Cómo huir de países en conflicto y vivir para contarlo. Unas jóvenes afganas encontraron el modo de hacerlo y para ello, este grupo de chicas de entre 14 y 16 años, dijeron ser miembros de la selección juvenil de fútbol femenino de Afganistán. Así se les abrieron las puertas de Portugal para ellas.
Lo que no se sabía allá por el mes de septiembre es que de esas 26 chicas, tan solo siete son de verdad futbolistas. Ha sido la cadena pública de Portugal, RTP, la que ha destapado el engaño después de una intensa investigación. En el país vecino, han sido noticia durante estos meses y también medios internacionales fueron haciéndose eco del curioso caso de la selección juvenil de fútbol femenino de Afganistán.
Desde el Gobierno de Portugal se ha amparado toda esta vía de escape de las mujeres afganas porque, tal y como se ha señalado desde el Ministerio de la Presidencia, su objetivo era "salvar vidas y no seleccionar futbolistas profesionales". Una operación de ayuda humanitaria que ha dado la vuelta al mundo.
Fútbol como salvavidas
Las jóvenes llegaron a entrenar en campos de algunos de los equipos más importantes de Portugal. Precisamente, después del primero de los entrenamientos que han llevado a cabo en el país vecino, una de las chicas no ocultaba su felicidad. "Me cuesta creerlo. ¡Estoy tan contenta de volver a jugar!", decía Omul Banin Ramzi en declaraciones para AFP.
Desde el Estadio de Odivelas, al norte de Lisboa, la adolescente afgana se acordaba del mismísimo Cristiano Ronaldo, al que decía que soñaba con conocer: "La situación en Afganistán era muy difícil. Estoy muy feliz de estar en Portugal, el país de Cristiano Ronaldo".
Este grupo de 'futbolistas' afganas llegó al país luso junto a sus familias. En total, un grupo de 80 refugiados que huyeron de Afganistán y que desde que llegaron a Portugal han estado viviendo en hoteles del país, amparados por el Gobierno y coordinando las apariciones de las jóvenes con una ONG estadounidense.
Farkhunda Muhtaj es una de esas chicas que llegaron a Portugal el pasado mes de septiembre. A ella le presentaron como la capitana del combinado nacional y también ha sido ella la que ha admitido a RTP que solo algunas de las consideradas como futbolistas lo son en realidad.
De hecho, Samia Hamasi, la seleccionadora del equipo, tan solo reconoce a 7 de las 26 mujeres que salieron de Afganistán. Y también ha asegurado que en ningún momento se pusieron en contacto con ella para preparar una lista de evacuación. Pero en el momento de ser evacuadas, todas las chicas dijeron ser futbolistas para salir de su país.
Por su parte, Augusto Santos Silva, ministro de Asuntos Exteriores, ha querido confirmar que autoridades estadounidenses se pusieron en contacto con ellos para esta operación de traslado de refugiados afganos hasta territorio luso. Mientras que la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) ha señalado que el organismo respondió a "un pedido de la Alta Comisión para las migraciones del Gobierno portugués".
En cuanto a Muthaj, ha reconocido que "jugaban al fútbol en Afganistán", por lo que se les puede considerar como "futbolistas", pero que "no todas" son de la selección nacional. Sea como fuere, 26 jóvenes con sus familias fueron acogidas por Portugal, en colaboración con Estados Unidos, para evitar el infierno que se vive en su país.
El caso de Kim Kardashian
Otro grupo de jugadoras afganas, estas sí, y sus familiares también ha sido noticia este fin de semana. Ha sido ahora cuando se ha conocido que Kim Kardashian puso un vuelo para 130 personas que salió el miércoles de Pakistán para llegar el jueves a Londres. La celebrity financió el viaje en avión a través de su marca SKIMS.
Este grupo de ciudadanos afganos intentaron salir de su país, rumbo a Catar, a finales de agosto, cuando los talibanes se hicieron con el poder. El atentado en el que murieron 180 personas les dejó sin opción de abandonar a Afganistán. Pero en su empeño de dejar atrás el régimen del terror, se escondieron para más tarde conseguir unos visados provisiones en Pakistán.
Ahí comenzó a orquestarse un plan para llevarlos a un destino definitivo. Y, por supuesto, en el que se garantizase su seguridad. Ahí puso su granito de arena una Kim Kardashian que celebró que todas las futbolistas y sus familiares llegasen sanos y salvos a Inglaterra.
"¡Es un gran privilegio ser parte de esta misión para rescatar al Equipo Nacional Juvenil Femenino de Afganistán! Todas las chicas tienen derecho a ser quienes quieran ser. Son valientes y es trágico que hayan tenido que huir de su país porque quieren jugar al deporte que aman", escribió la Kardashian en Twitter.
Además, Kim hizo un llamamiento: no hay que olvidar lo que se sigue viviendo en Afganistán con los talibanes en el poder. "Me preocupa especialmente que Afganistán se esté convirtiendo en noticia de ayer. Debemos mantener viva la conciencia de todas las personas, en particular mujeres y niñas, que corren el riesgo de ser asesinadas por los talibanes y el Estado Islámico. ¡Mantengamos vivas sus historias y hagamos lo que podamos para ayudar!", añadió la empresaria.
Este grupo, además, ha recibido el apoyo del Leeds United y de la futbolista Khalida Popal, quien fuese capitán del equipo nacional de fútbol femenino de Afganistán. Ella se encargó de coordinar toda la operación que ha llevado a las jóvenes jugadoras y sus familias hasta suelo inglés desde Dinamarca. Fue, precisamente, Popal, quien pidió ayuda a Kim Kardashian. Y esta acudió al rescate para salvar vidas.
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