El FC Barcelona ha tomado una drástica decisión en los últimos días y es la de retirar la condición de leyenda del conjunto culé a Dani Alves. Un cambio de parecer motivado tras conocerse la condena al jugador, que tendrá que cumplir hasta cuatro años y medio por agredir sexualmente a una joven en una discoteca.
Dani Alves se convirtió en uno de los jugadores más queridos del Barça durante su estancia en la Ciudad Condal, donde llegó a disputar más de 400 partidos con la elástica culé. Por dicho motivo, fue incluido en una lista donde se encuentran algunos de los mejores futbolistas de la historia del club. Además, ganó numerosos títulos.
Con la camiseta blaugrana consiguió tres Champions League, tres Supercopas de España, tres Mundiales de Clubes, seis Ligas, cuatro Copas del Rey o cuatro Supercopas de España, lo que le llevó a convertirse en toda una institución dentro del club. Sin embargo, ya no formará parte esa lista nunca más.
Los últimos jugadores en ser confirmados como leyendas del club fueron Jordi Alba, Sergio Busquets y Gerard Piqué. Curiosamente, todos ellos compartieron equipo con Dani Alves durante varias temporadas y pusieron fin a su etapa en el Barcelona durante la pasada temporada.
Condena a Dani Alves
Dani Alves fue declarado culpable de agresión sexual el pasado 22 de febrero tras los hechos ocurridos en la discoteca Sutton en la madrugada del 30 de diciembre de 2022 en la discoteca Sutton. Ahora, se enfrenta a cuatro años y seis meses de prisión.
El tribunal de la sección 21 de la Audiencia Provincial de Barcelona le impuso al futbolista además cinco años de libertad vigilada, alejamiento e incomunicación de la víctima durante nueve años y seis meses, así como indemnización de 150.000 euros y pago de las costas.
Por otro lado, Dani Alves también fue inhabilitado tras la condena para ejercer empleo, cargo público, profesión u oficios relacionados con menores de edad por un periodo de cinco años: y a la pena de dos meses de multa con una cuota diaria que asciende hasta los 150 euros.
La sentencia consideró que había quedado acreditado que la víctima no consintió los hechos y que existían elementos de prueba, además del testimonio de la denunciante, para entender que estaba probada la violación.