Iñaki Urdangarin (54 años) se ha convertido en el protagonista absoluto de la semana. Los kioscos abrieron este pasado miércoles con las fotografías más sorprendentes del año en las que se podía ver al exduque de Palma paseando de la mano con una mujer que no era la infanta Cristina (56). Antes de conocer la identidad de ella, y en medio de la confusión, la prensa española buscó respuestas en los protagonistas y su entorno y fue entonces cuando los reporteros lograron las primeras palabras de Pablo Urdangarin (21), segundo hijo de la hermana del rey Felipe VI (53) -quien horas después ha visto cómo su éxito mediático se ha multiplicado exponencialmente.

Captado en las calles de Barcelona, caminando tranquilo, el joven no alteró su paso ni rumbo al encontrarse con las cámaras, lejos de todo ello, atendió de forma exquisita a los medios: "Prefiero no decir nada porque es un tema familiar. Pero, ya está... Son cosas que pasan y son cosas que tenemos que hablar en casa, entre nosotros". De esta manera, confirmaba la noticia más importante del año.

La actitud de Pablo Nicolás fue aplaudida de forma unánime tanto por la prensa como por el público, y es que miles de usuarios de las redes sociales plasmaron su asombro ante la educación y el aplomo del joven frente a los micrófonos. Además, horas más tarde, tras conocerse que la mujer de las fotos con su padre respondía al nombre de Ainhoa Armentia (43) y es una compañera de la asesoría judicial en la que trabaja, el mediano de los Urdangarin volvió a toparse con los medios y respondió de nuevo con la misma amabilidad que la primera vez.

Esta conducta de Pablo le ha hecho ganar más adeptos y nuevos interesados en él y en conocer algo más de su vida personal. Pese a que los Urdangarin Borbón son rostros públicos desde su nacimiento, solo se conocen los detalles más asépticos de su trayectoria vital, como los lugares en los que han vivido o los colegios en los que han estudiado. Pero para conocer su faceta más privada resulta imposible acudir a sus redes sociales, pues los cuatro hijos de los exduques de Palma las mantienen privadas. Al menos así era hasta el pasado mes de mayo de 2021.

Pablo o Pablito, que es como se hace llamar en redes, se despojó de la discreción que le caracterizaba en las plataformas virtuales y publicó varios vídeos en una cuenta de TikTok que, como era de esperar, pronto se hicieron virales. En el primero de los clips, aparece haciendo gestos al ritmo de la música, y en el segundo contenido compartido imita las muecas de un TikToker. Estos vídeos enseguida acumularon miles de likes y visualizaciones, pero en los últimos días ha experimentado un ascenso mediático de récord.

Nada más estrenarse el año 2022, las reproducciones de estos dos vídeos se contabilizaban por 363.000 el primero y 306.000 reacciones el segundo. Pero después de que el joven Urdangarin se erigiera casi como el portavoz más sincero y afable de su familia tras el escándalo de su padre, estas cifras de visualizaciones han cambiado drásticamente. En el momento en el que se redacta este artículo, el primer clip de Pablo posee 666.000 reproducciones y el segundo alcanza las 553.000 reacciones de usuarios. Por lo tanto, se puede afirmar que ha duplicado su fama en la mundialmente conocida red social de TikTok en muy poco espacio temporal. También ha aumentado el número de comentarios, actualmente posee medio millar más que antes de la comentada portada de Lecturas. Asimismo, la cifra de 'me gusta' también ha sumado unos miles en las últimas horas.

A pesar de lo poco que deja ver de su vida más privada, los usuarios están mostrando interés por conocer más sobre él, y, más aún, desde que se ha dirigido por primera vez a los medios y ha respondido en primera persona y de forma madura. Pero nada más se puede saber sobre su lado más íntimo, pues mantiene privada su cuenta de Instagram, donde ha publicado apenas 12 post y roza los 1.000 seguidores.

Bastante alejado, como se ve, del mundo de las redes sociales, el joven Urdangarin se centra en sus estudios y en su trayectoria deportiva. Pablo estudia en la universidad, concretamente está matriculado en la EU Business School, una reconocida escuela de negocios privada donde cursa Empresariales. Además, el pasado 23 de octubre, el Palau Blaugrana de Barcelona le vio debutar como estrella del Barça del equipo de balonmano. Jugó su primer partido y triunfó en la liga ASOBAL con la camiseta culé donde se podía ver estampados su número, el 77, y su apellido, Urdangarin; como si de un deja vú se tratara, pues su padre se convirtió en uno de los mitos del club y siempre lució el 7 en su dorsal.

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