Real Madrid, Bayern Múnich, PSG y Borussia Dortmund. Son los semifinalistas de la Champions League 2023/2024 tras unos cuartos de final que son ya historia de la competición europea. Nunca esta ronda tuvo tanta emoción y goles juntos en cada una de sus eliminatorias.
Desde que la Champions es Champions, es decir, desde que en 1992 se reestructuró el formato del torneo, en los cuartos de final no se habían marcado tantos goles como este año. 32 goles en ocho partidos. Una media de cuatro tantos por encuentro y sin ninguna eliminatoria descompensada entre sus equipos.
Los cuartos tuvieron la victoria de un viejo clásico como el Bayern contra un Arsenal de Arteta que debe acostumbrarse a lo que es competir en Europa. Tuvieron la remontada de un inesperado Dortmund ante un Atleti que cedió bajo el 'muro amarillo'. Tuvieron el asalto del PSG y Mbappé a Montjuïc para dejar al Barça de Xavi desamparado. Y tuvieron una página más que añadir al libro de épicas madridistas: la victoria en penaltis en el búnker del Etihad ante un City que parecía imbatible y cederá su corona el próximo 1 de junio en Wembley.
La tanda en Mánchester fue el broche de oro para unos cuartos de final inolvidables, los últimos antes de que la Champions vuelva a cambiar su formato. En 1992 pasó de la eliminación directa a una fase inicial de grupos y, en la temporada 2024/2025, esta dará paso a una liga compuesta por 32 equipos, en la que no todos se enfrentan contra todos, no hay ida y vuelta y se comparte clasificación.
Desde que se anunciara el nuevo formato, como intento de respuesta a la Superliga, el aficionado no ha terminado de entender cómo será la Champions a partir del próximo verano. Y el que lo ha entendido duda seriamente de que sea lo que necesita el fútbol. ¿Y qué es lo que necesita el fútbol? Que partidos como los de estas dos últimas semanas, entre los mejores equipos del mundo, ocurran cada jornada.
El espectáculo ofrecido por estos ochos equipos que han conformado los cuartos de la Champions tardará en olvidarse. El Arsenal - Bayern, que fue para los bávaros, fue el cruce con menos goles al tener cinco (2-2 y 0-1). Real Madrid - City (8 goles; 3-3 y 1-1), Atleti - Dortmund (9 goles; 2-1 y 2-4) y PSG - Barcelona (10 goles; 2-3 y 4-1) fueron bacanales de goles, tensión y mucho fútbol. De los tres españoles, eso sí, sólo pasó uno.
La Champions, sin contar la época previa de la Copa de Europa, sólo había tenido una edición que en los cuartos de final se llegara a la treintena de goles. Fue en la 2003/2004, justo hace 20 años. Oporto - Lyon (2-0 y 2-2), Milan - Dépor (4-1 y 0-4), Real Madrid - Mónaco (4-2 y 1-3) y Chelsea - Arsenal (1-1 y 2-1) protagonizaron aquellos cuartos de final en los que hubo 30 goles totales. Un nuevo récord se ha establecido en la era moderna de la competición reina del fútbol europeo.
La estadística tampoco queda muy atrás en el ránking histórico de la Copa de Europa, contabilizando desde el año de su creación en 1955 como iniciativa del diario L'Équipe junto a importantes dirigentes del fútbol como los madridistas Santiago Bernabéu y Raimundo Saporta.
Las Copas de Europa con los cuartos de final con más goles fueron la primera de todas (1955/1956) y la tercera (1957/1958) con 36 goles. Hasta el número 34 se llegó en otras dos ediciones: la segunda (1956/1957) y la décima (1965/1966). Medio siglo ha tenido que pasar para que unos cuartos de final se acerquen tanto como los de la presente temporada, en la 69ª edición del torneo.
Los cuartos de final con más goles
1. 1955/1956 (1ª edición): 36 goles
- 1957/1958 (3ª edición): 36 goles
3. 1956/1957 (2ª edición): 34 goles
- 1965/1966 (10ª edición): 34 goles
5. 2023/2024 (69ª edición): 32 goles
6. 1959/1960 (5ª edición): 31 goles
7. 2003/2004 (49ª edición): 30 goles
Unas semis prometedoras
El espectáculo ya está servido para lo que queda de competición. Por un lado, un equipo moderno como el PSG obligado a ganar por la gran inyección de millones realizada durante una década y porque este será el último año de Mbappé en sus filas. Su rival es la revelación de la temporada, un Dortmund que no está ni entre los cuatro primeros de la liga alemana y jugará sus quintas semis de Champions habiendo vendido a Haaland y Bellingham en los últimos dos veranos.
En el otro extremo se jugará el clásico de toda la vida en Europa: Bayern contra el Real Madrid. Los bávaros, tras perder su reinado en la Bundesliga ante el Leverkusen de Xabi Alonso, con Tuchel ya despedido como entrenador para la próxima temporada, sueña con alzar su séptima Copa de Europa. Los blancos, con su insaciable hambre de historia pese al paso de las generaciones, quieren La Decimoquinta mientras que pelean con más ahínco que nadie para cambiar el orden del fútbol europeo y surja una Superliga que acabe con el monopolio de la UEFA. Historia por hacer en una Champions que, para bien o para mal, será un antes y un después.