Sólo quedan 24 horas para que Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (34) se den por fin el 'Sí, quiero', en una ceremonia religiosa que tendrá lugar en el palacio El Rincón, una de las joyas inmobiliarias de los Falcó. Llegar hasta aquí no ha sido nada fácil para la pareja que ha tenido que saltar todo tipo de obstáculos para verse convertidos de una vez por todas en marido y mujer.
Aún así hay muchos que siguen desconfiando de su relación y, sobre todo, de la lealtad del novio. Cabe recordar que los enamorados pusieron fin a su romance después de que se hiciera público un vídeo del empresario besándose con otra mujer en un festival de música. Tras la reconciliación de la pareja meses después, otra mujer ha contado su testimonio asegurando que Íñigo también le fue infiel a Tamara con ella.
Carmen Lomana (74) es una de las personas que pone en duda que este matrimonio sea feliz para siempre. De hecho, ha llegado a bromear con que la boda finalmente se produzca: "He puesto una vela a Santa Rita, abogada de todas las causas imposibles, para que no se suspenda porque con todo lo que ha pasado...". "Tamara ya no llora, Tamara factura, porque con todo lo que ha pasado y ha aguantado todo, está encantada" asegura, apuntando que por la millonaria cantidad que le pagará la revista ¡HOLA! por la exclusia "se puede casar con el mismísimo Lucifer".
[El vídeo de Íñigo Onieva besando a otra mujer que no es Tamara Falcó y que pone en jaque su boda]
"Esas cantidades me parece un disparate, pero bueno, si hay que gente que lo paga fenomenal", reconoce Carmen Lomana sin entender la expectación que se ha creado en torno al 'Sí, quiero' de la marquesa de Griñón. "Qué país de necios tenemos", sentencia.
Carmen también habla de las declaraciones de la policía nacional que rompió su silencio hace unos días hablando de su affaire con Íñigo en abril de 2022. A la socialité, según ha expresado públicamente, no le han parecido acertadas. "Me lo creo todo, pero me ha parecido feo y que lo diga unos días antes, y encima lo de que no le pone (en el terreno sexual) me parece irreversible" reconoce, apostando porque la pareja durará casada "como mucho año y medio o dos años". "Tengan niños o sin niños, que supongo que le pondrán empeño y harán lo posible por tenerlos", asegura.