Rafael Louzán visitando las obras del Nuevo Mestalla.

Rafael Louzán visitando las obras del Nuevo Mestalla. RFEF

Fútbol

FIFA quiere reducir entre dos y cuatro sedes del Mundial 2030 y Louzán aumenta el malestar por su empeño en Valencia

Los nuevos criterios de sostenibilidad del organizador de la competición y el deseo del nuevo presidente de la RFEF preocupan entre algunas de las once sedes españolas que ven peligrar su presencia en la lista final.

Más información: Los retos de España en el camino hacia el Mundial 2030: la batalla por la final, sedes que crean dudas y el marco jurídico

Publicada

"Estoy plenamente convencido de que Valencia va a ser sede del Mundial 2030", así de claro fue esta semana Rafael Louzán en su visita a las zonas deportivas más afectadas por la DANA.

El nuevo presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) lleva apostando por incluir al estadio de Mestalla entre las sedes españolas del Mundial 2030, que España organizará junto con Marruecos y Portugal, desde que fue nombrado el pasado mes de diciembre en el cargo.

El problema es que mientras que Louzán trata de sumar sedes, la propuesta del Mundial de 2030, que será organizado conjuntamente por España, Marruecos y Portugal, se enfrenta a un reajuste en el número de estadios inicialmente previstos en la candidatura presentada hace unos meses.

Aunque la propuesta original incluía un total de 20 sedes, la FIFA evalúa reducir entre dos y cuatro sedes basándose en criterios de sostenibilidad y costos. Este ajuste afecta principalmente a España (que cuenta con 11 sedes ahora mismo) y Marruecos (que tiene 6 sedes), mientras que Portugal mantendría sus tres estadios intactos.

El Mundial de 2026 en Norteamérica (EEUU, Canadá y México) contará con 16 sedes, la cifra más alta hasta la fecha desde los 20 estadios que albergaron partidos en la edición de 2002 organizada por Corea del Sur y Japón.

Sin embargo, el impacto ambiental y los elevados costos organizativos con tantas sedes han llevado a la FIFA a replantear esta expansión en 2030. La decisión final, que podría anunciarse en los próximos meses, tiene en vilo a las ciudades españolas seleccionadas hasta ahora.

Gianni Infantino oficializa a España, Marruecos y Portugal como organizadores del Mundial 2030

Gianni Infantino oficializa a España, Marruecos y Portugal como organizadores del Mundial 2030 FIFA

Las sedes actuales

La candidatura conjunta presentó un total de 20 sedes repartidas entre los tres países organizadores. 

Las 11 sedes de España:

  • Santiago Bernabéu (Madrid), capacidad: 78.297
  • Camp Nou (Barcelona), capacidad: 103.447
  • Metropolitano (Madrid), capacidad: 70.650
  • Riazor (A Coruña), capacidad: 48.015
  • RCDE Stadium (Barcelona), capacidad: 40.259
  • San Mamés (Bilbao), capacidad: 53.633
  • Estadio Gran Canaria (Las Palmas), capacidad: 44.500
  • La Rosaleda (Málaga), capacidad: 45.000
  • Anoeta (San Sebastián), capacidad: 42.300
  • Nuevo Romareda (Zaragoza), capacidad: 43.144
  • La Cartuja (Sevilla), capacidad: 71.000

Las 6 sedes de Marruecos:

  • Gran Estadio Hassan II (Casablanca), capacidad: 115.000
  • Gran Estadio de Agadir, capacidad: 46.000
  • Gran Estadio de Fez, capacidad: 55.800
  • Gran Estadio de Marrakech, capacidad: 45.860
  • Príncipe Moulay Abdellah (Rabat), capacidad: 68.700
  • Gran Estadio de Tánger, capacidad: 75.600

Las 3 sedes de Portugal:

  • Estadio da Luz (Lisboa), capacidad: 65.209
  • Estadio José Alvalade (Lisboa), capacidad: 50.103
  • Estadio do Dragao (Oporto), capacidad: 51.075

Valencia, el empeño de Louzán

Rafael Louzán, presidente de la RFEF, parece estar decidido a incluir al Nuevo Mestalla como sede mundialista. Durante su reciente visita a Valencia, Louzán apoyó una vez más la idea de incluir a la capital del Turia en la lista para el Mundial. Justificó su apuesta destacando la importancia de la ciudad y el progreso en las obras del estadio.

Sin embargo, esta insistencia ha generado tensiones con las sedes actuales, ya que la inclusión de Valencia implicaría descartar una de las 11 sedes inicialmente aprobadas, más las que puedan ser descartadas por el recorte que está planeando la FIFA.

Según fuentes cercanas a la organización del Mundial 2030 consultadas por EL ESPAÑOL, Riazor y Anoeta son actualmente las sedes más vulnerables. El proyecto de ambas ciudades no termina de convencer al organizador y encaja en las cuentas de recorte que FIFA está valorando para España.

Louzan también destacó: "Aunque Valencia quedó fuera en un primer momento, ahora nos queda un único camino, que es lograr que sea sede. Hay razones suficientes para ello".

Sin embargo, su decisión está siendo vista con escepticismo por parte de algunas ciudades ya seleccionadas, que consideran que la inclusión de una nueva sede podría ser un agravio comparativo.

La situación de Valencia se complica por el historial del Nuevo Mestalla. Las obras del estadio comenzaron en 2007, pero quedaron paralizadas en 2009 debido a problemas entre Peter Lim y el Ayuntamiento de la ciudad.

El dueño singapurense del Valencia CF no llegó a un acuerdo con el consistorio para que una serie de parcelas destinadas a proyectos deportivos pasaran a ser terciarias y así poder construir en ellas un hotel y un centro comercial.

Ese enfrentamiento detuvo las obras, generando una pausa que se ha extendido por más de 15 años. Aunque la construcción se ha retomado en este 2025, son numerosas las voces críticas que cuestionan si realmente este proyecto debería considerarse como una de las sedes.

A pesar de que las proyecciones indican que los trabajos finalizarán en 2027, tres años antes del evento mundialista, el debate sobre su idoneidad sigue abierto. El posible recorte de sedes para el Mundial 2030 pone de manifiesto la necesidad de equilibrar criterios de sostenibilidad con las aspiraciones de los países anfitriones.

En el caso de España, las once sedes originales representan un abanico diverso de ciudades e infraestructuras modernas, muchas de las cuales ya han albergado eventos internacionales.

La inclusión de Valencia plantea retos adicionales. Si bien es una de las ciudades más importantes de España, su historial con el Nuevo Mestalla y los retrasos en las obras han generado dudas sobre su viabilidad. Además, la percepción de favoritismo hacia Valencia podría generar tensiones dentro de la organización.

Por otro lado, Marruecos enfrenta sus propios desafíos. La posibilidad de perder una o dos de sus sedes podría complicar los esfuerzos del país para consolidarse como un socio igualitario en la organización del torneo. Fez es la ciudad que más probabilidades tiene de ser eliminada, lo que podría generar descontento local.