Hay muchas maneras de comer pescado. En esta ocasión te ofrecemos la posibilidad de prepararlo sin necesidad de utilizar los fogones de la cocina o el horno. Se trata de una receta pensada para el verano, aprovechando las altas temperaturas, pero que también puede encajar en otras épocas del año. Se trata del tartar de salmón, que es una propuesta muy interesante por sus propiedades nutritivas y su sabor.
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Además, no tendrás que invertir demasiado tiempo y mucho menos manchar o dejar malos olores en tu casa. En este artículo queremos darte las claves para realizar un tartar perfecto, que sea capaz de sorprender a los paladares más exigentes.
Sin lugar a dudas, este plato se encuentra de moda y hoy en día resulta muy sencillo encontrarlo en la mayoría de restaurantes. Toma nota y aprovecha para sorprender a tus invitados con una receta diferente.
El origen del tartar
Hay que decir que el término tartar surgió para referirse a la elaboración que se realizaba con carne cruda macerada y que iba acompañada de salsa tártara. Con el tiempo, este término también se ha usado para denominar a otras recetas que se preparan con pequeños trozos de carne o pescado, casi picados, acompañados por otros ingredientes como encurtidos, frutas o verduras. A ello se le suma también un aliño especiado que le dará un toque diferente.
Por lo tanto, encontramos muchas clases de tartar, siendo las más frecuentes en la actualidad las de pescado. A destacar la facilidad en la preparación y lo saludables que resultan.
¿Por qué triunfa el tartar de salmón?
El tartar de salmón ha conseguido ganarse un hueco en muchos menús. En algunos establecimientos suelen servirlo con un poco de arroz, pero en esta ocasión vamos a decantarnos por la versión que incorpora el aguacate. Por lo tanto, conseguiremos hacer una receta rica en proteínas y grasas saludables.
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Contará con menos de 250 calorías por cada 100 gramos y hay dos maneras a la hora de presentarlo. Puede ser mezclando los ingredientes u ordenarlo por capas. Cualquiera de las dos alternativas es válida, y conseguirás que resulte muy atractiva a la vista.
No te llevará mucho tiempo hacerlo y posiblemente no lo conviertes en algo excepcional en tu casa. Una vez que pruebes a realizarlo querrás repetir en más ocasiones.
Ingredientes necesarios para esta receta
Los ingredientes que se precisan para este plato son muy sencillos de conseguir. Hay que decir que ni el salmón ni el aguacate son los productos más asequibles de la cesta de la compra, pero la rapidez con la que podrás hacer la receta lo compensará todo.
A continuación te detallamos los ingredientes necesarios para hacer el tartar de salmón con aguacate para cuatro comensales.
- 300 gramos de salmón fresco sin espinas.
- Un aguacate grande y maduro.
- 30 gramos de tomate fresco.
- 30 gramos de cebolleta.
- Una cucharadita de vinagre de manzana.
- 5 ml de salsa Perrins.
- 5 ml de salsa de soja.
- 2 cucharadas de aceite de oliva.
- Zumo de medio limón y sal.
En el caso de que no te convenza la opción del pescado crudo, siempre tienes la posibilidad de recurrir al ahumado. El crudo es preciso congelarlo durante al menos cinco días si se ha comprado fresco. Será la forma de evitarse riesgos por anisakis.
Cómo preparar el tartar de salmón
Para la elaboración del tartar de salmón nos ayudaremos de un cuchillo bien afilado, evitando de esta manera que el pescado quede excesivamente machacado y pierda su textura.
Comenzaremos picando el salmón en trozos finos. Para que nos resulte más sencillo, en primer lugar, lo haremos en filetes, luego en tiras y a continuación en trozos pequeños. Nos ayudará mucho a hacerlo si el salmón se encuentra ligeramente congelado.
El siguiente paso nos llevará a añadir el pescado cortado en un bol grande. Ahí lo aliñamos con aceite de oliva virgen extra, vinagre, zumo de limón, salsa de soja y salsa Perrins. Le incorporamos sal al gusto, aunque con bastantes precauciones, ya que la salsa de soja ya suele resultar bastante salada por sí misma.
Cuando acabemos con esta tarea taparemos el recipiente con film transparente y lo introduciremos en el frigorífico media hora.
No podemos pasar por alto una técnica muy empleada en la cocina como es la del marinado. Se trata de ablandar un alimento con un líquido con el propósito de que coja sabor y se ponga más tierno. También ayuda en la conservación de la comida.
En cuanto a las verduras, hay que pelarlas y trocear el aguacate, la cebolleta y el tomate. Una vez cortadas las reservaremos en otro recipiente y retomamos la tarea con el salmón una vez transcurrido el periodo de reposo.
Será el turno de mezclarlo con las verduras y removerlo bien, pero con cuidado de que no se deshaga el aguacate. Una vez que acabemos habrá que cubrir de nuevo el bol y lo meteremos otros 30 minutos en el frigorífico. Con el segundo macerado se consigue que el sabor sea más intenso y sabroso, mezclándose mejor los sabores.
En cuanto a la presentación, por lo general suele utilizarse un molde redondo, en donde iremos añadiendo la preparación. Una vez que acabemos se le puede dar un toque distinto a la decoración colocando un poco de cilantro o cebollino picados. Dependerá del gusto de cada uno.