La Juventus cayó eliminada contra todo pronóstico ante el Oporto. Un triunfo marcado por el liderazgo de Oliveira en el equipo portugués y por la falta de relevancia de Cristiano Ronaldo en el plantel de Andrea Pirlo. Los italianos ganaron, pero tuvieron que despedirse de la Champions League por el valor doble de los goles fuera de casa. Tras una prórroga y mucha tensión, la Vecchia Signora dijo adiós a la 'Orejona'.
Al término del encuentro las reacciones se multiplicaron en las redes. Y una de ellas, que además ha despertado mucha polémica, se produjo dentro del propio Oporto. El speaker del conjunto portugués empleó sus redes sociales para cargar duramente contra Cristiano Ronaldo y su familia, a la que este empleado pidió que hicieran un vídeo tras el fracaso de su integrante.
Fernando Saúl, quien suele poner voz al Oporto en Do Dragao, tuvo que borrar su mensaje de Instagram tras el revuelo generado. Sin embargo, lo hizo horas más tarde y después de que la polémica ya se hubiera desatado. Por ello, se vio obligado a pedir disculpas en la misma plataforma y a atribuir todo lo sucedido a un 'calentón' por el resultado final. Lo que era una celebración ha puesto al speaker en el centro del huracán.
"Nos vengamos de Basilea contra los ladrones italianos. Nos vengamos del cerdo Ronaldo por lo que le hizo a O Dragao. Qué raza tan orgullosa, este es el Oporto", indicó en dicha red social. "Ahora estoy esperando el vídeo de Dolores y los otros miembros desdentados de la familia", espetó en relación a la madre del deportista y el resto de personalidades que suelen aparecer junto a él.
El tono, evidentemente, fue muy diferente en su disculpa. "Quiero disculparme con Ronaldo y su familia si sintieron que les falté al respeto por las publicaciones que hice ayer en caliente después de una noche histórica", recordó. "Tengo la humildad de reconocer que me excedí y de pedir disculpas". Saúl sabe que se equivocó y actuó "mal" dado que "porque otros se equivoquen" ellos no deben "caer en lo mismo".
Cristiano, señalado
El delantero de la Juventus terminó siendo uno de los grandes criticados por la eliminación del equipo italiano. Porque el conjunto de Pirlo no contó con la brillantez de su delantero estrella ni en la ida ni en la vuelta. Fue Chiesa, el hombre de moda en Turín, el que se echó el equipo a la espalda en el plano goleador en ambos partidos. El luso únicamente dio una asistencia clave a Chiesa, pero de cara a portería no estuvo nada acertado. Es más, perdonó una acción pocas veces vista en él en la que remataba de cabeza un centro al área.
Pero, por si fuera poco, los errores defensivos también terminaron con el luso en el centro del disparadero. La barrera saltó y propició el gol de Oliveira para la sentencia de la eliminatoria. Y justo Cristiano fue quien, además de no mirar el esférico en el momento previo al lanzamiento, generó el hueco que imposibilitó el bloqueo del remate. Una jugada que ha despertado mucho debate en el país transalpino y que ha hecho que el luso sea puesto en duda por los medios.
Su contrato, cabe recordar, acaba en 2022. Sin embargo, a falta de una renovación, podría abandonar el equipo italiano este mismo verano en busca de un nuevo proyecto. La Juventus, así, lograría sacar fondos por un jugador que aún cotiza en el mercado. Algo que en tiempos de crisis económica por la Covid sería todo un impulso a la economía de los de Agnelli.
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