El pasado miércoles fallecía Fabiola Domecq, descendiente de uno de los apellidos más importantes en el mundo del toro y el caballo. La ciudad de Jerez de la Frontera, lugar de procedencia de la familia, le ha dado durante la mañana de este jueves el último adiós con una misa funeral oficiada por el obispo de Jerez, José Mazuelos, que ha sido celebrada en la iglesia de Santo Domingo. Un triste momento al que han acudido algunos de los rostros más conocidos relacionados con la tauromaquia.
Fabiola ha muerto a la edad de 79 años en la finca Los Aguijones, ubicada en Cádiz, y propiedad de su familia. Casada con Luis Fernando Domecq Ibarra, fue madre de diez hijos: Fabiola, Luis, María José, Isabel, Antonio, Valvanera, Esperanza, Patricia, Rocío y Reyes. Una numerosísima familia que llora su pérdida.
Los Domecq son muy queridos en la ya citada ciudad gaditana. De hecho, el padre de Fabiola, Álvaro Domecq y Díez, llegó a ser alcalde de dicho lugar. Fama que otras generaciones han perpetuado, pero en este caso en el mundo del arte taurino, como su hermano Álvaro y sus hijos, Antonio y Luis, todos ellos rejoneadores.
Féretro de Fabiola Domecq entrando en la iglesia de Santo Domingo de Jerez de la Frontera.
Gtres
La familia Domecq posee a día de hoy la ganadería Torrestrella, una de las más importantes del país, y su hermano Álvaro es director y técnico honorífico de la Real Escuela de Arte Ecuestre de Jerez. Factores que hacen de este, un apellido de peso en el sector taurino y de la doma de caballos.
El trágico episodio que marcó a los Domecq
En marzo del año 1991, esta poderosa familia andaluza sufrió el mayor revés de sus vidas. Cuatro de las hijas de Fabiola y Luis Fernando -María José, Valvanera, Esperanza y Patricia- perdieron la vida en un accidente de trafico. Un mazazo que no solo golpeó a los Domecq, sino que conmocionó a todo el mundo del toro y la equitación. Las férreas convicciones religiosas de ambos progenitores les fueron útiles para que pudieran reponerse lo mejor posible de la tragedia, que marcó un antes y un después en Fabiola.
A partir de ese momento, la gaditana dedicó gran parte de su tiempo a diferentes causas sociales. Acciones por las que su figura ha sido durante muchos años bastante venerada por parte de sus convecinos, que la han agradecido siempre por su buena voluntad ante los más desfavorecidos.
Numerosos familiares y amigos han acudido a rendir homenaje a la fallecida.
Gtres
Una gran fortuna entre propiedades y negocios
La familia Domecq es una de las más poderosas de la provincia de Cádiz, donde llevan varias generaciones operando en negocios dedicados mayoritariamente al caballo y al toro. A comienzos de este año, saltaba la noticia de la venta de la finca más emblemática que poseían los descendientes del ilustre apellido, Los Albuferos, una extensión de tierra que pasó a manos de inversores extranjeros y por la que lograron conseguir una cifra que gira en torno a los 20 millones de euros.