Charlene de Mónaco (44 años) ha dado positivo por Covid. Según ha comunicado de manera oficial el principado, su salud "no inspira ninguna inquietud", por lo que se entiende que, pese a todo, se encuentra bien. Por esto, la exnadadora sudafricana estará "varios días" en régimen de aislamiento, lo que ha provocado la cancelación de sus próximos actos.
De momento, se desconoce si los otros miembros de la Familia Real, el príncipe Alberto (64) o sus hijos mellizos, Jacques y Gabriela (7) también se han contagiado.
Charlene retomó sus actividades oficiales hace solo tres meses, después de interrumpirlas en mayo de 2021, cuando enfermó en Sudáfrica, su país natal, durante un viaje oficial. Estaba previsto que la princesa reapareciera este domingo 5 de junio en un evento muy especial para ella.
La princesa Charlène junto a sus dos hijos en una imagen tomada en el Sainte Devote Rugby Tournament.
Se trataba del tradicional Riviera Water Bike Challenge 2022, una carrera de relevos de motos acuáticas en el puerto de Mónaco, que busca recaudar fondos para el proyecto Nademos por la seguridad. Este tiene como objetivo sensibilizar y enseñar a los niños pequeños desfavorecidos sobre la natación y la seguridad en el agua. Está organizado por la Fundación Princesa Charlène, así que su presencia estaba asegurada. Sin embargo, su contagio por Covid-19 lo ha cambiado todo.
Una época muy difícil
El último año ha sido duro y doloroso para la princesa monegasca debido a la grave infección de nariz, oídos y garganta que la obligó a permanecer seis meses en Sudáfrica y a pasar por quirófano hasta en tres ocasiones.
Su regreso a Mónaco, el pasado mes de noviembre, parecía el fin de la pesadilla, pero nada más lejos de la realidad. Apenas estuvo unos días con su marido y sus hijos y tuvo que ser trasladada a una clínica suiza para tratar su "fatiga física y mental". Aunque recibió el alta en marzo y se incorporó a la vida pública asistiendo a dos eventos seguidos en mayo, poco o nada se había vuelto a saber de ella.
No se encuentra viviendo en palacio, sino en la finca Roc Agel, la residencia de verano de los Grimaldi, situada en la ciudad de Peille, en la frontera con Francia. Sola, sin sus mellizos y apartada de todos y de todo. Pese a que los rumores de separación son constantes, recientemente salía a luz el acuerdo millonario que habría firmado con el príncipe Alberto para no acabar con el matrimonio.
No sólo eso, desde el Principado y parece que con la oportuna intervención de su cuñada Carolina, Alberto (64)ha establecido que si él muriera, la regencia de su heredero, el príncipe Jacques, recaería en ella y no en Charlène, que únicamente mantendría el tratamiento de madre del rey.
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