Hace unos días, la baronesa Thyssen concedió una entrevista a Espejo público en la que, más sincera que nunca, habló, entre otros temas, de su admiración por el rey Juan Carlos, de las historias amorosas que han marcado su vida, o del ofrecimiento de Putin de nombrarla "reina de San Petersburgo" si trasladaba su colección pictórica a Rusia.
Pero si algo llamó la atención de la extensa charla fueron sus declaraciones revelando que ha cambiado su testamento en numerosas ocasiones, y que ya ha decidido quién continuará con su legado cuando ella ya no esté. No será su hijo mayor, Borja Thyssen, el que se hará cargo de la gestión de su multimillonario patrimonio artístico, sino una mujer cuyo nombre no ha desvelado por el momento, aunque todo apunta que se trata de una de sus mellizas, Carmen, que en junio cumplirá la mayoría de edad.
Una sorprendente decisión la de la Baronesa sobre la que Borja no quiere pronunciarse. El marido de Blanca Cuesta ha reaparecido este pasado viernes, día 26, en una exclusiva joyería de la Milla de Oro madrileña y, al ver a las cámaras, ha huido a la carrera y ha llamado a un taxi para esquivar las preguntas de los reporteros.