Xavi y Simeone, dos entrenadores en apuros: la opción de Luis Enrique para Barcelona y Atlético

Tiempos difíciles para FC Barcelona y Atlético de Madrid tras haber sido eliminados en la fase de grupos de la Champions League. El fracaso continental condiciona no solo los proyectos deportivos, sino también la economía de las dos entidades. Xavi y Simeone están en la cuerda floja y ambos equipos tienen a Luis Enrique como favorito en caso de que haya un cambio en el banquillo para la próxima temporada. 

El actual seleccionador nacional termina su contrato con la Real Federación Española de Fútbol tras el Mundial y su futuro es una incógnita. Luis Rubiales quedó con Luis Enrique en tratar su renovación una vez termine la cita en Qatar. En principio, la RFEF  desea que continúe en el cargo, pero nadie sabe qué decidirá el asturiano ni qué planes pasan por su cabeza. 

En el Barcelona, Xavi ya no es intocable. La confianza en el técnico se perdió tras el encuentro ante el Inter en el Camp Nou y las dudas han crecido después de las derrotas ante Real Madrid y Bayern. La eliminación en Champions deja muy tocado al catalán después de la gran inversión que realizó el club este verano para obtener una mejora deportiva inmediata. 

Por su parte, el Atlético de Madrid sigue encomendado a Diego Pablo Simeone. Tras más de una década, el proyecto se tambalea. 'El Cholo' jamás será despedido, independientemente de los resultados, pero en el club rojiblanco no se descarta que se esté ante su última temporada como entrenador colchonero si los resultados no acompañan. Es ahí donde aparece el nombre de Luis Enrique como el preferido para la difícil etapa post Simeone.  

La victoria del Inter de Milán ante el Viktoria Pilsen acabó con las esperanzas del Barcelona de alcanzar los octavos de final de la Champions. El equipo azulgrana después cayó nuevamente ante el Bayern y ya sabe que su aventura continental pasa una temporada más por la Europa League. Un fracaso de Xavi, que solo ha ganado un encuentro en Champions desde que llegó al Barça, y que deja al técnico catalán en el alambre. 

Laporta, de momento, mantendrá a Xavi en el cargo, pero sabe que la situación es delicada y que el futuro del entrenador pasa por lograr La Liga esta campaña. El presidente culé activó las palancas a través de la venta de activos para darle al exjugador los fichajes que dieran un salto competitivo al equipo. Lewandowski, Koundé, Raphinha, Kessié, Christensen, Bellerín y Marcos Alonso llegaron a la Ciudad Condal tras un gasto superior a los 150 millones solo en traspasos. 

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Lo cierto es que Laporta nunca estuvo seguro de la elección de Xavi. El hecho de que fuera en la candidatura de Víctor Font y que no tuviera experiencia en los banquillos más allá de en Qatar hacían desconfiar al máximo mandatario azulgrana. Algo se quebró el día del Inter y se confirmó tras perder contra Real Madrid y Bayern. 

Las otras opciones del Barça

Laporta sabe que no puede destituir ahora a Xavi, pero ya mira opciones de cara a la próxima campaña si el técnico no logra La Liga. Ahí es donde emerge la figura de Luis Enrique, el entrenador que ganó la última Champions para los culés en 2015. El asturiano sería la opción del presidente en caso de estar obligado a un cambio, aunque también tiene otros nombres como Tuchel o Gallardo en la recámara. 

La situación en el Atlético es distinta, ya que Simeone cuenta con el aval de tener contrato hasta 2024. Eso sí, el argentino está en su peor momento desde que llegara al banquillo en 2011. Suya será la decisión de continuar o no, pero nadie puede asegurar que no se esté ante el último curso del 'cholismo' en el Metropolitano.

En caso de que esto sucediera, Cerezo y Gil Marín tienen claro cuál sería su entrenador preferido. Los dirigentes rojiblancos tienen a Luis Enrique como el sucesor ideal para Simeone. Del técnico asturiano se valora su trabajo, sus resultados, su carácter y su antimadridismo. Una mezcla que hace del actual seleccionador el candidato número uno en caso de revolución para la temporada 2023/2024. 

Luis Enrique no piensa ahora mismo en otra cosa que no sea el Mundial. Falta menos de un mes para que comience la gran cita y el seleccionador está preocupado únicamente de la lista de convocados para Qatar. Eso sí, el asturiano decidirá su futuro tras las navidades. Su primera respuesta será a Rubiales.