El arranque del Tour de Francia por el País Vasco sigue dejando espectáculo en sus primeros días. La segunda etapa con final en San Sebastián dejó la victoria de Victor Lafay, el ciclista francés del conjunto Cofidis, que si en la primera jornada ya se había dejado ver con los mejores, en esta ocasión se confirmó como una de las revelaciones del inicio de la ronda gala. [Así vivimos la victoria de Lafay en San Sebastián]
La carrera estalló por los aires en la subida final a Jaizkibel, donde de nuevo se pudo ver pelea entre los dos grandes favoritos. Pogacar y Vingegaard se pelearon por unos pocos segundos de bonificación que había en la cima de este puerto y el esloveno resultó triunfador porque se llevó 8 segundos de premio por los 5 de su máximo rival. Aquí cualquier detalle cuenta.
En esta ascensión el grupo cazó a Nelson Powless, el líder de la montaña, que fue el último superviviente de la fuga. El del Education First vendió cara su piel, aunque no pudo aguantar el empuje de los mejores.
Pello Bilbao llegó a soñar con el triunfo cuando se lanzó con todo en el descenso de Jaizkibel, pero los favoritos se reagruparon y el abanico de posibles ganadores a la victoria se multiplicó. Lo intentó Pidcock sin éxito, y justo al pasar por la pancarta del último kilómetro Victor Lafay arrancó sin que nadie pudiera seguirle. Fue un kilómetro agónico, pero el francés resistió y terminó levantando los brazos en la meta de San Sebastián.
Pogacar, ambicioso
La fuga del día estuvo controlada en todo momento por el pelotón. Los favoritos sabían cómo era el final y que en ese terreno se podría aprovechar para hacer algunas diferencias en la general, así que no quisieron dejar escapar la oportunidad.
El último superviviente de esta escapada fue Nelson Powless. El ciclista del Education First, con el maillot de líder de la montaña, fue sumando puntos en las cotas del día para afianzarse en esta clasificación y fue cazado en la última subida del día, la de Jaizkibel, donde todo estalló por los aires.
Powless, con Boasson Hagen.
La carrera se fue preparando para esta ascensión mientras que las nubes y la niebla del País Vasco se iban metiendo en la carrera. No podían faltar entre el paraíso verde vasco. En la subida a Jaizkibiel, UAE Team asumió las riendas de la carrera y se puso al frente mientras cazaban a un Nelson Powless que dio sus últimos coletazos para consolidar su maillot de líder de la montaña.
Adam Yates, vestido de amarillo, hizo el último esfuerzo mientras el resto de favoritos se preparaban para cazar la bonificación en la cima de Jaizkibel. Su hermano Simon se precipitó porque a su rueda salieron Pogacar y Vingegaard, los dos ogros, con otro cambio de ritmo más en las piernas. Quedaba la duda de ver cuerpo a cuerpo quien tenía más explosividad, y ahí ganó el esloveno, al que parece que su muñeca ya no le duele. 8 segundos de bonificación para él y 5 para Vingegaard. Cada detalle cuenta.
Pogacar se lanza en el descenso de Jaizkibel con Vingegaard a rueda.
Parecía que ambos se iban a parar al llegar a la cima pero Tadej amagó con seguir dándole gas a la carrera. Se lanzó para abajo y hasta le llegó a sacar el codo al corredor del Jumbo pidiéndole relevo, pero el danés negó con la cabeza. Lo tenía muy claro, no le interesaba irse tan pronto con su máximo rival y gastar energías. Da igual, son puro espectáculo.
El grupo que llegó por detrás les neutralizó y ahí se abrió un nuevo escenario en la pelea por la etapa. Si alguien se conocía bien esta zona ese era Pello Bilbao, así que el vasco se lanzó con todo en la bajada de Jaizkibel. Consiguió unos metros de ventaja, pero fueron escasos cuando llegó al llano porque Jumbo se organizó bien aunque el desenlace no fuera el mejor para ellos.
Victor Lafay, en el podio celebrando su victoria en la segunda etapa del Tour de Francia.
Ahí comenzaron las miradas, los ataques como el que intentó Pidcock, y los cambios de ritmo. El definitivo lo hizo Victor Lafay. El hombre de Cofidis se lanzó justo bajo la pancarta del último kilómetro con una potencia extraordinaria y protagonizó unos metros agónicos. Pese al esfuerzo de Jumbo, no pudieron cazarle y Lafay consiguió un triunfo brillante para el ciclismo francés y para Cofidis.
Van Aert fue segundo, soltando su rabia por no haber podido alcanzar al galo, mientras que Pogacar terminó tercero y arañó más segundos de bonificación sobre Vingegaard. No le salió casi nada a Jumbo. Dos días preciosos para inaugurar el Tour de Francia.