INEOS es uno de los equipos que está dominando el ciclismo en este siglo. Siempre lo ha hecho, eso sí, con corredores veteranos. Egan Bernal cambió esa tendencia, pero hay otros corredores que fueron fichados con esa idea. Pavel Sivakov (San Donà di Piave, Italia; 2004) es uno de ellos. De padres rusos, creció entre Italia y Francia. Siempre se ha sentido francés y esta semana ha conseguido la nacionalidad para abandonar la rusa, aprovechando justo la invasión de este país a Ucrania.
El veto de la Unión Ciclista Internacional no le afectaba. La UCI estableció que no permitiría correr a los equipos rusos y bielorrusos, así como sus selecciones en ningún evento del calendario internacional. Eso sí, los corredores con esta nacionalidad que corrieran en escuadras extranjeras podían seguir en el pelotón. Aleksandr Vlasov es el otro ciclista de Rusia más reconocido junto a Sivakov, corre para Bora-Hansgrohe, club alemán, y seguirá disputando la temporada sin lucir ninguna simbología rusa.
Sivakov reside en Andorra, nació en la región del Véneto italiano y se hizo ciclista en el Alto Garona galo. Desde 2018 tiene la doble nacionalidad rusa y francesa, pero hasta esta semana la UCI no le había permitido correr bajo la bandera gala. El ciclista que fue campeón junior en Rusia siempre declaró sentirse francés, pero ha corrido el Mundial de 2019 con el maillot del país que ahora vive el bloqueo internacional.
La nacionalidad rusa le viene por sus padres, Alexei Sivakov y Aleksandra Koliaseva. Ambos fueron ciclistas profesionales alineados con la Unión Soviética, aunque nunca forzaron a su retoño a coger el vehículo de dos ruedas. Visitaban poco Rusia y Pavel creció como un niño francés más. Es más, tiene tan interiorizado que Francia es su nación que en el anuncio que hizo en las redes sociales para explicar el cambio de nacionalidad declaraba que su sueño es ir a París 2024 con la selección. Antes quiere cumplir otro sueño en esta tierra.
Más francés que ruso
No es sorprendente que hable tanto francés como ruso. Sivakov creció en Soueich, una localidad a una hora de Toulouse. Allí fue al colegio con compañeros que le hablaban en el idioma galo, mientras en casa también conversaba en ruso. Al menos un mes al año iba al país que le daba su nacionalidad, sobre todo en el inicio de su carrera para disputar campeonatos nacionales. Eso le hizo ir aprendiendo su actual inglés perfecto. Ahora también habla italiano y holandés.
"Quizás siento que soy más francés que ruso, pero los dos países son parte de mi cultura", explicaba un joven Sivakov en un francés con acento del suroeste de Francia que acababa de fichar por el Team Sky. Para llegar a firmar por la entidad británica, el pequeño Pavel había brillado en la Ronde de l'Isard, así como en el Baby Giro. No tuvo tanta suerte en la principal competición juvenil, el Tour de l'Avenir, que también corrió con el maillot ruso.
Sivakov se mudó a Francia por la carrera ciclista de Alexei. El ciclista del Roslotto-ZG Mobili y del BigMat-Auber 93 no tuvo grandes resultados en su carrera, pero su vinculación con el ciclismo ruso fue muy importante. Fue director deportivo del Katusha, equipo ya desaparecido, y trabajó distribuyendo bicicletas en el país. Aleksandra Koliaseva también trabajaba con el Rusveló femenino, aunque esta vinculación acabó hace tiempo.
Ante el estallido del conflicto tras la invasión de Rusia a Ucrania, el joven Sivakov se mostró muy contundente la semana pasada. "Han sido unos días difíciles viendo lo que está sucediendo. En primer lugar, solo quiero decir que estoy totalmente en contra de la guerra y no puedo evitar lo que está sucediendo en Ucrania, todos mis pensamientos están con el pueblo ucraniano. También quiero que la gente entienda que la mayoría de los rusos solo quieren la paz y nunca pidieron que todo esto sucediera, no deberíamos ser objeto de odio solo por nuestro origen", sentenció.
El Tour
A sus 24 años, se ha encontrado con una generación extraordinaria de ciclistas que no le han permitido tener ya un resultado destacable en una gran vuelta. Sivakov solo puede presumir de un noveno puesto en el Giro de 2019. También tiene en su palmarés un Tour de los Alpes, una de las carreras de preparación para la ronda gala de más prestigio. Pero todavía se espera su gran salto.
Egan Bernal y Pavel Sivakov, durante una carrera.
La situación de Egan Bernal tras su grave accidente ha dejado a INEOS un tanto descabezado. Este 2022, Sivakov solo ha corrido en la Volta a la Comunitat Valenciana donde logró ser noveno. Una vez ha dejado atrás su etapa Sub23, tiene que dar un paso adelante este año. En julio se espera su presencia en el Tour de Francia, el segundo que correrá en su todavía joven carrera. Ahora lo hará como francés en la carrera de casa.
Pero el cambio de nacionalidad se entiende sobre todo para competir con la selección. En el próximo Mundial en Australia, si la situación de sanciones sigue así, no podría competir con la selección rusa. En cualquier caso, Sivakov mira hacia los próximos Juegos Olímpicos. Estuvo en Tokio 2020 donde ya tuvo que correr sin la bandera del país, si no como Comité Olímpico Ruso. No pudo estar con los mejores y entró en 35ª posición. Ahora centra el objetivo en París 2024.
Thomas Voeckler, el responsable del equipo francés, se mostró contento de contar con un ciclista como Pavel para Le Parisien: "Sin revelar un gran secreto, ya había estado en conversaciones con Pavel durante varios meses, pero que se haya acelerado el proceso de nacionalización es algo muy bueno cuando conoces su potencial. Sería malinterpretable decir: Sivakov es seleccionable, le haré sitio. Su puesto en el equipo nacional se lo ganará dando pedales".
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