Los 'golden (& bad) boys' de Inglaterra: abuso social, fiestas y el 'fantasma' de un caso de violación
Inglaterra se mide a EEUU tras golear a Irán en el debut en Qatar. Ilusión por un grupo joven y un vestuario rehabilitado por Gareth Southgate.
25 noviembre, 2022 02:15Inglaterra ha sido una de las selecciones que mejor debut han tenido en el Mundial de Qatar. Su victoria por 6-2 a Irán fue la primera goleada del torneo y solo el 7-0 de España a Costa Rica la ha superado por el momento. Los protagonistas fueron, sobre todo, futbolistas jóvenes que juegan su primera Copa del Mundo. Ese viernes ante Estados Unidos (20:00 horas) les llega la oportunidad de confirmarse como candidatos al título.
De los elegidos por Gareth Southgate en la alineación, de mediocampo para arriba, solo había dos jugadores por encima de los 23 años: Harry Kane y Raheem Sterling. El resto, como mucho, tiene esa edad: Mason Mount y Declan Rice nacieron en 1999, Bukayo Saka en el 2001 y Jude Bellingham en el 2003. Phil Foden, que salió del banquillo ante Irán y es del 2000, es el quinto que integra el grupo de los 'golden boys' ingleses.
El único gran título que tiene Inglaterra es el Mundial que ganó en 1966. Desde entonces, lo más cerca que ha estado de repetir o levantar una Eurocopa fue la final continental que jugó el año pasado. Perdió ante Italia de la forma más cruel: en casa (Wembley) y en la tanda de penaltis. 16 meses más tarde, el equipo que ha llegado a Qatar está todavía más preparado.
Es una generación que ilusiona mucho en Inglaterra, pero que ha pasado por alguna etapa oscura. En este punto solo se habla de fútbol, una suerte de cara a las aspiraciones en el Mundial. En el debut, Bellingham marcó un gol y Saka otros dos. Los niños se vistieron de estrellas y pusieron el foco sobre ellos.
Lo de Bellingham ya no sorprende, pese a ser el más joven de Inglaterra y está entre los 15 más pequeños de todo el Mundial. En el mercado de fichajes se lo rifan, entre ellos Real Madrid y Liverpool, y va camino de protagonizar otro gran traspaso. El anterior lo hizo con 17 años, cuando salió del Birmingham al Borussia Dortmund por 25 millones. Para el club inglés tuvo tal relevancia esa venta que, incluso, retiró la camiseta del joven jugador con el dorsal 22. Solo la llegó a usar durante 44 partidos.
Bukayo Saka se redime
Saka hizo historia con su doblete. A sus 21 años y 77 días, se convirtió en el futbolista más joven en marcar un doblete en su debut un Mundial. El registro anterior lo tiene un tal con Franz Beckenbauer, que lo hizo con 20 años y 304 días precisamente en este torneo que acabaron ganando los Three Lions (Inglaterra 1966).
Para Saka fue su mejor forma de redimirse tras lo que le ocurrió en la Euro. Él fue uno de los tres ingleses que fallaron en la tanda de penaltis, siendo Rashford y Sancho los otros dos. Le tocó asumir una responsabilidad impropia para alguien de su edad y, sobre todo, enfrentarse a una persecución pública por parte de aficionados ingleses: los ataques y los insultos racistas estaban a la orden del día.
Saka estalló y denunció lo que estaba sufriendo tras aquel partido: "No quiero que ningún niño o adulto tenga que recibir los mensajes de odio y dolor que yo, Marcus [Rashford] y Jadon [Sancho] hemos recibido. Supe al instante el tipo de odio que estaba a punto de recibir y es una triste realidad que sus poderosas plataformas (Instagram, Twitter y Facebook) no hagan lo suficiente para detenerlo".
De aquel abuso social que sufrió se ha podido recuperar y esta temporada está explotando en un Arsenal que es líder de la Premier League. Lo mismo ocurre con cada uno de sus compañeros jóvenes en la selección, que ya son importantes con sus clubes. Están llamados a seguir teniendo éxitos... si es que algún cable no se les cruza.
La mancha de Mason Greenwood
Esta generación tiene también su lado oscuro y un claro señalado: Mason Greenwood. Nacido en 2001, era la gran promesa del Manchester United. Y 'era', en pasado, porque su club le tiene apartado desde enero. Ese mismo mes había sido detenido tras difundirse en redes fotos y videos que mostraban a una joven con el rostro ensangrentado y moratones en el cuerpo, provocado todo eso por el delantero
Antes de este episodio, uno de los más oscuros de la historia reciente del fútbol inglés, Greenwood ya había tenido otras polémicas. En la más sonada tuvo como compañero de faena a Phil Foden, 'protegido' de Pep Guardiola en el Manchester City e internacional desde 2020.
Ambos se montaron una fiesta en plena concentración de la selección y cuando el Covid más atormentaba al mundo. Se saltaron las normas y colaron en el hotel a dos chicas. Southgate les expulsó de la concentración, solo días después de que ambos hubieran debutado con el combinado nacional.
Greenwood se ha 'esfumado' desde que fue detenido. Nike rompió su patrocinio con él, EA Sports le borró de su saga de videojuegos FIFA y pasó por la cárcel. En libertad bajo fianza, su caso está aplazado hasta febrero y llegados a esa fecha deberá comparecer por tres cargos relacionados con intentos de violación y agresión, supuestamente cometidos en 2021.
A por los octavos
La tarea de Southgate en los últimos dos años ha sido conducir a sus estrellas más jóvenes por el camino correcto. El vestuario parece rehabilitado y en Qatar el estreno no pudo ser mejor. Sin Greenwood, pero también sin Reece James y Sancho, bajas en la lista por lesión y decisión técnica respectivamente.
Harry Kane es quien luego lo ordena todo en el campo. Ante Irán no marcó, pero dio dos asistencias. Podrá jugar ante EEUU tras mantenerse la duda los últimos días por unas molestias que tenía en el tobillo. La selección americana sube el listón para los ingleses. Otros tres puntos y los de Southgate ya tendrán el billete para octavos. Soñar está permitido con la generación de los chicos de oro y cada vez menos malos.