La modelo Lucía Rivera (23 años), hija de Blanca Romero (46), y cuyo padre adoptivo es Cayetano Rivera (45) -el cual le cedió sus apellidos-, no conoce a su padre biológico. Este se ha convertido, con el paso de los años, en uno de los grandes secretos de la prensa del corazón en España.
Su madre, Blanca, se ha mostrado siempre reacia a la hora de hablar de quién fue la persona con la que concibió a su hija, y Lucía ha tratado y valorado a Cayetano Rivera como ese padre biológico que nunca ha conocido. No obstante, esto no es óbice para que a la maniquí no le asalten las dudas y reflexione sobre esa figura tan capital en la vida de toda persona.
Hasta la fecha, sólo se conoce que el padre de Lucía Rivera es un modelo británico llamado Warren. Así las cosas, en las últimas horas la joven no ha dudado en escribirle una impactante y emotiva carta. Lo ha hecho en la conocida newsletter Club de cartas, de la influencer y escritora Estefanía Ruiz.
[Lucía Rivera desvela sus problemas de salud mental y recibe el apoyo de su padre, Cayetano Rivera]
La joven modelo esta vez no ha querido hacer referencia a su salud mental, como ha hecho en anteriores ocasiones. Ahora, ha optado por sincerarse sobre otro tema muy importante para ella: la figura de su padre biológico. En dicha plataforma acaba de estrenarse la hija de Blanca Romero y lo ha hecho dirigiéndose, con el corazón en la mano, a ese progenitor "ausente" en su vida.
"Querido X", encabeza su carta la modelo, antes de preguntarse "si mis imaginaciones sobre ti serán ciertas", "si te he creado un personaje" o "si nuestras manos y piernas seguirán siendo iguales y si cada año que pasa sin saber de ti nos parecemos más o somos más desconocidos que nunca".
En ese punto, continúa su post la joven maniquí, dirigido a ese pilar invisible, su padre. "Has sido un pilar invisible que me ha permitido coger más aire". "A veces me pregunto si eres tan sensible como yo, tan romántico y soñador", reflexiona Lucía, la cual ha llegado a reconocer que ha pasado por un proceso de depresión.
Para rematar su carta, realiza una sorprendente y dura confesión: "Cuando era pequeña me aterraba la idea de contar que soy adoptada por parte de padre porque este hecho fue motivo por el que me hicieron bullying durante muchos años".
La salud mental de Lucía
Aunque Cayetano y Blanca sólo fueron marido y mujer durante tres años, en la distancia el diestro ha seguido de cerca la vida y la carrera de Lucía, mostrándole a menudo su apoyo a través de las redes sociales. Una de las últimas ocasiones en la que apreciamos su cercanía fue cuando la modelo se sinceró en su columna de La Vanguardia sobre sus problemas de salud mental, lidiando con la depresión y la ansiedad.
"El cerebro es lo más importante en nuestro cuerpo, incluso hay estudios que certifican que, si nuestro cerebro está mal, no sólo sufrimos nosotros, sufre nuestro cuerpo y también nuestro sistema inmunitario", explicó Lucía en su debut como redactora, normalizando así o necesaria que es la ayuda profesional de psicólogos y psiquiatras.
"En mi caso he sufrido ansiedad desde muy pequeña. Al vivir con ella os diría que llegué a aceptarla de tal manera que se hizo mi compañera, ni siquiera la reconocía", apostilló.
Animando a los más jóvenes a recurrir a la terapia siempre que sea necesario, Lucía resaltó entonces la importancia de atender las señales: "Es importante hacer caso a esas señales, porque si nuestra cabeza no está bien, todo lo demás se vuelve oscuro, gris, difícil... Y aunque la depresión durante la juventud la veamos lejana, puede estar más cerca de lo que creemos si no nos cuidamos. Si no conocemos bien esta enfermedad, en cualquier momento puede venir a buscarnos".
Tras unas palabras así, la hija de Blanca Romero recibió una felicitación de lo más especial. Cayetano Rivera no dudó en darle la enhorabuena públicamente a través de una publicación de Instagram en la que se puede leer: "Enhorabuena por el artículo. Por la importancia del tema, por la necesidad que hay de hablarlo y por la seriedad con la que lo has tratado".
Feliz y orgullosa, Lucía contestó a su padre demostrando la maravillosa relación que existe entre ellos a pesar de la distancia: "Gracias, TQM".