La liga femenina de fútbol no disputará la jornada prevista en Estados Unidos. La organización, ante las últimas noticias de denuncias por acoso sexual en la competición, ha decidido paralizar todos los partidos como respuesta a los hechos conocidos. Una decisión histórica de la considerada mejor liga del mundo y que llega tras las confesiones de varias jugadoras contra Paul Riley, ya exentrenador de North Carolina Courage.
Lisa Baird, máxima responsable de la liga, ha confirmado en un comunicado que los encuentros no se llevarán a cabo como estaba previsto en un primer momento. "Esta semana, y gran parte de esta temporada, ha sido increíblemente traumática para nuestras jugadoras y personal, y asumo toda la responsabilidad por el papel que he desempeñado", ha reconocido la dirigente de la liga nacional.
"Lamento mucho el dolor que muchos están sintiendo. Reconociendo ese trauma, hemos decidido no salir al campo este fin de semana para dar a todos un poco de tiempo para reflexionar. El negocio como siempre no es nuestra preocupación en este momento. Toda nuestra liga tiene mucho que sanar, y nuestros jugadores se merecen algo mucho mejor", ha subrayado. Según Baird, esta decisión se ha tomado de manera conjunta con la asociación de jugadoras y será solo "el primer paso" para acabar con la lacra del machismo en el fútbol, "algo que debería haberse hecho hace tiempo".
Horas antes, era la propia asociación la que lanzaba un mensaje claro a todas las jugadoras. "Nosotras, las jugadoras de la NWSL, estamos con Sinead Farrelly, Mana Shim, Kaiya McCullough y cada una de las las jugadoras que han sacado a la luz sus historias, tanto las conocidas como las desconocidas. Las palabras no pueden capturar adecuadamente nuestra rabia, dolor, tristeza y decepción. A las jugadoras que sufren en silencio, sabed que la Asociación de Jugadoras tiene un espacio seguro para ustedes. Nosotras estamos dispuestas a ofreceros confidencialmente recursos y apoyo. No estáis solas", anunciaban en un comunicado.
Paul Riley, hasta hace unos días entrenador de North Carolina Courage, fue cesado este mismo jueves tras conocerse las denuncias de las jugadoras. Varias de las que compartieron vestuario con el entrenador revelaron en un reportaje publicado por The Athletic situaciones de acoso sexual, así como comportamientos de coerción por parte del técnico. Lo grave, como denuncian las jugadoras, es que hace unos meses ya se tuvo que despedir a Richie Burke, entrenador de Washington Spirit, tras una investigación interna que confirmaba comportamientos similares.
Jugadoras como Alex Morgan, referentes del mundo del fútbol, han criticado en estos últimos días la actitud que se ha tenido desde la competición. "La liga fue informada de estas acusaciones varias veces y se negó varias veces a investigar las acusaciones. La liga debe aceptar la responsabilidad de un proceso que no protegió a sus propios jugadores de este abuso", ha desvelado la estrella en sus redes sociales, donde ha adjuntado correos electrónicos donde informaba de las situaciones.
[Más información - La pandemia del fútbol femenino: por qué tantas jugadoras se rompen el ligamento cruzado]