Tal y como ha podido saber este periódico, los restos de los hermanos Manuel y Antonio-Ramiro Lapeña, fusilados y enterrados en el Valle de los Caídos, entre los 34.000 cadáveres, han sido localizados, la cripta tiene fácil acceso y los columbarios en los que se encuentran aparentemente están en buen estado. El informe redactado por los especialistas del Instituto Eduardo Torroja, perteneciente al Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL apunta que el próximo julio podrá llevarse a cabo la operación.
La humedad no se ha comido la memoria de estos represaliados enterrados sin su consentimiento en el Valle de los Caídos. Los técnicos accedieron al tercer nivel de cuatro de esta capilla, donde los registros indicaban que se encontraban las nueve cajas de los restos del fusilamiento de Calatayud, donde se encuentran los hermanos. Patrimonio Nacional explica que con las conclusiones del informe que había encargado iniciará "a la mayor brevedad posible, las obras para acceder al nivel 3 de la cripta adyacente a la Capilla del Santo Sepulcro, conforme a las conclusiones del Informe".
El acceso
La puertecilla, cerrada siempre al acceso del público, sube a los osarios, todos tapiados. Ahora habrá que hacer una y esto retrasará hasta julio la apertura, porque habrá que hacer un contrato menor. Cada rellano da a una pared y los técnicos han echado abajo la del tercer piso. Los técnicos no sabían en qué condiciones estarían las cajas de ese nivel. Ahora parece que la operación es posible y coincidirá con la salida de los restos de Francisco Franco del Valle de los Caídos.
Los trabajos realizados han subrayado varias zonas de acceso al nivel tres de la cámara de los columbarios de la cripta. Los tabiques no son estructurales y "pueden practicarse huecos de acceso sin que la estructura principal se vea afectada". En una situación similar se encuentran los tabiques de cerramiento de los descansillos de la escalera principal del trasdós de la citada Capilla. Una inspección de la cripta del nivel tres con el videoscopio se ha observado "una disposición ordenada de los columbarios, apilados en columnas dentro de la cripta". Tal y como informan los especialistas, "el estado de conservación de la mayoría de las zonas visualizadas es aceptable, manteniendo su integridad".
"El acceso podría hacerse practicando un hueco, salvando la zona afectada por el conducto de ventilación y la estructura, en una zona del tabique con altura comprendida entre 0,30 metros y 1,40 metros", señala el informe. "La apertura del hueco podría empezarse por el centro de las zonas señaladas y después seguir ampliándola hasta la extensión que sea precisa. Se recomienda hacer la demolición de forma controlada, extrayendo los fragmentos de tabique hacia el local de la maquinaria del órgano [que se encuentra en la cámara de entrada a los columbarios] con el fin de no afectar al contenido de las criptas", señalan los expertos.
Los expertos señalan en el informe que la demolición de parte de este cerramiento no tiene influencia sobre la estabilidad y seguridad estructural del conjunto. "Una vez realizadas las tareas de identificación de las cajas y retirada de restos, en su caso, podría reconstruirse fácilmente con materiales similares a los existentes". El estudio tenía como fin dar respuesta al Auto del Juzgado de Primera Instancia nº2 de San Lorenzo de El Escorial, sobre la solicitud de exhumación de dos personas presumiblemente inhumadas en el Valle de los Caídos.
Un duro camino
El juez José Manuel Delgado, del Juzgado de Primera Instancia Número 2 de San Lorenzo de El Escorial, autorizó la exhumación de los restos mortales de los hermanos fusilados en mayo de 2016. El auto reconoce el derecho de la nieta de Manuel a dar una “digna sepultura” a su abuelo y tío abuelo. Por primera vez, el Valle de los Caídos pierde su impunidad franquista, casi seis décadas más tarde, y se abre a la sociedad civil, que reclama los cuerpos para darles el entierro que demandan sus familiares.
“Hemos conseguido tener derecho a la digna sepultura y se autoriza a realizar actuaciones para exhumar”, contaba entonces el abogado de la familia, Eduardo Ranz, a este periódico, que acaba de aceptar el cargo de asesor de Memoria Histórica en el Ministerio de Justicia. Ranz ha movido el caso desde el 20 de noviembre de 2012, primero en el Juzgado de Instrucción, luego en la Audiencia Provincial de Madrid, en el Tribunal Constitucional y en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Todos archivaron la causa. La vía penal, la que busca responsables, quedaba cercenada. Todos los procesos penales que se han abierto en el Valle han acabado archivados. Hasta el pasado mayo.