Acostumbramos a ver a los animales en su medio natural, con sus quehaceres diarios, y no a mirar más allá. Las fotografías premiadas en los Comedy Wildlife Photography Awards se fijan en esas otras facetas: los momentos torpes, divertidos, desastrosos que puede tener desde un macaco hasta un ave. Como cuentan desde esta plataforma, desde que existen las cámaras, la gente ha compartido imágenes divertidas de animales. La hubo en blanco y negro y las hay ahora, a todo color y acompañadas de la palabra 'viral', propia de nuestra época. El atractivo, en cualquier caso, es imperecedero. Su atractivo es indeleble y brota de esa tensión entre la verdadera naturaleza de un animal y las connotaciones humanas que representa sin saberlo. Aquí va una selección con algunas elegidas de esta edición y de anteriores. 

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    Disputa de aves.

    "Capté esta escena mientras observaba pájaros en el bosque de Bialowieza. Los padres todavía alimentaban al joven verderón. Sin embargo, de vez en cuando parecía que los pájaros discutían. Mis amigos interpretan esta escena de dos maneras: una, un niño travieso está discutiendo con sus padres; dos, un niño le informa a sus padres que su hermano hizo algo mal: mire, ha roto el cristal de la ventana", describe el autor.
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    Cháchara de lunes.

    "Este gran búho gris pasó la mayor parte de la tarde posando majestuosamente y luciendo sabio. Pero por un momento o dos, después de hacer algunos estiramientos elegantes, se desplomaba y daba una mirada de '¿ya se acabó el lunes?'. Mientras fotografiaba el gran búho gris que se muestra en mi imagen, estuve ocupado trabajando para capturar esa pose de aspecto majestuoso. Mientras se acicalaba y luego se quedaba quieto por un momento, se estiró una vez más y por un breve momento adoptó la pose mostrada", relata el fotógrafo.
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    El dandy de la selva tropical.

    "Esta foto fue tomada en el bosque de los monos en Ubud, Bali. ¡Este lugar es un lugar loco donde los monos son los reyes! a veces dan espectáculo, a veces se suben a ti para buscar pulgas o te roban el trozo de galleta que intentas comer. Su reino, llamado bosque lluvioso, tiene tres templos hindúes. Este bosque es especial, incluso mágico y sagrado para los balineses. ¿Quizás nuestro dandy sea la reencarnación de una divinidad?", se cuestiona la autora.
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    Habla con el finlandés.

    "Esto fue filmado en las Islas Malvinas. Estos dos pingüinos papúa estaban en la playa cuando uno se sacudió y le hizo un desaire a su pareja", explica la fotógrafa.
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    Hola a todos.

    "Fotografié un mapache en una playa de Florida, donde le di de comer gambas. Luego me agradeció así", comenta el autor.
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    Pegaso volador.

    "En realidad, este es el indio Saras Crane atacando a un Bluebull por detrás, el toro se aventuró cerca del nido de Saras, donde había puesto un solo huevo. La grulla de Saras, que es el ave voladora más alta del mundo, abrió sus enormes alas y atacó al toro por detrás, ahuyentándolo del nido", explica.
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    ¡Ouch!

    "Un mono de seda dorada en Yunnan, China. En realidad es una muestra de agresión, sin embargo, en la posición en la que se encuentra el mono, ¡parece bastante doloroso!", comentan en la web del premio.
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    Canguro tocando la guitarra.

    Los canguros son "bastante dóciles", dice el autor de esta foto, tomada durante la temporada de flores silvestres de Australia Occidental. En esta época, la hierba está llena de garrapatas e insectos que pican, y provoca que los animales se rasquen, como si estuvieran tocando una guitarra.
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    ¡Maldición!

    El fotógrafo estaba documentando a los pelícanos dálmatas que frecuentan el lago Kerkini, en Grecia, en los meses de invierno cuando captó este desgarbado momento. "A veces pescan en grupo y puede haber altercados. En este caso, otro pelícano logró intimidarlo para que soltara el pez y se lo robó", cuenta.
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    Buffalo teniendo un mal día

    Parece que ha sido uno de esos días para este sufrido búfalo, capturado en el Parque Nacional Meru de Kenia. La región, dice el fotógrafo, es "relativamente árida y escasamente poblada", por lo que encontrarse con esta pareja de mala reputación, en este incómodo momento posterior a la caca, le dio al autor algo de oxígeno y humor después de un largo día dando vueltas en el safari.
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    El pez sonriente.

    El fotógrafo estaba buceando en El Hierro, en las Islas Canarias, cuando se topó con este alegre pez loro mediterráneo, cuya sonrisa deliciosa parece sacada de 'Buscando a Nemo'. "Vi este pez en particular, con su 'sonrisa' especial, y esperé, recostado en silencio sobre la roca. Tomé algunas fotografías desde más lejos, sólo para asegurarme, y luego el pez nadó directamente hacia mí por un instante, dándome tiempo para una más… la toma perfecta", relataba el autor.
Alberto G. Palomo