De blanco, muy sonriente, y con su estilismo de cooperante, que nunca cambia. Letizia (49 años) ya está en Mauritania, dispuesta a cumplir con una intensa agenda de dos días en el país. Los viajes de cooperación son una parte muy importante en su labor institucional y tras el éxito de su visita a Paraguay el pasado mes de noviembre, llega al país africano para conocer en primera persona el trabajo que la Cooperación Española desarrolla allí en las áreas de salud, gobernabilidad e igualdad de género, desarrollo rural y seguridad alimentaria.

La Reina aterrizó sobre las siete de la tarde de este martes 31 de mayo en el aeropuerto Internacional de Nuakchot y fue recibida por la Primera Dama de la República Islámica, Mariem Fadel Dah. Se reencontraban después de tres meses, cuando ambas coincidieron en Zarzuela con motivo del viaje del presidente Mohamed Ould Cheikh El Ghazouani (65) y su esposa.

También estaban presentes otras autoridades, como la embajadora de España, Miriam Álvarez de la Rosa y el embajador de Mauritania en España, Boubacar Kane. Como detalle curioso del momento de su recibimiento, también la esperaba un comité de bienvenida formado por varios niños que le ofrecieron leches y dátiles, que ella agradeció mostrándose cercana y simpática.

Seguidamente, Letizia y Mariel mantuvieron una charla desenfadada en el pabellón presidencial del aeropuerto, tras la cual la esposa de Felipe VI (54) se fue a descansar. La agenda de Letizia en Mauritania comienza con una reunión en la Oficina Técnica de Cooperación de la capital, como viene siendo habitual en este tipo de visitas. A continuación, podrá informarse de los distintos proyectos de carácter humanitario y de desarrollo que se llevan a cabo en el país.

Visitará una empresa de distribución de pescado congelado para conocer de cerca su funcionamiento y progresos. De ahí se trasladará a la universidad de Medicina de la capital, una cita importante pues tendrá la oportunidad de conversar con varios especialistas sobre sus proyectos de formación y luego sobre el observatorio de género. Letizia siempre está muy volcada en todo lo que tenga que ver con la mujer.

A continuación se desplazará hasta el Centro de Cualificación y Formación en Profesiones Pesqueras en Bellawahk, que promueve la pesca artesanal en espacios naturales protegidos. Y no puede faltar la perceptiva reunión con los representantes de la cooperación española en Mauritania.

El jueves 2 de junio será el último día de su viaje exprés y ocupará su jornada de trabajo visitando un proyecto de producción agrícola y un centro de emergencias. Los niños, como no podía ser de otro modo, estarán muy presentes. Su encuentro más especial será en una asociación de pequeños con autismo, en la que se interesará por su estado y su evolución. El broche final lo pone un almuerzo de trabajo en el Palacio Presidencial con la Primera Dama de Mauritania. Ese mismo día volverá a coger su avión para regresar a España.

En esta nueva visita de cooperación de Letizia se espera que, como sucedió en la anterior, su chaleco rojo esté muy presente, siempre con prendas cómodas y discretas que no desvíen la atención de lo importante.

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