"Es el mejor de todos los vestidos que he lucido", afirmaba Cristina Pedroche (32 años) con rotundidad apenas horas antes de enfrentarse a sus séptimas campanadas. El reto se antojaba difícil, pero una vez más la presentadora ha causado toda una revolución en las redes sociales y ha agitado las hogareñas cenas de Nochevieja de este atípico 2020 gracias a su llamativo vestido.
La vallecana comenzaba la conexión con una especie de capa blanca, un espectacular abrigo acolchado de más de 100 metros que imitaba a un edredón, porque esta edición de las campanadas ha sido un guiño a los meses de encierro en casa y a la necesidad de ver la luz el año que viene, de ahí su minivestido de brillantes interior con forma de mascarilla.
La espectacular creación lleva la firma de Pedro del Hierro, confeccionado por Nacho Aguayo, director creativo de la prestigiosa marca. Este micro vestido joya ha sido realizado con 16.308 cristales bordados a mano sobre una única pieza, que pretende llevar luz a todas las casas esta noche, y así comenzar el 2021 con la ilusión de los nuevos proyectos.
La firma se basó en el novedoso concepto "Confinamiento Couture": una original idea, pensada por el estilista Josie (40), para rendir homenaje a los que se han quedado en casa de forma responsable este año.
El mensaje de este Fin de Año no podía ser otro que el del recuerdo a los que se han ido por culpa de esta pandemia y aplaudir a todos aquellos que ayudaron y ayudan a combatirla. Pero también ha sido el momento de arrojar un rayo de esperanza, de luz para el nuevo año. Y ese brillo de optimismo ha sido representado en el impresionante tocado de Cristina Pedroche.
Detrás de tal imponente creación está la mente y las artísticas manos del diseñador Olivier Bernoux. El creativo ha realizado el tocado más comentado de esta Nochevieja: una "cascada de luz" para iluminar la oscuridad. La joya está formada por 2021 cristales montados uno a uno manualmente por Maestros Artesanos que necesitó más de 160 horas de trabajo.
Bernoux ideó el deslumbrante complemento nada más recibir la llamada de Josie. El estilista pidió al creativo que diera forma a "una estrella que iluminara el pelo de Pedroche", y consiguió crear el tocado más brillante de la noche más mágica del año.
La luz -en sus diversas formas- es el símbolo que reina en el vestido de Cristina Pedroche para las campanadas 2020 de Antena 3. Este año la presentadora más mediática de las Nocheviejas se ha centrado en la necesidad de irradiar alegría y de abrazar un 2021 prometedor tras 12 meses repletos de tragedia.
Ella misma en primera persona ha experimentado una de las graves consecuencias que ha dejado la pandemia, concretamente, en el sector de la restauración. El pasado 22 de agosto un incendió asoló su restaurante DiverXo de Madrid -en el que su marido es el cocinero y ella la inversora financiera-, y además de cerrar en ese momento, tras la reapertura tuvieron que volver a clausurar el negocio por un positivo en Covid en su plantilla. Este mismo otoño se sumó a su desgracia económica el cierre definitivo de StreetXO London, la apuesta gastronómica que abrió el matrimonio en la capital inglesa hace justo 4 años.
Ya van siete
No hay año que falle. Todas las miradas están puestas sobre la vallecana cada Fin de Año, porque nadie como ella sabe mantener la intriga acerca de su traje en su ya imprescindible presencia en el balcón más famoso del kilómetro cero español.
Este 2020 ha sido el séptimo, pero todo comenzó de forma inesperada en 2014. La presentadora debutaba ante la Puerta del Sol junto a Frank Blanco (44) para retransmitir las Campanadas para LaSexta. Para la especial fecha optó por un vestido de Charo Ruiz en color negro completamente transparente con encaje que cubría lo justo y dejaba ver por completo su ropa interior. Ahí y así se encendió la mecha de la polémica y del debate constante en redes.
Tras las altas audiencias, pasaron a Pedroche a Antena 3 a ser protagonista de la Nochevieja junto a Carlos Sobera (59). En su segundo año apostó por Pronovias y por un diseño muy elaborado con 20.300 cristales incrustados y 350 horas de trabajo.
Siguió confiando en la firma nupcial para el tercer año pero de una forma renovada. Esta vez, y desde entonces, es Alberto Chicote (51) el testigo principal de sus estilismos esa noche. Cristina se vistió con un corsé de escote corazón en terciopelo azul noche con una falda de tul del mismo color con degradé de cristal de bohemia y tiras brillantes que acababan en forma de estrella.
En 2017 no paró de hablar de su "vestido", pero luego resultó ser un mono. Encaje, chantillí y más de 200 cristales bordados también firmado por Pronovias. Pero para el 31 de diciembre de 2018 llegó la revolución. Optó por las manos del equipo de Tot Hom y se enfundó un diseño que Pedroche catalogó de "hada del bosque" y que estaba inspirado en una icónica pieza de Yves Saint Laurent de 1999, que rendía homenaje al medioambiente. Sin embargo, para el resto del mundo era "un bikini floral".
Y en 2019 no fue para menos. Pedroche se quitaba la capa minutos antes de las campanadas y dejaba ver su 'escultural' cuerpo. Nunca mejor dicho. "Se trata de una escultura del artista Jacinto de Manuel. Hecho artesanalmente con pan de oro reciclado y al que su creador ha llamado 'Venus MMXX'", explicaba la presentadora sobre su sorprendente armadura dorada. Además, volvió a hacer una oda al cambio climático y a la necesidad de concienciación, mientras desde el balcón de la Puerta del Sol gritaba a los presentes: "Sí, soy una estatua de Oscar".
[Más información: La "cascada de luz" de 2021 cristales que ha hecho brillar a Pedroche: las claves de su tocado]