El 13 de diciembre de 2021 el cuerpo de la actriz Verónica Forqué era hallado sin vida en su domicilio madrileño, en la céntrica calle Víctor de la Serna. Según la autopsia, el motivo de su fallecimiento fue una asfixia mecánica por ahorcadura.
El cuerpo sin vida de la celebérrima actriz, querida y admirada por todos, fue encontrado en el baño de su casa por la señora encargada del servicio de su hogar. Esa misma mañana, minutos antes, su hija, María Iborra (31 años), había estado con ella.
Una dura e irremplazable pérdida que fundió a negro el mundo de la interpretación y la televisión, y enlutó los corazones de quienes la quisieron, amaron y admiraron. Han pasado cuatro meses de aquel nefasto día, y la vida de su entorno trata de continuar sin la artista.
Según ha podido conocer EL ESPAÑOL en las últimas horas, la familia sigue recordando a Forqué cada día, en los momentos más cotidianos. En ocasiones, se hace difícil de digerir su malograda impronta y esa bonhomía que todo lo impregnaba.
"Dejó una huella increíble en todos, por eso cuesta tanto entender que no esté y por eso cada decisión es un mundo. Siempre está el '¿qué haría ella?'. A veces uno piensa que nunca fue del todo consciente de lo importante que era para los demás", explica alguien cercano a los Forqué.
En lo que respecta al bien inmueble en el que Verónica Forqué vivió hasta el final de sus días, este periódico ha podido confirmar que continúa siendo habitado por algunos familiares. Ni está en venta ni en alquiler.
Todo hace indicar que así seguirá de momento. "Todavía no se ha tomado ninguna decisión al respecto, que yo sepa. Lo que sí te puedo decir es que en estos momentos en el piso están viviendo unos familiares", informó hace unas semanas una fuente de total solvencia.
"La última palabra la tendría María, pero en acuerdo con otros familiares. No hay que olvidar que Álvaro, el hermano fallecido de Verónica, tenía hijos", se añadió, matizando que la casa es familiar, pues allí vivieron anteriormente los padres de Verónica, y fue despacho y sede del célebre director y guionista José María Forqué Galindo.
En esa línea, este medio ha podido confirmar, tras el avance de 20Minutos, que María Iborra Forqué ha tomado las riendas de los bienes que su madre le dejó en herencia. Ella es la encargada de gestionarlos. Fue la decisión que tomó la magnánima Forqué.
"Es una mujer con la cabeza bien amueblada, muy madura y sensata. Que sabe lo que hace. Vero bien la conocía y por eso confió en ella. También la hija está al cargo de la perrita que tenía ella", desliza una fuente al otro lado del teléfono.
Cabe recordar en este punto que Verónica contaba, como patrimonio, con esta casa de Víctor de la Serna -que atesora gran historia familiar-, y dos inmuebles en Cartagena, que adquirió en 2019.
"María quiere hacer las cosas bien y ya verá lo que hace con todo. Una vez que su madre partió, lo demás le importa poco o nada. No es nada materialista", se apostilla.
En otro orden de cosas, la joven Iborra Forqué no lo está pasando nada bien. María está recibiendo acoso en las redes sociales a raíz de la muerte de su madre. El motivo no es otro que la forma en que está llevando el duelo por la pérdida de su progenitora.
Hay quienes entienden que la vida de María no se corresponde con lo que debería ser dada su trágica situación familiar. Opiniones hirientes y fuera de toda lógica. La hija de la Forqué se ve "superada" algunos días, y se desahoga con su entorno sobre este acoso del que es víctima.
"Vivimos en una sociedad enferma que se dedica a señalar y a machacar a todo aquel que no actúa como la sociedad quiere. ¿Acaso ella sufre menos por seguir con sus shows y sus trabajos? ¡En qué mundo vivimos! Bastante tendrá ella", asevera un buen amigo de María.
"Voy a continuar con mi vida y mis trabajos porque mi madre me conocía y es lo que ella habría querido que hiciera", expresó María Iborra poco después del funeral. Así lo ha hecho, en honor a la actriz y a la faceta rebelde y transgresora que siempre las unió a las dos.
María no ha parado de trabajar en este tiempo tras la desaparición de su madre. Su agenda laboral ha estado repleta de compromisos dentro y fuera de España. Bajo el nombre artístico de Virgen María, la joven ha llevado por el mundo sus impactantes shows en los que ejerce de Dj y showgirl con sus actuaciones de pole dance.
En contraste absoluto con su apodo, la hija de Forqué luce una imagen muy llamativa, una figura exuberante que no teme mostrar casi desnuda, con looks imposibles y complementos de un mundo sobrenatural. Ella pone en jaque la censura de las redes sociales y los tabúes sociales, y esa personalidad es la que ha conseguido captar la atención del público internacional.
La joven vive uno de sus momentos profesionales más prolíferos. Con este éxito a sus espaldas, EL ESPAÑOL pudo conocer hace unas semanas, por fuentes de su entorno, que María se encuentra "bien, ilusionada con sus proyectos" y no se olvida de su madre: "Sabe que ella desde donde esté la cuida más que nunca", se desliza a este medio.
Además, quienes la conocen hacen hincapié en que la Dj ha aseverado que últimamente está "más inspirada que nunca" y que "está convencida de que todo lo bueno que le está llegando es gracias a la energía que le manda su madre".
A su triunfo internacional gracias a sus llamativos shows, hay que tener en cuenta que María tiene un puesto fijo en una famosa discoteca de Madrid donde lleva a cabo sus actuaciones musicales y sesiones nocturnas, protagoniza campañas de marcas de moda y al mismo tiempo arrasa en la app de contenido para adultos Only Fans por la que cobra entre 2.000 y 5.000 euros al mes.
[Más información: María Iborra, tres meses sin su madre, Verónica Forqué: shows alrededor del mundo y "más inspirada que nunca]
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