Ubicado en Westminster, en Londres, el palacio de St. James es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad británica. No solo por ser un edificio histórico, también por ser el hogar de alguno de los miembros de la Familia Real británica. Entre sus muros residen varios familiares de Carlos III (73 años) como su hermana, la princesa Ana (72); su sobrina, la princesa Beatriz de York (34) y su prima, Alejandra de Kent (86).

Sin embargo, no son los únicos rostros conocidos que lo han elegido para ser su hogar. La pareja formada por Catherine Zeta-Jones (53) y Michael Douglas (78) acaba de convertirse en nuevos inquilinos tras mudarse a uno de sus apartamentos, tal y como asegura el Daily Mail. Se trata de un paso más en su apoyo a la monarquía por parte de la pareja de actores, de ahí que hayan decidido estar más cerca que nunca del rey inglés.

Su idea, según fuentes cercanas a la pareja, es que este piso se convierta en su residencia para los días en los que estén en Londres. "Es perfecto para sus necesidades cuando están en la capital", afirma el citado medio británico. No es para menos, pues se encuentra en una situación privilegiada en la zona más céntrica de la ciudad del Támesis.

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Son varios los apartamentos que la institución tiene en alquiler. Su precio varía según el tamaño, pero el más pequeño de todos, que solamente tiene una habitación, cuesta unas 4.000 libras al mes. El de cuatro dormitorios, por su parte, tiene un precio de unas 20.000 libras mensuales. La primera vez que se pudo alquilar un alojamiento en St. James fue en el año 2015, cuando se dijo que "en teoría, cualquiera puede presentar una solicitud para ser inquilino, pero todos ellos estarán sujetos a controles de seguridad".

El palacio de St. James tiene una importante función ceremonial para la realeza británica. A lo largo de los años se han celebrado allí citas familiares muy importantes, como los bautizos de los príncipes George y Louis. También alberga en sus salones hasta cien recepciones cada año para organizaciones benéficas asociadas con miembros de la Familia Real.

Ligados a la realeza

Con esta sorprendente mudanza los actores de Hollywood dan un paso más en su apoyo a la monarquía británica, que en el pasado también les apoyó a ellos. Especialmente a Catherine Zeta-Jones, que en febrero de 2011 recibió de manos del entonces príncipe Carlos la Orden del Imperio Británico. Se trata de una importante distinción que otorga el monarca a aquellas personalidades que hacen algo significativo en nombre del Reino Unido, como es el caso de la galesa.

"Estoy absolutamente emocionada con este honor. Como súbdita británica, me siento increíblemente orgullosa y al mismo tiempo es abrumador. Mi madre y mi padre están más que encantados de lo que se pueda imaginar", dijo la actriz en aquel momento, tras recibir la condecoración acompañada de su familia.