No es nada sencillo destacar en un equipo en el que Leo Messi lo monopoliza prácticamente todo. Eso es lo que sucede en Argentina, y con argumentos de peso además, porque el '10' está demostrando ser trascendental para la Albiceleste y se ha cargado el peso del equipo a su espalda en los momentos clave del Mundial.

La selección argentina ya se encuentra en la gran final donde se medirá a Francia, y sueña con hacerse con su tercera estrella en Qatar. Para este histórico partido, parece que no solo Leo Messi tiene su puesto asegurado como gran figura destacada en el once de la Albiceleste, sino que hay otro futbolista que se ha convertido en indispensable durante los últimos choques. 

Se trata de Julián Álvarez. El delantero del Manchester City ha sido un gran 'descubrimiento' de Lionel Scaloni en esta Copa del Mundo porque ha ido aumentando su importancia a medida que iba avanzando el torneo. Partía como suplente de Lautaro Martínez, el verdadero '9' de referencia en Argentina, pero le ha comido por completo el terreno a base de buenas actuaciones y ahora mismo es uno de los intocables dentro del equipo.

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Su revolución

De apenas 22 años y con una escasa trayectoria en el fútbol europeo, Julián Álvarez parecía destinado a tener poco protagonismo en este Mundial de Qatar. Hace ya casi un año que fichó por el Manchester City, pero los ingleses decidieron dejarlo cedido hasta el final de la temporada en River Plate, su club de procedencia. Este curso ya es a todos los efectos un jugador del equipo de Guardiola, pero a Pep le ha costado darle continuidad y tiene un rol de suplente en la Premier League.

Así llegó a Argentina y así comenzó esta Copa del Mundo. En la derrota inicial contra Arabia Saudí apenas tuvo media hora en una situación de emergencia, mientras que en el siguiente partido ante México todavía gozó de algo menos de participación. Sin embargo, Lautaro Martínez no convencía en la delantera así que Scaloni le dio la alternativa a Julián en el último encuentro de la fase de grupos contra Polonia. El experimento salió a pedir de boca, Julián marcó el segundo gol e hizo un partidazo.

Desde aquel día, el futbolista del City no ha dejado de ser titular. Álvarez se ha ganado la confianza no solo de su entrenador, sino de todo el público argentino, que se ha rendido a sus impresionantes actuaciones y por supuesto a sus goles. Lleva ya cuatro tantos anotados en este Mundial, algo que le convierte en uno de los máximos goleadores de la competición y en el segundo artillero argentino solo por detrás de Leo Messi.

Leo Messi y Julián Álvarez, celebrando el gol definitivo de la selección de Argentina en la semifinal del Mundial de Qatar 2022 Reuters

Marcó en los octavos de final contra Australia, y en las semifinales dio una auténtica exhibición que ha hecho rendirse a sus pies hasta a los más incrédulos. Croacia sufrió las artes de este delantero en sus propias carnes y vio cómo el citizen le marcaba dos de los tres goles de Argentina. 

Más allá de lo que aporta en la faceta goleadora, Julián Álvarez es un salvavidas para el resto de sus compañeros. De hecho, su conexión y la manera de entenderse con Leo Messi le convierten en alguien indispensable en la delantera. De su asociación salió, sin ir más lejos, el tercer gol de la semifinal.

Scaloni lo alineará de nuevo, salvo una sorpresa mayúscula, en la final contra Francia para tratar de aprovechar su gran momento. A sus 22 años, está cumpliendo un sueño, el de llevar a Argentina y a Leo Messi a levantar la Copa del Mundo. A su vuelta a Manchester, seguro que Pep Guardiola habrá tomado nota y quizás este Mundial pueda ser otro punto de inflexión en su carrera para convertirse en un gran complemento de Haaland en el Manchester City.