¿Qué tipos de apellidos existen en España? Desde el punto de vista histórico, se pueden clasificar los apellidos españoles en cuatro tipos... Y de entre estos cuatro tipos, encontraremos que hay una forma lingüística de configurar un apellido que es muy frecuente en España.
¿Quieres conocer de qué tipo es tu apellido y cuál es la historia que puede llevar detrás? Aquí te damos la clasificación completa, así como los ejemplos principales que podemos encontrar para que conozcas el origen de tu apellido.
¿Cuáles son los tipos de apellidos que existen?
La mayoría de los apellidos, según el origen, se pueden dividir en las siguientes clasificaciones más comunes, que son las siguientes:
- Apellidos patronímicos.
- Apellidos toponímicos.
- Apellidos derivados de nombres comunes.
- Apellidos derivados de oficios o profesiones.
- Apellidos descriptivos o de apodos.
- Apellidos castellanizados
Apellidos patronímicos
En primer lugar, nos encontramos con los apellidos patronímicos, que son los originados por un nombre propio y son el conjunto de apellidos más extendidos en España. Los patronímicos procedentes de la corona de Castilla a menudo se derivan del nombre del padre mediante las terminaciones -ez, -oz, -iz y hasta -az.
[¿Por qué en España hay muchos apellidos que acaban en 'ez'?]
Para entender por qué son los más comunes, tenemos que entender el origen de los apellidos en sí mismo. En primer lugar, la RAE define la palabra "apellido" como "nombre de familia con que se distinguen las personas", "sobrenombre o mote". Por lo tanto, los apellidos nacen de la necesidad de identificar a una persona no sólo por su "nombre", sino por su "pertenencia", es decir, su vínculo a una familia y a un lugar.
Siempre ha sido necesaria esa fórmula lingüística de identificación, de hecho, durante mucho tiempo se llamaba a las personas no por su apellido, sino por su profesión, lugar de nacimiento o particularidad física. Los ejemplos pueden ser los siguientes: Carlos el Molinero (profesión), Carlos el Sevillano (su lugar de origen) o Carlos el Delgado (por una peculiaridad física). Y como no, no podemos olvidar una última fórmula identificativa: Llamar a una persona con nombre, seguido del nombre de su padre, por ejemplo: Carlos, el hijo de Rodrigo. Durante mucho tiempo estas formulaciones eran consideradas como "apellidos" puesto que cumplían la función buscada.
Sin embargo, en la Edad Media ya surgen los apellidos propiamente y como los conocemos hoy en día. Concretamente, estos nacen cuando las clases altas empezaron a usarlos a partir del siglo XIII. Sería en ese momento cuando comenzaron a utilizarse los apellidos acabados en -ez, que significan 'hijo de'. Sin embargo, el origen de esta fórmula se desconoce, y así lo establece Alfaro de Prado.
Esta terminación -ez significa 'hijo de' y por lo tanto: Fernández era el hijo de Fernando; Rodríguez el de Rodrigo; Sánchez el de Sancho; Pérez el de Pere; Gómez de Gome o Gomo; Hernández el hijo de Hernando, Álvarez el hijo de Álvaro; Menéndez el hijo de Menendo; González hijo de Gonzalo; Martínez hijo de Martín; López hijo de Lope... Sin embargo, en español, "ez" por sí sólo no quiere decir nada.
Fernando González del Campo, genealogista dice lo siguiente: "Si lo comparamos con los apellidos de otros países de lengua románica, como Francia, Italia o Rumania, los únicos que utilizan esta terminación son los de la península Ibérica".
También dice lo siguiente: "Sabemos que el uso del patronímico 'ez' ya estaba extendido en Navarra en los siglos VIII y IX", escriben en Heraldaria. "De hecho, García Íñiguez era el nombre del rey de Navarra que, en el año 851 u 852 sucedió a su padre, llamado Íñigo"
Apellidos toponímicos
En segundo lugar, tenemos los apellidos toponímicos que son aquellos que derivan del nombre del lugar donde vivía, procedía o poseía tierras la persona o familia asociados al apellido. Muchos se encuentran precedidos de la preposición "de", "del", "de la" o simplemente son gentilicios.
Algunos apellidos que son patronímicos son los siguientes: Alesanco, Ojeda, Ocaña, Catalán, Corral, Fresneda, Dávala (De Ávila), Navarro, Salazar, Soto, Torrente, Villanueva, Yuso...
También los apellidos que encontramos con el "del", que se usan en España frecuentemente, entre ellos, los siguientes:
- Del Río.
- Del Valle.
- Del Pino.
- Del Campo.
- Del Castillo.
- Del Olmo.
- Del Moral.
- Del Amo.
- Del Barrio.
- Del Rey.
- Del Val.
- Del Cerro.
- Del Hoyo.
- Del Toro.
- Del Rosario.
- Del Alamo.
- Del Arco.
- Del Prado.
- Del Águila.
- Del Saz.
- Del Fresno.
- Del Barco.
- Del Sol.
- Del Blanco.
- Del Cura.
- Del Real.
- Del Hierro.
- Del Puerto.
- Del Amor.
- Del Caño.
- Del Canto.
- Del Monte.
- Del Bosque.
- Del Palacio.
- Del Peso.
- Del Rincón.
- Del Corral.
- Del Mazo.
- Del Rosal.
- Del Cid.
- Del Villar.
- Del Burgo.
- Del Carmen.
- Del Estal.
- Del Molino.
- Del Riego.
- Del Ojo.
- Del Riego.
- Del Peral.
- Del Viso.
- Del Viejo.
- Del Casar.
- Del Teso.
- Del Baño.
- Del Coso.
- Del Cueto.
- Del Árbol.
- Del Brío.
- Del Caz.
- Del Paso.
- Del Corro.
- Del Dedo.
- Del Solar.
- Del Portillo.
- Del Brío.
- Del Caz.
- Del Vas.
- Del Dedo.
- Del Portillo.
- Del Jesús.
- Del Salto.
- Del Tio.
- Del Hogal.
- Del Egido.
- Del Ramo.
- Del Ser.
- Del Pueblo.
- Del Agua.
- Del Diego.
- Del Cacho.
- Del Buey.
- Del Ramo.
- Del Horno.
- Del Cuadro.
- Del Caso.
- Del Llano.
- Del Pico.
- Del Ama.
- Del Oso.
- Del Fueyo.
- Del Nido.
- Del Pico.
- Del Dago.
- Del Nuevo.
- Del Cabo.
- Del Oro.
- Del Soto.
- Del Junco.
- Del Cuvillo.
- Del Santo.
- Del Reguero.
- Del Cano.
- Del Vals.
- Del Vado.
- Del Carpio.
- Del Sastre.
- Del Espino.
- Del Pueyo.
- Del Coz.
- Del Cojo.
- Del Ruste.
- Del Pazo.
- Del Marco.
- Del Piñal.
- Del Fraile.
- Del Dujo.
- Del Pliego.
- Del Bosch.
- Del Castillo-Olivares.
- Del Pozuelo.
- Del Collado.
- Del Ordi.
- Del Olivo.
- Del Salado.
- Del Trigo.
- Del Bot.
- Del Boz.
- Del Prestamo.
- Del Torno.
- Del Bado.
- Del Ángel.
- Del Pilar.
- Del Pont.
- Del Reino.
- Del Tejo.
- Del Bien.
- Del Guayo.
- Del Socorro.
- Del Alcazar.
- Del Gallego.
- Del Gallo.
- Del Roj.
- Del Bao.
- Del Huerto.
- Del Pecho.
- Del Ganso.
- Del Saac.
- Del Camino.
- Del Arroyo.
- Del Arco-Calderón.
- Del Valls.
- Del Verbo.
- Del Bustio.
- Del Frago.
- Del Orden.
- Del Páramo.
- Del Pie.
- Del Puente.
Apellidos vinculados a la naturaleza
En tercer lugar, tenemos aquellos apellidos que se relacionan con la naturleza, por ejemplo, la flora, la fauna o las peculiaridades de una región. Es el caso de algunos como los siguientes: Manzano; Castaño; Castañeda; Pereira; Pereda; Figaredo; Noguera; Olivares; Robledo...
Apellidos de oficios o profesiones
También cabe hablar de "apellidos ocupacionales", son aquellos que derivan del oficio o profesión que ejercía la persona o familia asociada al apellido. Es el caso de: Alférez, Carpintero, Guerrero, Hidalgo, Verdugo, Zapatero, entre otros.
Apellidos de apodos o de descripciones
Además, también encontramos apellidos que tienen un origen en una descripción o algún apodo de la persona o familia asociada al apellido. Es el caso de: Aguado, Alegre, Barriga, Cabello, Calvo, Lozano, Pequeño, entre otros.
[¿De dónde proviene el apellido 'Calvo'? Este es su origen y significado]
Apellidos castellanizados
En cuanto a los apellidos castellanizados, estos son aquellos que no tienen origen hispano, pero que con la influencia del castellano fueron transformándose con una grafía o gramaticalmente a lo más parecido en la fonética española. Es el caso de algunos como: Branco > Blanco.