Después de más de un año de su fallecimiento debido a la Covid-19, familiares y amigos de Carlos Falcó han podido al fin acudir a su misa funeral para rendirle homenaje como les hubiese gustado si no fuera por las medidas de distanciamiento social impuestas por las autoridades sanitarias. En la especial cita no faltaron sus hijos Manuel (57), Xandra Falcó (53), Tamara (39), Duarte (27) y Aldara (23) celebrada en la Basílica de San Francisco el Grande de Madrid donde tuvo lugar la misa y donde una de las primeras en llegar fue su viuda, Esther Doña (42).
Aunque la relación entre la que fuera mujer del marqués de Griñón y sus hijos no es del todo buena, lo cierto es que este lunes todos han sabido aparcar sus diferencias para rendirle un sentido homenaje a Carlos Falcó.
Todos de riguroso negro y recordando la figura del fallecido aristócrata con un gran cariño hacia él, también muchos amigos de la familia se dieron cita en la Basílica para acompañar a la familia en el homenaje que tanto necesitaban desde su adiós. Entre los rostros conocidos que se dejaron ver destacaron Carolina Herrera, Carmen Lomana, Fernando Martínez de Irujo o la infanta Elena (57) que mantiene una maravillosa relación de amistad con toda la familia desde hace años.
"Un día muy especial, ha pasado mucho tiempo, pero hemos considerado que ahora era el momento, estamos todos vacunados y había que hacerle un funeral, lo merecía" comentaba Xandra Falcó en su llegada a la Basílica junto a su hija. Por su parte Manuel Falcó confirmaba que iban a acudir a la cita sus cinco hijos y su viuda: "Sí, aquí estaremos".
Además, Tamara Falcó contó con el apoyo incondicional de su pareja Íñigo Onieva (31) que prefirió no acaparar la atención a su llegada acompañando a su también amigo Álvaro Falcó (37) en vez de a su novia.
Esther Doña y los hermanos Falcó
Esther Doña, rigurosamente de luto con un discreto vestido negro, llegaba sola y visiblemente emocionada a la Iglesia minutos antes del comienzo del funeral. Confesaba que tenía "muchos sentimientos encontrados" en este esperado adiós que no se pudo celebrar antes por las medidas restrictivas de la Covid.
"Fue la persona que me enseñó y me descubrió lo que realmente es el amor", señalaba muy afectada. Además quiso puntualizar que pese a los rumores que apuntan a que podría haber rehecho su vida sentimental con un acaudalado empresario, "Carlos es el hombre de mi vida, no fue. Es el hombre de mi vida".
Doña desveló que a su marido le hubiese gustado ver a toda la familia unida en su funeral. En ese punto, aclaró que la relación con los cinco hijos de Carlos está "muy bien", y afirmó que "se distorsionó mucho" su llamativa ausencia en el homenaje al marqués de Griñón el pasado 1 de junio en Madrid Fusión; un acto al que la malagueña no acudió porque confesó en sus redes sociales que no la habían avisado.
Los sentimientos de Tamara Falcó
Familiares y muchos amigos de Carlos Falcó se reunieron en una misa funeral en su memoria oficiada por el padre Ángel en la que, además de recordarle con inmenso cariño, se pudo escuchar la mítica canción de My way, de Frank Sinatra, el 'himno' que el empresario siguió durante toda su vida, convirtiéndose en uno de los rostros más queridos de nuestro país.
Pero, además de un homenaje a la figura de Carlos Falcó, su misa funeral ha supuesto el reencuentro público de su viuda y sus hijos que no mantienen una relación fluida. De hecho, en el acto con el que se recordó al marqués de Griñón el pasado 1 de junio en Madrid Fusión y que sí contó con la presencia de Manolo, Xandra y Tamara Falcó, Esther Doña se convirtió en la gran ausente. Tal y como ella explicó a través de sus redes sociales, visiblemente molesta, si no asistió fue porque nadie la avisó del emotivo acto en memoria de su marido.
Existía este lunes cierta curiosidad por el reencuentro entre los hijos del empresario vinícola y su viuda en la misa funeral. Un encuentro del que, desgraciadamente, no se pudo captar ninguna imagen, aunque quienes estuvieron dentro de la basílica comentaron que el encuentro entre ellos fue frío y tenso, principalmente con Tamara, con quien al parecer ya no mantenía una buena relación cuando el marqués estaba vivo (de hecho, no asistió a su boda con Esther).
Sin embargo, tal y como contó la hija de Isabel Preysler (70) -elegantísima de riguroso negro con una sofisticada blusa de manga corta con encajes y transparencias- el reencuentro con la última mujer de su padre fue "fenomenal", aunque prefirió no entrar en detalles sobre el mismo, que habría tenido lugar en las primeras filas de la Basilica.
[Más información: Un año sin Carlos Falcó, marqués de Griñón: cómo ha cambiado la vida de sus hijos y su viuda, Esther Doña]