Nueva tragedia en el fútbol argentino. Lucas González, jugador de 17 años de las categorías inferiores del equipo Barracas Central, ha fallecido tras recibir varios disparos en la cabeza de un agente de policía. Un suceso que ha conmocionado a todo el fútbol argentino y que ha desatado fuertes críticas y protestas en todo el país.
La familia del jugador está clamando justicia tanto en las calles como en los medios de comunicación en un caso que promete ser motivo de muchas batallas legales y sociales en Argentina debido a la gran repercusión que ha tenido este enorme suceso.
El joven falleció horas después del incidente en el hospital tras haber recibido dos disparos en la cabeza por parte de la policía como parte de una persecución realizada a bordo de un coche tal y como han recogido varios meses argentinos.
El entorno del jugador ha rechazado la versión transmitida por la policía ya que acusan a los agentes de enseñarse con los chicos a los que iban persiguiendo y entre los que se encontraba el propio Lucas González. La familia asegura que no habían cometido ningún delito y que huían de la policía por miedo.
Además, el grupo de jóvenes no iba armado según ha transmitido la familia, por lo que acusan a la policía de un caso de "gatillo fácil" con los chicos y de un ensañamiento en el caso de Lucas, que falleció tras recibir dos disparos en la cabeza.
El joven ha fallecido en el hospital y hasta allí se ha trasladado la familia para pedir justicia por el caso del chico que ha causado una profunda conmoción en el país. Uno de sus familiares cercanos, su tío, ha pedido explicaciones y ha alzado la voz clamando contra lo ocurrido y contra las autoridades: "Mataron a mi sobrino. Queremos pedir Justicia por Lucas. Lucas va a seguir en nuestros corazones y en los corazones de mucha gente".
Así fueron los hechos
Los hechos se produjeron en la mañana del 18 de noviembre cuando la policía alertó de que un grupo de chicos que iba en un coche se negaron a detenerse tras recibir el alto de los agentes para identificarse. Fue en ese momento cuando se inició la persecución. Se produjo una confrontación entre los dos coches y se inició un tiroteo por varias calles.
Más tarde, tres de los sospechosos fueron alcanzados por las fuerzas de seguridad y fueron arrestados, aunque uno de ellos consiguió escapar a pie. Este tiroteo fue el que habría provocado las heridas a Lucas González, quien murió horas después en el hospital debido al estado irreversible que presentó.
En Argentina, este suceso ha provocado una terrible conmoción y ha hecho que muchos grandes equipos, personalidades y medios de comunicación se hayan querido unir al dolor de la familia y han mostrado su solidaridad por lo ocurrido. Instituciones tan grandes como Boca Juniors o River Plate se han querido unir a esta corriente de muestras de cariño.
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