La exposición pública puede convertirse en la peor de las pesadillas si uno no es capaz de controlarla. Una gran parte de las celebrities aseguran que la fama no es tan bonita como se ve desde fuera y estos últimos días se está probando que la presión puede acabar incluso con tu vida. El ejemplo más claro ha sido el drámatico fallecimiento de la influencer Celia Fuentes, pero Leo Cámara (36), tronista de Mujeres y hombres y viceversa tomó hace unos días la misma decisión que la bloguera, aunque, por fortuna, con final feliz.

Detrás de la historia de Leo se esconden algunos factores en común con Celia. Sufrió un duro golpe sentimental por la ruptura con su última pareja que unido al hecho de cargar a sus espaldas una difícil infancia hicieron que se viera incapaz de seguir adelante y atender las necesidades de sus dos hijas. 

Por ese motivo, hace unos días tomó una de las peores decisiones de su vida e ingirió un bote de pastillas. Sin embargo, poco antes de perder completamente la consciencia vio un atisbo de luz y cogió el móvil para pedir ayuda: "Lo siento. Por favor, llama a un médico". Quien respondía al otro lado no dudó en marcar el número de emergencias y salvar la vida de Leo.

Cuando los sanitarios llegaron a la casa del modelo, se lo encontraron tirado en el suelo, inconsciente y con un gran golpe en la cabeza del que brotaba sangre y un objeto a su lado cuya identificación no ha querido ser transcendida pero que asustó al propio Leo cuando se lo mencionaron.

Según relata Kiko Hernández (41) en su blog, una vez fue trasladado al hospital, le realizaron un lavado de estómago que consiguió que el susto no acabara en algo peor. Tras un tiempo de recuperación, fue dado de alta y permanece en su casa con la mejor de las medicinas: sus hijas.

Alba (15) y Keyra (9) le han expresado todo su apoyo y su amor a su padre. Y Leo ha mostrado orgulloso ambas cartas en sus redes sociales para contar que esas palabras de sus pequeñas son las que le hacen tirar hacia adelante.

La primogénita del viceverso escribía: "Te escribo para decirte que no queremos verte mal, queremos que vuelva el de antes, el que siempre nos gastaba bromas, el que siempre se reía por cualquier tontería. Queremos que vuelvas TÚ. Siempre nos vas a tener aunque haya cosas que no entendamos porque somos pequeñas. Pero siempre, siempre vamos a estar a tu lado. Tú puedes con esto y mucho más, y más si estamos contigo. Te quiero".

Keyra, su hija menor, era más escueta pero mostrando el mismo amor intenso hacia su progenitor: "Hola papá, sé que has estado en el hospital, por eso quiero que estés tranquilo y si quieres pedimos algo de cenar o te ayudo. Bueno, espero que te pongas mejor. Te quiero papá".