Alonso Caparrós (48 años) quiere reciclarse y probar cosas nuevas. El hijo del conocido locutor de radio Andrés Caparrós (75) ha dejado en el pasado sus problemas con las adicciones y los tensos momentos que ha protagonizado con su familia en los últimos meses.

Sus enfrentamientos en televisión le dejaron de compensar, y muestra de ello es que desde el pasado mes de noviembre no se ha sentado en ningún plató como invitado para airear sus problemas. Se puede decir que en la actualidad vive su etapa más 'nostálgica', y tras algunas colaboraciones puntuales en Telecinco, ha decidido llevar por todo lo alto su propio espectáculo del que es protagonista: Habemus Furor.

Su show tendrá lugar el próximo sábado día de 6 julio, nada más y nada menos que en Teatro Real Carlos III de Aranjuez, que casualmente es el mismo lugar en el que Isabel Pantoja (62) celebró su reaparición después de su paso por prisión. Con una duración de casi una hora y media, la representación conseguirá hacer rememorar a los más nostálgicos el programa Furor, que supuso todo un fenómeno social en la época de los 90 y que consagró a Caparros como uno de los presentadores por excelencia del momento. En la función, los espectadores serán partícipes de las pruebas del concurso, haciendo así que se transporten a aquella época y que defiendan a uno de los equipos llevándolo a ganar Puntos y Mini-puntos. Una divertido pasatiempo en el que competir sanamente, reír y, sobretodo, pasar un buen rato, es el objetivo principal, todo ello a un precio de 18 euros.

En su última publicación de Instagram, Alonso aparece en la presentación pública de su nueva aventura, donde estuvo acompañado de sus amigos y algunos familiares, como es el caso de su padre, Andrés Caparrós, con el que mantuvo varios cruces de acusaciones durante el pasado año.

Después de la tempestad llega la calma, y parece que la relación paternofilial ha mejorado con creces desde entonces, y es que el locutor no ha dudado en apoyar a su hijo en su nueva proyecto.

En diciembre se alejó de la televisión para ayudar a enfermos

Hace seis meses decidió apartarse del ruido mediático para recuperarse de sus adicciones con las drogas y ordenar sus ideas. En concreto, trabajó mano a mano con la Asociación Española Contra el Cáncer por una buena causa: "Lo está viviendo como una purga personal. El presentador tiene una función muy específica: ni más ni menos que hacer visitas a domicilio y hospitales con el fin de ayudar a menores con enfermedades como la leucemia", contaron a JALEOS en aquel entonces.

Un proyecto, sobre todo humanitario, que le hizo ver "la parte más humana y real de la vida". Él, que ha pasado por situaciones personales muy complicadas a causa de las drogas, "ha visto el sufrimiento y el dolor por las enfermedades" y eso trastocó sus prioridades. 

Sea como fuere, parece que Alonso, que nunca ha tenido reparo alguno en reconocer que el dinero ha sido su principal estímulo en televisión, se renovó por dentro con estas ayudas humanitarias: "Y las que quedan, está muy involucrado y piensa que toda ayuda es poca". En concreto, hay un joven que boxea con la leucemia que le robó el corazón, Javi. "Alonso siente debilidad por él", se deslizó a este periódico. 

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