Kasia Gallanio, la exprincesa de Qatar, fue hallada muerta el pasado domingo, 29 de mayo, en su casa de Marbella, ciudad que la acogió tas separarse de Abdelaziz bin Khalifa Al Thani (73). En los últimos años, no regresó a los Emiratos Árabes y disfrutó de los privilegios de la Costa del Sol. Así lo reflejaba ella misma en sus constantes publicaciones en Instagram. La cuenta, todavía activa, tiene varios destacados que dejan al descubierto algunos de los exclusivos planes que allí llevó a cabo.
Más allá de sus actividades cotidianas -pilates, gimnasio, peluquería o visitas médicas-, la exprincesa compartía en las redes sociales sus momentos de disfrute en la ciudad que fue su hogar. Kasia, entre otras cosas, formó parte de muchas de las fiestas del exclusivo hotel Puente Romano, donde suelen alojarse los famosos cuando visitan la Costa del Sol.
Gallanio, quien era originaria de Los Ángeles, también frecuentaba el Marbella Club Hotel, un lujoso resort a pie de playa cuya historia comienza en la década de los 40. El cinco estrellas Boho Club, dedicado al descanso y bienestar, era otro de los establecimientos que visitaba la exprincesa.
Pero además de las noches de fiesta, Kasia Gallanio disfrutaba de la gastronomía local y de los puntos más típicos la ciudad andaluza. La exprincesa de Qatar, como cualquier habitante de Marbella, paseaba por Puerto Banús, visitaba las playas y algunos de sus chiringuitos.
En muchos de estos planes, Kasia Galliano coincidió con reconocidos personajes patrios. Destaca Carmen Lomana (73), quien tal y como ha podido conocer EL ESPAÑOL, era muy amiga de la exprincesa de Qatar. En algunas de sus reuniones también estuvieron la novia de Antonio Banderas (61), Nicole Kimpel (39), Francisco de Borbón (43), hijo del duque de Sevilla, la modelo Rosanna Zanetti (33) o el empresario Kike Sarasola (58). De acuerdo con sus publicaciones en stories, con estos dos últimos, estuvo en la Gala Starlite.
Además de estos conocidos personajes, Kasia Gallanio disfrutaba de la vida en Marbella al lado de sus dos hijas mayores, las gemelas Malak y Yasmin. Con ellas, por ejemplo, tuvo la oportunidad de hacer un viaje en helicóptero que les permitió observar la ciudad desde los cielos. A pesar de que todavía son adolescentes, la exprincesa de Qatar mantenía con ambas una gran relación de complicidad. Eran prácticamente inseparables y les gustaban los mismos planes.
Mientras tanto, la menor de las hijas de Kasia, Reem, vive en París con su padre. Aunque el amor por ella era el mismo, en los últimos años apenas mantuvieron contacto, debido a la tensa relación con su expareja.
"Mis dos hijas gemelas querían vivir conmigo y él, como castigo, cortó contacto con ellas. A la pequeña no se le permite hablar conmigo y eso me entristece mucho. Ella recibe muchas cosas materiales de su padre, pero todo es un chantaje. Es muy triste porque extraño a mi hija", expresó Kasia Gallanio durante su primera y única entrevista, emitida un mes antes de su muerte.
El cuerpo sin vida de la aristócrata fue encontrado por la Policía Nacional tras ser alertada por su hija: no respondía a sus llamadas. Los agentes encontraron a la mujer en la cama sin signos de violencia. Hasta ahora se desconoce el motivo de su partida, ya que no ha podido realizarse la autopsia. Sin embargo, algunas informaciones apuntan a que podría haber fallecido por sobredosis de drogas.
Según el conserje del edificio en el que vivía en Marbella, Kasia se mostraba triste en el último tramo de su historia. Además, no salía de casa desde el pasado miércoles, 25 de mayo de 2022, cuatro días antes de darse a conocer su fallecimiento.
[Más información: Primeros datos de la autopsia de la exprincesa de Qatar, Kasia Gallanio, tres días después de su muerte]