El truco infalible para hacer un pollo asado que se desprende del hueso

El pollo asado es una preparación muy sabrosa que habitualmente se suele reservar para fines de semana u otros días especiales para disfrutar en compañía de familiares o amigos. Por ello, no es raro verlo presente en los menús y cartas de distintos restaurantes a lo largo de toda la geografía española.

Sin embargo, para poder disfrutar de la mejor receta no es necesario que salgas de casa, ya que, aunque no tengas muchos conocimientos de cocina, podrás conseguir el mejor resultado si sigues nuestras indicaciones. Además, te contamos el truco de la abuela para hacer un pollo asado que se desprende del hueso.

Las propiedades de la carne de pollo

Antes de explicarte paso a paso como preparar el mejor pollo asado, es necesario recordar las propiedades de la carne de pollo, que van mucho más allá de ofrecer un excelente sabor o su gran versatilidad a la hora de preparar diferentes tipos de elaboraciones.

[15 recetas de pollo asado con y sin horno para chuparse los dedos]

Esta carne es una gran fuente de proteínas, además de que tiene poca grasa, lo que hace que sea ideal para incluir en dietas de adelgazamiento. Además, tiene una elevada cantidad de minerales como zinc, sodio, calcio, hierro, magnesio y potasio.

Ingredientes

Preparar un pollo asado es muy sencillo y requiere de muy pocos ingredientes, además de que todos ellos podrás encontrarlos en cualquier tienda de alimentación o supermercado. Para nuestra receta necesitarás:

• Un pollo de corral de 1,5 kg.
• 60 ml de aceite de oliva virgen extra.
• 1 limón.
• 3 dientes de ajo.
• Tomillo.
• Sal y pimienta al gusto.

Cómo preparar pollo asado

Lo primero que debes hacer para la preparación de esta receta de pollo asado es disponer todos los ingredientes mencionados sobre la encimera en la que vas a realizar la preparación, de manera que tengas todo a mano para preparar la receta y puedas elaborarla de la forma más cómoda y rápida posible.

Una vez con todos los ingredientes dispuestos en el lugar de la cocina usado para la preparación de la receta, es necesario que limpies bien la carne. Es frecuente que cuando compras un pollo pueda tener algún tipo de pluma o pelo, por lo que debes limpiar y revisar si las tiene para, en ese caso, quitarlas. La mejor forma de hacerlo es haciendo uso de un mechero y quemándolas.

Una vez con la carne limpia, será el momento de preparar un majado de limón con ajo. Para ello habrá que machacarlo bien todo con ayuda de un mortero, para luego untarlo sobre el pollo.

[Pollo asado: cómo conseguir que la piel quede muy crujiente]

A continuación, se debe continuar preparando el aliño que le da al pollo asado un sabor tan rico. Por ello es el momento lo que hay que hacer es embadurnarlo con una mezcla de tomillo y aceite de oliva. Asimismo, también es momento de agregar tanto sal como pimienta, al gusto.

El truco de la abuela para que e pollo asado se desprenda del hueso

Si quieres que el pollo te quede lo suficientemente tierno como para que puedas desprender la carne del hueso con una gran facilidad, puedes hacer un truco infalible, que es el de la abuela y que consiste en coger un trozo de papel de aluminio y envolver el pollo que va a ser convertido en pollo asado.

Horneado

Ahora llega el momento de cocinera esta receta de pollo asado que está espectacular. Para ello habrá que introducirlo en el horno y cocinarlo a 190 grados centígrados durante una hora y 15 minutos. Sin embargo, para conseguir darle el toque tierno que hace especial a esta receta necesitas hacer algo más.

Una vez que el pollo asado lleve una hora en el horno, debes sacarlo para quitarle el papel de aluminio y proceder a subir la temperatura a 240 grados centígrados para que se cocine a esta temperatura durante 15 minutos más. En el caso de que hagas esto, el pollo va a quedar con un resultado muy tierno.

Pasado este tiempo podrás sacar el pollo asado del horno y estará finalizada la receta. Ahora tan solo te quedará sentarte a la mesa par poder disfrutar de este sabroso plato antes de que se enfríe.

¿Con qué acompañar el pollo asado?

A la hora de preparar un pollo asado tenemos diferentes opciones a la hora de elegir guarniciones y acompañamientos, como es el caso de las siguientes:

• Patatas: sin lugar a dudas las patatas son el acompañamiento estrella y el más habitual a la hora de disfrutar de un buen pollo asado. En este sentido puedes optar por patatas asadas o fritas, y estas pueden ir solas o acompañadas de alguna salsa como alioli o mayonesa.
• Ensaladas: otra opción es optar por una ensalada, que es siempre una buena opción tanto por su sabor como por tratarse de una elaboración saludable. Existen infinidad de posibilidades y combinaciones, por lo que tienes gran libertad para elegir. Además, si te sobra pollo, puedes preparar unas sabrosas ensaladas con él.
• Arroz: el arroz puede ser un excelente acompañamiento para el pollo asado. Además, se puede servir tanto hervido como dentro de una ensalada ligera, algo especialmente recomendable en el caso de que estés preparando un pollo asado para disfrutarlo en los meses de verano y busques que el plato sea más refrescante.
• Verduras: esta es una excelente opción para acompañar el pollo asado, pudiendo prepararse de muchas formas diferentes: al horno, a la plancha, a la brasa, hervidas…