La Premier League se encuentra en una situación muy complicada. La entrada de nuevos propietarios ha planteado dificultades estructurales dentro del campeonato inglés. La llegada, con muchas complicaciones eso sí, de un país como Arabia Saudí para tomar las riendas del Newcastle supuso un antes y un después. Una situación que también se retomó tras el estallido de la guerra en Ucrania con la invasión rusa y que provocó la marcha de Román Abramóvich del Chelsea.
Para intentar evitar estos problemas y asegurar que los nuevos propietarios que están por llegar respetan principios tan básicos como los Derechos Humanos, la Premier League ha decidido blindarse. Y lo ha hecho eligiendo un nuevo decálogo de medidas que los nuevos dueños tendrán que cumplir si quieren adquirir un club británico.
Este jueves se ha producido una reunión entre los 20 clubes de la Premier League y en ella se ha acordado introducir una nueva política de dueños y propietarios. La regla principal es que no podrán acceder a un club aquellas personas que hayan cometido crímenes contra los Derechos Humanos principalmente.
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Otra de las medidas que se ha aprobado es que no podrá haber propietarios que hayan sido tocados por la sombra de la corrupción, haciendo referencia a delitos como el fraude, la evasión de impuestos o los crímenes de odio. Pero también se mirará el aspecto económico, ya que no podrán acceder a un club aquellas personas que tengan riesgo de ser insolventes.
El objetivo es evitar futuras bancarrotas y problemas financieros que no tengan solución y es que la Premier League se ha convertido en una constante de equipos que se han declarado insolventes desde su fundación. La nueva idiosincrasia de la competición arrancó en 1992 y en estos más de 30 años ya han sido 90 los clubes afectados por los problemas económicos. Un número que da pie a una tendencia totalmente insostenible.
Problemas para el Manchester United
Este bloque de medidas intenta responder a la polémica que ha surgido con la llegada de países como Arabia Saudí hasta la Premier League y también en vista de la posible compra del Manchester United por parte de Qatar. Sin embargo, las primeras medidas fueron ideadas cuando se anunció de manera oficial el proyecto de la Superliga Europea, allá por abril del año 2021.
Hay que recordar que el Manchester City, el Arsenal, el Chelsea, el Manchester United, el Tottenham y el Liverpool siguen figurando dentro de los clubes fundadores a pesar de que ya se han desmarcado del proyecto. Los aficionados de todos estos equipos salieron a las calles y consiguieron, a través de la presión social, que los clubes tuvieran que recular en su deseo adherirse al proyecto que cambiará el fútbol en el Viejo Continente.