"Si llega a la Copa del Mundo con Gales, será su gloria suprema". Eso decía sobre Gareth Bale su agente Jonathan Barnett hace unos días. Lo hizo antes de que el futbolista del Real Madrid se lesionara al jugar 45 minutos en su partido 100 con su selección. Era contra Bielorrusia y los 'dragones' (como se apoda el combinado galés) debían ganar para asegurarse jugar la repesca para el Mundial de Qatar 2022.
Ganaron 5-1. Ahora el nombre de Bale vuelve a estar en el centro de la polémica y la opinión pública está en su contra. En España, claro está. Y es que el timing no podría haber sido peor para que el delantero vuelva a ser atacado por el contraste entre el compromiso que demuestra con Gales y con el Real Madrid.
Bale empezó la temporada siendo titular con Carlo Ancelotti en las tres primeras jornadas de Liga, fue convocado por su selección para el parón de septiembre, jugó los tres partidos (en dos disputó los 90 minutos) y se lesionó al volver a Madrid. Un problema muscular le apartó de los terrenos de juego durante dos meses.
A la hora de volver se calentó todo. Bale empezaba a entrenar con sus compañeros en Valdebebas y Gales le convocaba para el parón de noviembre. Las opciones de que tuviera minutos con el Madrid antes de irse de nuevo con su selección se fueron esfumando, lo cual advirtió a todo el mundo sobre si el galés jugaría durante el parón sin rodaje previo. Así ha sido y ha resultado en el peor escenario posible.
Bale tendrá que estar tres semanas de baja, perdiéndose un tramo crucial de la temporada del Real Madrid (derbi incluido). Desde el club blanco se intentó defender al jugador antes de irse con Gales ("si juega, mejor para nosotros; vendrá con más ritmo", dijo Ancelotti), pero tampoco sorprende lo ocurrido. La situación del jugador de Cardiff hace mucho tiempo que es irreconducible.
Siete meses es el tiempo que queda para que el contrato de Bale con el Madrid se termine. A estas alturas nadie se plantea la renovación de un futbolista que dejó grandes goles para la historia del club, pero que ha jugado 290 minutos en año y medio con la camiseta blanca tras ser cedido el curso pasado al Tottenham Hotspur. La cesión al club inglés era la oportunidad de poner final a la etapa del galés en la entidad merengue, pero no salió bien. Ahora solo queda esperar a junio de 2022.
63 años del último Mundial de Gales
El Madrid tiene claro que Bale no seguirá el curso que viene, al igual que el futbolista tiene claro cuál es su último gran reto de su carrera: llevar a Gales al Mundial. La última vez que la selección galesa disputó la Copa del Mundo fue en 1958. Son 63 años (64 en 2022) sin ver a Gales en la gran cita de selecciones y Bale, uno de los futbolistas más importantes de toda su historia, quiere romper la mala racha.
Al quedar segundo de grupo, Gales y Bale tendrán que jugársela en una repesca complicadísima en la que solo pasarán tres de 12 selecciones. Para ir al Mundial hay que ganar dos eliminatorias (a partido único) que se jugarán en marzo y el foco de Gareth está puesto ahora en llegar en forma a esas fechas.
Para cuando se juegue el Mundial, entre noviembre y diciembre de 2022, Bale ya no será futbolista del Real Madrid. Quien sabe si en verano firmará por otro equipo o solo se dedicará a prepararse para Qatar por su cuenta. En el aire siempre ha rondado la idea de que el Gareth dirá adiós al fútbol cuando se juegue la cita mundialista. ¿Y si no logra el billete en la repesca? Difícil adivinarlo cuando se habla del Expreso de Cardiff.
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