Los ciudadanos daneses han dado la bienvenida a su nuevo Rey, Federico X de Dinamarca (55 años), después de 52 años al servicio de su madre, Margarita II (83), quien anunció su abdicación en la noche del último día de 2023.

    Ha sido este 14 de enero cuando su decisión se ha hecho oficial y su primogénito le ha relevado en su cargoLa ceremonia ha tenido lugar durante un Consejo de Estado celebrado en el castillo de Christiansborg, en Copenhague, sede del Parlamento.

    La primera ministra, Mette Frederiksen, proclamó a Federico como nuevo monarca a las 15:00 horas desde el balcón del palacio al grito de: "Larga vida a su Majestad el Rey Federico X". Miles de ciudadanos se han agrupado a lo largo del día en las inmediaciones del castillo para celebrar esta nueva era en Dinamarca.

    [Federico X ya es el rey de Dinamarca tras suceder a Margarita II: los detalles de la abdicación y la proclamación]

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    El retrato de Federico X

    Esta es la nueva imagen de Federico X, rey de Dinamarca, tras suceder a Margarita II, su madre, que ha permanecido más de cinco décadas en el trono. Ha sido la Casa Real danesa quien la ha compartido en sus redes sociales. La fotografía fue tomada por Dennis Stenild poco antes de que condujera desde Amalienborg al Castillo de Christiansborg. 

    Casa Real danesa
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    Margarita de Dinamarca, camino de la abdicación

    Margarita de Dinamarca, en su tradicional carruaje denoinado "de las Bodas de Oro", completando el trayecto hacia su abdicación, de apenas kilómetro y medio.

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    El llanto de Margarita II

    "Dios guarde al Rey", exclamó Margarita II, conteniendo las lágrimas, nada más firmar, poco después de las 14:00 horas, su declaración de abdicación en uno de los salones de Christiansborg, la sede del Parlamento y del Poder Ejecutivo de Dinamarca.

    EFE
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    La primera ministra

    "¡Su Majestad la Reina Margarita II ha abdicado, larga vida a Su Majestad el Eey Federico X!". Tres veces gritó estas palabras desde el balcón del Palacio de Christiansborg Mette Frederiksen, la primera ministra de Dinamarca.

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    Las lágrimas de Federico X

    El Rey de Dinamarca, mientras era aclamado por una enorme multitud, en un mar de banderas danesas, mientras saludaba desde el balcón con los ojos enrojecidos por la emoción e intentando contenerse las lágrimas.

    Gtres
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    El agradecimiento

    Las primeras palabras del nuevo monarca han sido dirigidas a su madre, que conserva el título real. "Ella ha sabido unirse con su reino", decía Federico X, que se llevaba la mano al corazón para agradecer las muestras de cariño recibidas.

    Gtres
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    Un beso de película

    Vestida de blanco, la reina Mary saludaba al público y el feliz matrimonio se fundía en un beso de película de lo más romántico, dejando atrás el escándalo relacionado con Genoveva Casanova.

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    Christian, el heredero

    El príncipe heredero Christian, de 18 años, estuvo presente en toda la ceremonia de abdicación de su abuela, ejerciendo de heredero del trono de Dinamarca y acompañando a su padre en este histórico momento.

    Gtres
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    Unión familiar

    Federico X, la Reina consorte Mary, el príncipe Christian y sus hermanos, Isabel (16) y los mellizos Vicente y Josefina (13) saludan a los congregrados.

    Gtres
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    Carroza de las Bodas de Oro

    La Carroza de las Bodas de Oro, negra y tirada por seis caballos blancos, fue utilizada por los nuevos Reyes de Dinamarca, la misma que había ocupado horas antes su madre para dirigirse a Christiansborg. El mismo fue construido entre 1891 y 1892 por el fabricante Schulz en Copenhague y se trata de un regalo de los artesanos a Christian IX y a la reina Luisa por sus bodas de oro. 

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    Las calles danesas

    Las calles de Copenhague se engalardaron este domingo, 14 de enero, para la proclamación de Federico X como nuevo Rey de Dinamarca.

    Casa Real danesa
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    Las inmediaciones del Palacio de Christiansborg

    Con una enorme afluencia de público y bajo un fuerte dispositivo de seguridad, los actos de la proclamación de Federico X tuvieron lugar entre Christiansborg y el palacio real de Amalienborg, y los miles de ciudadanos salieron de sus hogares para vivir esta histórica proclamación.

    Gtres