminó en la octava posición y salvó la cara de Ferrari, ante la eliminación prematura de Charles Leclerc en la Q2.
La lluvia fue la protagonista de la jornada. La cantidad incesante de agua que había caído sobre el asfalto propició una auténtica odisea para los pilotos. La inestabilidad de los monoplazas hizo que varios pilotos perdiesen el control de ellos y las banderas hiciesen acto de presencia en reiteradas ocasiones.
Azote constante del agua
La clasificación del Gran Premio de Canadá estaba llamada a estar marcada por la emoción sobre un trazado mojado. Eso hacía que el abanico de candidatos a la pole creciese y que todo estuviese predispuesto para las sorpresas. Max Verstappen, Fernando Alonso, Carlos Sainz, Charles Leclerc... todos ellos apostaban por ir con todo allí.
El español de Ferrari logró superar un accidente en los últimos libres y se apuntaba a la batalla por lograr salir primero. Sin embargo, la lucha poco a poco iba a irse diluyendo con el paso de los minutos ante la incesante lluvia. Además, al poco de arrancar la Q1, la primera bandera roja hacía acto de presencia.
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Unos problemas del Alfa Romeo de Guanyu Zhou hacían que se quedasen parado en la mitad de la pista. Era el primer parón y Verstappen ya avisaba de los tiempos que estaba dispuesto a hacer mientras el agua encharcaba cada milímetro del circuito canadiense.
Tras la reanudación, las primeras sorpresas empezaron a llegar. Con una Q1 sin apenas problemas, la Q2 empezó a tomar protagonismo. Lance Stroll, Checo Pérez y Charles Leclerc se quedaban sin la oportunidad de pelear por la pole en el segundo corte y fracasaban en sus intentos. Ferrari, Red Bull y Aston Martin se lo jugaban todo a una carta.
La intensa lluvia se convertía en un problema para los diez pilotos presentes en la Q3. Iban a disponer de un intento, dos a lo sumo. Verstappen tomó la delantera con primera vuelta y lo refrendó en la segunda. Cuando Fernando Alonso estaba a punto de cruzar la meta en su última oportunidad, una bandera roja en la pista anulaba su registro.
Piastri había perdido el control de su Alpine y se había estrellado contra el muro. El agua no cesaba y los pilotos se volvían al pit a esperar a que retirasen el monoplaza. Sin embargo, el regreso a pista fue mucho más descafeinado de lo esperado ante la imposibilidad de tener el control del coche.
Los pilotos renunciaron a competir en lo que faltaba de sesión. Verstappen se hacía con una nueva pole y volverá a salir primero por quinta vez en esta temporada. Una vez más, todos tendrán que ir contra él y apartarle de su dominio en el Mundial de F1.