En mayo de 2021 Samsung anunció la llegada a Europa de la gama de frigoríficos y congeladores Bespoke. Una ambiciosa estrategia que además del electrodoméstico de altas prestaciones llevaba el diseño y la personalización a la cocina.

Entre colores, acabados y configuraciones podemos encontrar hasta 20 combinaciones dentro de la gama Bespoke de Samsung. Un auténtico hito en este tipo de electrodomésticos para la cocina: donde antes era difícil salir del blanco y el acero inoxidable ahora podemos introducir diseño y acabados que aportan muchísimo.

En COCINILLAS llevamos varias semanas probando el frigorífico y congelador twin, dos modelos de 60 centímetros que se pueden montar uno al lado del otro para crear un grandioso y espacioso frigorífico-congelador de 120 centímetros de ancho y un total de 710 litros de capacidad. Son concretamente los modelos RR39A746339/ES y RZ32A748539/ES.

Personalización y diseño

La característica principal de este frigorífico (y congelador) es sin lugar a dudas el diseño y la personalización que nos permiten en un electrodoméstico que tradicionalmente siempre ha tenido un acabado poco atractivo.

El aporte en diseño es absolutamente diferencial. Nosotros hemos incluido el Samsung Bespoke en una casa nueva, diseñada por nosotros, y poder elegir exactamente el color que queríamos, el formato de puertas y distribución, ha sido de extrema utilidad para que el frigorífico aporte en lugar de restar al diseño total de la casa.

Existen cinco colores diferentes para elegir entre la gama de Bespoke:

• Satin Beige. Es el que hemos elegido como principal, un color que combina perfectamente con el blanco del resto de la cocina.
• Glam Navy. Un color muy atractivo, atrevido y que aporta muchísimo valor en diseño.
• Satin Sky Blue. Muy bonito y delicado, combina con cualquier color.
• Glam Lavender. Se trata de un color más atrevido para el que quiera contrastar y destacar el frigorífico.
• Glam Peach. También atrevido pero algo más discreto que el anterior.
• Blanco. Clásico y adaptable a todos los diseños.
• Inox. Un modelo que destaca por su altísima eficiencia energética.

Pero no hemos llegado a lo mejor, y es que el Bespoke tiene los paneles personalizables e intercambiables, por lo que si lo compramos en un color pero con el tiempo lo queremos cambiar para darle un aire nuevo a la cocina podemos hacerlo sin ningún problema.

El sistema de intercambio por pestañas permite modificar el color del frigorífico de forma muy fácil. Por eso nosotros hemos elegido el Glam Navy como segundo color, teniendo el Satin Beige como principal que se integra mejor en la cocina, pero el Navy de secundario para esos días que nos apetece dar un toque diferencial a la cocina en el que destaque más el frigorífico.

Apostar por el diseño y la personalización de Bespoke es un enorme acierto de Samsung.

Máxima capacidad

Algo que me obsesionaba a la hora de elegir frigorífico era la capacidad, el espacio útil real que tenemos para almacenar ingredientes y alimentos. Cuando te dedicas a la gastronomía el espacio del frigorífico acaba siendo una de las cosas más importantes de la cocina, y estaba cansado de encontrar frigoríficos enormes por fuera, pero sin demasiada capacidad en el interior.

Con Bespoke encontramos en este frigorífico de Samsung la tecnología SpaceMax, que permite minimizar el grosor de las pareces y, por tanto, maximiza el espacio interior manteniendo el mismo tamaño exterior.

Con esta solución conseguimos capacidades de 387 en el frigorífico que estamos probando de 60 cm de ancho y de 323 en el congelador de 60 cm. Pero la diferencia también se nota en los modelos combi, que tienen un total de 344 litros de capacidad en su interior, sumando frigorífico y congelador.

En el exterior no notamos ninguna diferencia, y de hecho el acabado es espectacular, con líneas rectas y modernas. El aumento de esta capacidad interior no afecta para nada la parte exterior, y son todo beneficios para aquellos que siempre lo tenemos lleno.

Eficiencia energética

Los frigoríficos y congeladores Bespoke de Samsung cuentan con diferentes tecnologías y mejoras que ayudan a mejorar la eficiencia energética, reduciendo consumo y ayudando a desperdiciar la menor energía posible. De hecho, el Bespoke Inox tiene la mejor etiqueta energética de su categoría con una A, algo muy poco habitual en el mercado.

Para ello encontramos tecnologías como Metal Cooling, una placa metálica localizada en el interior del frigorífico que reduce la dispersión del frío cuando lo abrimos. Lo que hace es acumular frío para que cuando abramos y cerremos la puerta no se pierda tanta temperatura, y así gastamos menos energía en volver a enfiarlo.

También tenemos mejoras como el cajón Optimal Fresh+, que nos permite elegir el tamaño y la temperatura de cada zona, pudiendo guardar por ejemplo carne y pescado en la parte izquierda a -1 ºC y verduras a la derecha a 1 ºC. Esto permite que los alimentos duren el doble de tiempo y está disponible en los modelos combi.

Los frigoríficos Bespoke cuentan con el Compresor Digital Inverter, que ajusta automáticamente la temperatura y la humedad entre 7 niveles según las necesidades, para de ese modo ayudar a ahorrar energía.

En el caso del congelador twin podemos convertirlo por completo en un frigorífico, por si en algún caso necesitásemos el doble de capacidad.

Samsung Bespoke, el frigorífico para la cocina moderna

Después de varias semanas con un Bespoke en casa se me haría muy difícil volver a otro modelo de frigorífico, especialmente en cuanto a diseño se refiere. El frigorífico es un elemento que destaca muchísimo en la cocina, y tener uno con la estética y diseño tan atractivo, que además permite una personalización en colores, es maravilloso.

Además hay que sumar grandísimas ventajas, sobre todo para los que nos dedicamos a la cocina, que permiten aumentar la capacidad de almacenamiento sin tener que sacrificar el espacio que ocupa.

Samsung Bespoke es el mejor y más atractivo frigorífico que he probado nunca.